cuatro; Kent

32.9K 3K 1.4K
                                    

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


Martes

Río con euforia mirando en dirección a mi mejor amigo, que por primera vez lo veo muy guapo ¿Qué demonios acabo de pensar? Está bien, al fin y al cabo, estoy borracho. Desvío para analizar el suelo y por primera vez me siento como si estuviera flotando ¿por qué la puerta se está moviendo?

No quiere que la penetre con la llave, no puedo evitar soltar una carcajada una vez más. Que pensamientos más asombrosos me han atravesado la mente ¡Me han atravesado, atravesado!

—Abre la puerta, carajo —apresura mi mejor amigo.

—No puedo —arrastro mis palabras para mirarlo fijamente, veo a otro hombre igualito a Newt, ¿desde cuándo Newt era un gemelo? — La puerta se mueve demasiado, más puertas —me defiendo con el ceño fruncido.

—¿Puerta? —Escuchó su voz clara— ¡Dame! —Me arrebata las llaves de un jalón para intentar, la puerta parecí estar a su favor.

Maldita puerta traicionera, te voy a quemar para que se le quite lo fácil.

Este hombre parece que tiene mucha astucia, porque abre la puerta de inmediato, además llama a una de las mujeres que ayuda en la casa. Una de las señoras se acerca a mí con velocidad para ayudarme a mantenerme sobre mis pies. Hago una mueca de asco cuando sus manos me sostiene de los hombros, me sacudo de un lado a otro para zafarme de su agarre, pero esa mujer tiene una fuerza exorbitante.

¿Quién se cree esta mujer para tocarme?

¡Me va a llenar de gérmenes pobres!

¿Dónde está el cloro?

—Yo puedo. —Golpeo sus manos para alejarla de mi—. No necesito ayuda —rectifico con un aire de superioridad, la elegancia era importante, sin importar cuan borracho me encontrase.

Esa mujer se aleja de mí con el ceño fruncido, yo puedo caminar. No soy un mocoso de un año quien necesita ayuda. El mundo se está moviendo ¿por qué han puesto este nuevo sistema de seguridad para la casa si es imposible moverse?

Siento el frío barandal de las escaleras sobre mi antebrazo, ¿cómo le hacen para que vuelan esas cosas? ¿Por qué las escaleras están dando vueltas? ¿Dónde está el botón de apagado?

—¡Newt! —carcajeo, buscándolo con la mirada.

¿A qué hora se volvió invisible?

—Idiota —responde a la par mía, suelto un brinco de sorpresa—. Quiero pizza, ordena, por favor —suplica haciendo un mohín con sus labios.

—¡Sirvienta! ¡Pizza! ¡Ahora! —ordeno, moviendo mis labios, girando mi cuerpo para observarla—. Él y yo —indico con el dedo índice—, habitación.

La sirvienta desaparece de mi vista, sigo indicando con la cabeza las escaleras.

Todos los días subo y bajo constantemente esas escaleras ¿por qué ahora es tan difícil?

Mi pizzera es una idiotaWhere stories live. Discover now