Los Videntes [En edicion]

48: Dos horas

Ivy:

No me asusté, para ser sincera, he soportado mucho dolor por mucho tiempo, pero aún así no me siento lista, ¿de verdad me va a torturar como a Jared? ¿O cómo a esa vidente que está en la mesa? Tenía miles de moretones y heridas en su piel oscura descubierta.

—No te asustes —dijo una voz grave detrás de mi— no te haré daño... —se quitó la máscara, era el mismo verdugo que nos visitó, el mismo que salvó la vida de Jared...

Sentí el alivio inundarme

—¿Qué estás haciendo? ¿por qué le hiciste daño? —alcé la cabeza hacia la chica desmayada en la mesa mientras el verdugo desamarraba mis muñecas

—No soy el único verdugo... no pude hacer más por ella, agradece que aún no está muerta

—¿La salvaste?

—Ayudé a salvarla, desde que la inquisición se mudó aquí, algunas personas de esta religión parecen mostrar que están en contra de lo que están haciendo, el otro verdugo está muerto, se suicidó, salvar a esta chica fue lo único que pudieron hacer, los que protestaban están encerrados, cerca de donde estabas tú... junto con un rabino —Extendió una botella de agua hacia a mí que acepté

—¿Y por qué está amarrada?

—Aún no asimila que el peligro pasó, es por nuestra seguridad... no la desamarres si no quieres terminar herida

Asentí y di un trago de agua, después el verdugo me dio pan y lo comí, parecía agotado y preocupado.

—Por cierto —Aclaré mi garganta— Jared rescató al vidente que transmite sus sentimientos... su nombre es Kyle, es muy inteligente y valiente

—Así era Kim, siempre determinada sin temor a nada...

—Su madre murió, no pudieron salvarla, el padre sigue vivo, pero vendrá por él después...

—Quisiera verlo...

—Quizá puedas... —suspiré mirando a la chica, después reaccioné— ¡Espera! Tú puedes ayudarme a salir de aquí ¿puedes? Debo salvar a Jared

—No puedes... estamos rodeados, de hecho tendré que esconderte y decir que estás dentro de la dama de hierro, porque vendrán tarde o temprano...

—¿Y si me ayudas a escapar y aún así dices que estoy ahí dentro?

—No hay oportunidad

Grité de frustración y lancé la botella de agua. No sé de donde salió tanta rabia, hacía tanto que no tenía una reacción así.

—Sigue así —él dijo con voz tranquila— así pensarán que estoy haciendo mi trabajo

No quería obedecerlo, pero no pude evitarlo. Después de todo estuve en un centro psiquiátrico.

Grité una vez más, mi garganta desgarrándose y mi grito tan agudo, mi frustración expresada en un gran grito.

¡Jared idiota! Si tan sólo me hubiera escuchado, faltan dos horas, en dos horas él estará muerto.

Jared:

Con mi capa cubriéndome el rostro tomé el brazo de Lisa, pudimos entrar sin problemas, Lisa dijo algo como "Tengo noticias de los demás videntes... " y la dejaron pasar, la persona que cuidaba me dedicó una mirada extraña, pero Lisa dijo que siempre que la dejaban pasar alguien con capucha la sostenía así, en pocas palabras yo me estaba haciendo pasar por un monje.