Estoy viva

158 6 3
                                    

No estoy bien.

Posiblemente nunca lo estaré.

Aunque me sature como hoy estoy agradecida de no estar bien.

Porque dentro de lo malo que me cobija un techo también lo hace.

Porque paso mis tragos amargos pero tengo bocado que calle mi hambre.

Porque innumerables lágrimas han bañado mi rostro ahogándome en llanto pero he gozado de la lluvia que me ahoga en mi silencio escuchando su recital.

Las veces que he dado mi amor más puro nunca me ha sido devuelto pero he tenido la grandeza de sentirlo y vivirlo a pleno.

Por qué quejarme si mi imaginación o mi entereza puede escribir lo que quiero para mí.

¿Por que me desborda tanta presión?

Ciertamente.

Pero cada “no estoy bien” deberíamos continuarlo con un “aun así”

No estoy bien porque todo se me hace cada vez más lejos “aun así” intento siempre un poco más.

No estoy bien porque me he acostumbrado demasiado a vivir con nudo en la garganta “aun así” nunca me falta un motivo para sonreír de verdad.

No estoy bien por querer a alguien que nunca me querrá “aun así” le sigo queriendo porque me es invaluable su amistad.

Un “no estoy bien” es una lección de vida que se debe aprovechar.

Si fuiste tan valiente y certero para notar y aceptar que no estás bien tienes control para remediarlo.

Chocolates de formolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora