5.- Condiciones I.

1M 87.3K 39.8K
                                    

—¡Pero dije por favor, Collins! ¿Qué no pensaste esto? ¡Es tu hermanito! ¿Nate? ¡Nate te estoy hablando! —alcé la voz poniendome frente a él.

—Lo sé nena, te estoy ignorando. —habló él y yo totalmente ignoré el hecho de que me haya llamado 'nena' y le quité el mando del juego.

—Por favor, Nate. Es de suma importancia. Le prometí a Theo que te convencería. Si no fuera por él, prometo que no estaría aquí. Ni siquiera sé como es que me tragué el orgullo para estar aquí frente a ti rogando. ¡Por favor! —lo removí de los hombros captando su atención por primera vez desde que entré.

—¿Vas a seguir molestando como un mosquito hasta que te diga lo que quieres oir?

—No. Porque sé que aceptaras. Porque donde pongo el ojo va la bala y condenamente sé que lo vas a hacer. —él me dedico una de sus sonrisitas, haciéndome sonreír también, pero luego se puso serio.

—No, ya dije que no. —volvio a sonreír y se dirigió a su cama, para acostarse boca abajo mientras apoyaba su nuca en sus dos manos hacia atras. Yo negué con la cabeza y me lance sobre él.

—¡Nathaniel Collins! ¡No seas así! Deja de lado un día tu orgullo y cumple el deseo de tu hermano menor, solo quiere ver a su familia unida por un día. Quiere verte a ti. ¿Sabes? Casi no te conoce, te ve solo cuando le permites entrar y es solo por unos minutos. ¿Crees que es sano para un niño de casi cinco y una niña de casi tres? ¡por supuesto que no! ¡y es terriblemente injusto! Por favor, hazle ese favor a tu familia, de pasar un lindo día juntos. —puse mi mejor cara de perrito triste, sacando el labio inferior. Por lo que me permitía, contando el hecho de que estaba sobre él imponiendo todo mi peso para que se aburra y acepte. Él fácilmente se levantó haciéndome caer de costado y luego ser atrapada por sus brazos de cada lado de mi cabeza.
Knock, knock. ¿Cerebro, estás ahí? ¡Despierta Abril!

—Aceptaré con un par de condiciones.

—Dime cuales entonces, niño rico. —asentí dándole paso para hablar.

—Numero uno, que tu estés conmigo en la fiesta en caso de que pase algo. —¿qué algo podría pasar en una fiesta infantil junto a su familia? De todos modos asentí.

—Y lo segundo te lo diré luego de la fiesta.

—¿Qué me va a garantizar de que no sea una renuncia, por ejemplo? —fruncí el ceño y él rio.

—Aunque la idea suene muy tentativa, no será así. He notado que mi familia, sobre todo mis hermanos te han tomado cariño y aprecio eso. En especial de Theo ya que que él no es precisamente el niño más tranquilo. —yo rei y asentí— Es un poco hiperactivo, pero no es para tanto. Ahora, Collins. Preferiría que alejes tus brazos de mi para poder pararme y alejar mi humanidad de la tuya, o empezaré a creer que te gusto. —él rio separandose de mi, dando espacio para que pueda levantarme— Entonces, ¿es un trato? —Estire la mano, él sonrio y la estrecho. Para luego jalarme y plantar un pequeño beso en mis labios, yo lo mire, casi con la vista desorbitada por tal barbaridad— ¿q-qué rayos?

—Buenas noches Abs. —guiñó el ojo y prácticamente me empujó fuera de su habitacion.
Este chico me iba a sacar canas verdes. Y si volvía a hacer eso, su descendencia estaría en juego.
Mecompadezco de su futura esposa.

                        
                                      -×××-

—¡Abby, por favor! ¡solo quiero saber qué te dijo mi hermano!

—No enano. Trae el balón. —me tapé el rostro esperando a que lo haga.

—¡Pero mi cumple es mañana! —se quejó poniéndose en cuclillas para dejar el balón frente a mí.

True ColorsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora