Quiero Ser Tu Chico Malo |Bryan Mouque|

Capítulo 20

Miré el agua de las olas sobre mis pies y comencé a caminar por la playa justamente donde llegaba el agua en la orilla. El aire fresco hacía que mis cabellos se alborotaran hacia distintas direcciones.

Sentí una mano en mi hombro la cual de una manera lenta comenzó a mover mi hombro para después agitarlo de una manera muy desesperada.

Con pocas ganas y algo molesta di la vuelta, pero, sorpresivamente caí.

-Auch- me quejé en el suelo

-Lo siento- respondió incandose a un lado mio -Es que no despertabas y ya nos tenemos que ir.

-Ayudame a levantarme, Aborito- pedí - ¿Qué hora es?

-Son las seis- me respondió al mismo tiempo que me ayudaba a levantarme -Y todos ya están en el automóvil esperándonos, así que, vámonos.

Asentí con la cabeza mientras tomaba mi móvil de la mesa de noche.

En menos de diez minutos, apenas estábamos acercándonos a el automóvil.

Aborito abrió la puerta dejándome entrar primero y prácticamente siendo ignorada por los chicos y las chicas.

Caminé dentro del automóvil hasta llegar a los últimos asientos solo con un único objetivo, sentarme junto a Bryan.

- ¡Me duele el trasero, Aborito!- le reclame.

No podía evitarlo, me seguía doliendo.

Aunque, no pude evitar sentir las miradas de sorpresa de todos dentro del automóvil.

¡Que mal pensados son!

-Me caí de la cama- me encogí de hombros

-Ya te dije que tu no despertabas- se excusó Aborito.

-No fue mi culpa no haber dormido bien anoche - reclame recordando lo sucedido.

------- FLASHBACK -------

-Bryan- le hablé por tercera vez.

Ya habíamos llegado al hotel, el cual estaba repleto de coders en la entrada y según Aborito, dentro había unos cuantos reporteros tratando de entrevistar a los chicos.

-Bryan- intenté de nuevo y nada.

¡________, piensa!

Una gran idea vino a mi mente, valía la pena intentar.

Acerque mi rostro hacia él, Bryan, y le di un beso en la mejilla esperando que esto funcionará.

-Bryan- volvía darle un beso en la mejilla -despiertate- le di otro beso -Ya llegamos.

-Mm- se removió en el asiento. -Si medas uno aquí - a punto a sus labios - me levantó.

Bryan si que sabe negociar y para mejorarlo no era un mal trato.

-Bueno- acepté y sus labios se transformaron en una linda sonrisa.

Volví a acercar mi rostro, ahora con una única dirección: sus gruesos y carnosos labios. Ahora que lo pienso, me encantan sus labios.

Uní nuestros labios en un lindo y sencillo beso.

-Debí de haber pedido más que uno- comentó después de separarnos.