Las Crónicas del Ángel de la Muerte

Creaciones imperfectas-EDITADO

Saya

Era indispensable que llegara con Miku, todo estaba borroso, y mis extremidades inferiores estaban tan pesadas ya no era un ángel, se podría decir que nunca lo fui, solo necesitaba advertirle sobre lo que harían en el juicio de Vania.

La estaba viendo entrar en una de las casas clausuradas, la ciudad estaba vacía, todos habían ido al juicio, y necesitaba llegar y contarle.

Mi vista se nublaba, me alegraría de sentir todo esto si no fuera que el fin se acercaba inminentemente.

La arena hacía que mi avance fuera más lento de lo normal, tenía que ponerle fuerza a cada zancada para seguir avanzando, era agotador.

La ciudad estaba a obscuras y mi pobre visión no ayudaba en mucho, varias veces me topé con las construcciones. Dudé varias veces que hubiera visto a Miku, era mucha coincidencia, podía ser otro ángel blanco, o tal vez estaba alucinando, pero confiaba en que no estuviera equivocada. Era mi última esperanza.

Entré al lugar en donde creí que Miku entró, estaba tan feliz de que no estuviera desvariando. Sin embargo todo fue engullido por obscuridad total, recordé lo que Gabriel dijo, mi sacrificio le había ayudado a crear un híbrido que le ayudaría a abrir la puerta multidimensional.

Sus seguidores, simples marionetas, le festejaban su osadía, pero muy en el fondo sentí que implicaba que haría lo posible para erradicar al ser supremo que se encontraba dentro de esa puerta, simplemente no lo podía permitir.

Fabio rondaba mis pensamientos continuamente, verlo destrozado por haberme convertido en un ángel blanco... al principio no entendía a Fabio el porqué del odio hacia los alados blancos, hasta que entendí que estábamos reducidos a creaciones imperfectas, la carencia de "humanidad" nos hacía prisioneros y cómplices de lo que estaba por ocurrir.