XVI. El Charro Negro

1.4K 48 7
                                    

Lugar: México

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Lugar: México


Origen temporal

 México en la época colonial.


¿Quién es el Charro Negro?

Se trata de un ente que recibe su nombre por la vestimenta que usa. Siempre que se aparece porta un elegante ajuar de charro en color negro con detalles de oro o plata. Se le puede ver montado en su corcel negro (suele aparecer en llamas).

Existen varias versiones de esta leyenda dependiendo de la región de México en donde sea contada, sin embargo, aunque puede variar en ciertos aspectos, mantiene su esencia.


La historia más popular

La leyenda cuenta que en un pequeño poblado de México vivía una muchacha llamada Adela, una mujer de deslumbrante belleza que era muy coqueta con los hombres. Se trataba de una joven despreocupada para su época; mientras las demás se quedaban en casa atendiendo a los hombres, ella prefería vivir la vida libremente. Siempre que salía de casa, la dama, vanidosa y orgullosa de su hermosura, no dudaba en coquetear con todo hombre que le hiciera cumplidos o le ofreciera obsequios, y por tal motivo no era vista con buenos ojos.

Cierta noche, la muchacha quedó en verse con uno de sus pretendientes, pero en el camino vislumbró, a lo lejos, a un charro montado sobre un caballo negro aproximándose en dirección a ella. Al llegar a su lado, el caballo se detuvo y Adela quedó deslumbrada por el jinete, puesto que era muy lindo, al igual que el traje de charro color negro que éste vestía (una chaqueta corta, camisa blanca, pantalón ajustado, sombrero de ala ancha y botas negras); sin dudas, un hombre que llenaba de sobra sus gustos ambiciosos. Tras una amena conversación, el charro invitó a subir al caballo a la muchacha, quien aceptó sin vueltas olvidando que ya tenía otra cita pactada.

En cuanto la chica subió, el hombre inició rápidamente su cabalgata, tras lo cual el caballo creció de repente duplicando su tamaño y se encendió en llamas que envolvieron al jinete y a la acompañante. Adela gritó pidiendo ayuda e intentó bajar del caballo, pero nada funcionó.

El charro misterioso no era otro que el mismísimo Diablo, quien había ascendido desde el infierno en busca de alguna bella dama para llevarla con él; Adela fue la desafortunada. Al aceptar acompañarlo, se había vuelto propiedad del demonio.


Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Mitos y leyendas del mundoWhere stories live. Discover now