Capítulo 07: Acosadora.

17K 1.4K 755
                                    

Las lágrimas caen de mis ojos y se deslizan por mi nariz, hasta mi mejilla izquierda y finalmente fundirse en mi almohada. Los gritos y la pelea han sido tan recientes que hace que mis sollozos sean más fuertes aunque trato de amortiguarlos lo más que puedo. Sigo escuchando el partido de fútbol en el piso de abajo. Mi habitación está cerrada con seguro para que Ethan no entre. Ha ido muy lejos esta vez.

Apenas llegue de mi salida con Dalia, luego de que me pasara a dejar me encontré con un asco en la comedor de la cocina, y fui inmediatamente a donde Ethan para decirle que limpiara. Pero no me percate que entre la suciedad, envoltorios de hamburguesa y papas, también había latas de cerveza. No reacciono para nada bien y los gritos no se hicieron esperar. Trate lo más que pude de disculparme con él pero estaba tan alterado y yo...yo simplemente no pude evitar que casi estrellara una lámpara justo en mi cara. Salí corriendo hacia mi habitación mientras los lamentos y disculpas de Ethan me seguían.

Yo ya no puedo aguantar esto. No debo soportar su actitud irresponsable y violenta. No debería vivir con el temor de que se emborrache un día de estos y no pueda hacer nada para huir de sus impulsos violentos, pero es lo único que me queda, es la única familia que me queda en este momento y no quiero perderlo, no quiero dejarlo solo.

Me levanto de mi cama para ir al baño y lavarme la cara. Estoy tan cansada de llorar. Estoy tan cansada de no poder hacer nada para ayudarlo. Estoy tan cansada de que no quiera escucharme.

Abro el grifo del lavabo y dejo que el agua haga un pequeño charco en mis manos para luego estrellarlo contra mi cara. El agua fría se siente bien y quita es rastro de las calientes lágrimas de mi rostro. No pasa mucho tiempo cuando escucho que el televisor es apagado y Ethan se levanta para abrir la puerta, ya que alguien parece buscar allá afuera. Ruedo los ojos. Va a traer a una de sus chicas otra vez, y voy a tener que aguantarme todas sus guarradas y su griterío.

Siento las risas de la chica y mi hermano subiendo por la escalera y se detienen en ciertas partes de esta. Creo que no pueden aguantar hasta llegar a la maldita habitación. Siento como torpemente tratan de abrir la puerta y finalmente lo logran, para luego cerrarla de un portazo. Esa es mi señal para abrir con precaución la mía. No me quedaré aquí escuchando. Tomo mi bolso, un poco de dinero y un abrigo por si llega hacer más frío del que ya hay. Bajo las escaleras rápidamente hasta encontrarme con todo el chiquero de Ethan en el comedor y los trozos de vidrio de la lámpara que casi estrella contra mi cara. No puedo irme sin limpiar este desastre.

Tomo una escoba y una pala para rápidamente juntar todos los trozos rotos de la lámpara y botarlos en el cesto de la basura. Con el mantel que está debajo de toda la basura de comida y demás, lo envuelvo todo y lo voto en el cesto. Un mantel menos, pero quedan siete más, así que supongo que no importa. Boto un gran suspiro y abro la puerta para largarme de ahí.

Una vez afuera no sé muy bien hacia donde ir. Podría llamar a Dalia para pasar un rato juntas, pero me preguntará qué es lo que ha pasado para que decidiera salir de mi casa, y lo menos que quiero es ponerla al tanto de la borrachera de mi hermano y su amiguita en la casa. Suspiro, no tengo muchos amigos con los cuales salir y eso me hace darme cuenta de lo patética que soy. Ni siquiera Dalia es solamente mi amiga como ella lo es para mí. Ella tiene muchos amigos. En la secundaria y en la universidad, y yo soy simplemente la lapa que siempre está a su lado a donde quiera que ella esté.

Me propongo dejar de pensar así y tratar de sobrevivir sola. Las cosas que no fueron cuando tuvieron la oportunidad de ser, ya nunca serán.

Me pongo a caminar y decido en el trayecto que me gustaría ir al parque de atracciones que está cerca de aquí. Sé que no es lo mismo ir sola que acompañada, pero supongo que servirá para distraerme. Voy a la parada de autobús que siempre tomo para ir a la escuela y lo hago detenerse cuando veo que llega. Mi corazón da un vuelco cuando me subo y lo primero en lo que pienso es la posibilidad de que el chico, Harry, esté ahí, pero lo quito de mi mente. Él debe estar en la librería trabajando.

𝐁𝐎𝐎𝐊𝐒: Como si me leyeras ☕︎︎ 𝐡.𝐬Where stories live. Discover now