Liam es el mismísimo cabrón que vino a cambiarme la vida con sexo. Tiene unos dotes que le hacen hacer lo que quiera, cuando quiera. No es romántico, no necesita serlo. Es el puto rey del placer y lo sabe. No está dispuesto a dar más y si lo hace, jamás será amor. Concidir en aquel club fue lo mejor y peor de mi vida; lo mejor porque sé que no tendré un orgasmo mas increíble, lo peor porque hace que me meta en un laberinto sin salida.