Proyecto escolar.
Palabras que juntas, no le agradaban para nada a Mark, más aún cuando implicaba algo grupal. De tan solo pensar en ello se le revolvía el estómago.
—Será un trabajo en equipo.
Quería llorar. Lo último que quería hacer era trabajar con alguien más.
—Harán un trabajo en equipo, pero será en conjunto con otros cursos — señaló sonriente el mayor — Como bien sabrán, se acerca el final de segundo semestre y como todos los años, haremos una feria.
El maestro seguía hablando totalmente emocionado, porque a diferencia de "otros", le encantaba que la gente se relacionara e hiciera amigos. El trabajo en equipo era muy importante para él.
Que tenía cierto sentido, pues a la hora de trabajar y comenzar la etapa adulta, uno debía relacionarse en demasía con los demás. Incluso si no debías ser amigo de alguien, debías aprender a tratar correctamente con las personas.
Consejos de un sabio maestro que era ignorado por todos los adolescentes del salón.
—Trabajarán con los de primer año, en grupos que por supuesto serán designados por mi — el rubio ignoraba todo mientras jugaba con su lapicero mirando la ventana — Sí, Jaemin, lo digo por ti, se muy bien que tienes un grupito de amigos de primero y que ustedes juntos no hacen ni uno.
El nombrado solo hizo un puchero, colocando su mano en el pecho y miró triste al maestro, recibiendo las risas de los demás compañeros, quienes conocían la extrovertida personalidad del pelirosa.
—El proyecto de los primeros y terceros años va a ser una obra dramática. Mañana iremos al gimnasio a ensayar.
La clase terminó y también la felicidad de Mark.
Esto de las obras no era algo que le agradara, después de todo eso implicaba contacto y vida social con más personas ajenas a él. No era un ser asocial ni nada por el estilo, pero a veces tendía a ser más llevado a sus ideas. El trabajo en equipo, como dice el nombre, no era individual, por lo que se tenía que tomar la opinión de todos, y a veces, no le gustaba ese tipo de forma de evaluar.
Creía que podría mostrar mucho mejor sus conocimientos y habilidades trabajando solo.
—Ojalá me toque ser el actor principal, así podrán ser los afortunados de besarme — habló mientras daba besos al aire con un aire infantil.
—Pobres los que tengan que si quiera respirar tu aire, puaj — miró al castaño haciendo un mueca de asco, pero rió levemente al verlo hacer un pequeño puchero — Además de que ni si quiera sabemos de qué es la obra, porque si es de asesinato dudo que debas andar besándote con alguien, señor romántico.
—Eres un agua fiestas — lo miró con aburrimiento — ¿Qué no ves que la historia de amor entre un asesino y un detective es tremendamente romántica? — señaló divertido.
Mark rodó los ojos para posteriormente dirigirse a la cafetería, pero con Taeil, claro, quien seguía dando sonoros besos al aire.
A veces se cuestionaba si el chico podría ser serio en algún momento de su vida.
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—Creo que ya saben lo básico acerca de la obra — habló — De todas formas, en el primer ensayo se les explicará todo correctamente.
Varios chicos asintieron, comenzando a cuchichear entre ellos y dejando en el olvido al tutor. El hombre puso ambos ojos y terminó por añadir:
—Por cierto, la obra será Romeo y Julieta, es clásica y a todos les gusta, espero que no tengan problema con ella — indicó el adulto, intentando explicar que la idea de esto es que fuera fácil, no algo que les complicara la vida.
Mark escuchó un pequeño grito a su costado.
No le gustaban las obras, pero esperaba que fuese fácil y sin demasiado problema. Bueno, quizá no fácil, pero que al menos la disfruten.
—¡Te dije que sería romántica! — se burló divertido — Me debes diez chocolates, tonto — dió saltitos y chillidos escandalosos salieron de su boca, siendo observado por algunos chicos, pero pronto el mayor se calló y volvió a mirar serio.
—De todas formas, será levemente adaptada, ya que así será más fácil de entender — dijo el adulto, con cierta intención de motivarlos — Tampoco les haría mal leer el libro, al menos así pueden aprender más sobre clásicos e...
Lastimosamente, fue interrumpido abruptamente por el timbre, siendo ignorado por medio salón, quienes salieron como animales desesperados en busca de libertad.
—"Romeo Y Julieta" es una buena historia — dijo un conocido pelirosa, el cual se acercó al profesor compadecido. El hombre solo rodó los ojos, pero al final terminó hablando sobre la importancia de obras antiguas con emoción. El alumno lo escuchaba divertido, pero a fin de cuentas, atento.
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—¿Disgustado? — preguntó Taeil, recibiendo un asentimiento de parte del menor — Al menos piensa que es una nota fácil. Harías un exelente papel de piedra, ¿sabes?
Rió, pero Mark solo imitó su voz y rodó ambos ojos de color chocolate. Era claro que no era de sus actividades favoritas, pero trataba de verle el lado bueno. Nota fácil y qué podría ayudarlo en algún momento.
—Supongo que es mejor que tener que dar una prueba de setenta ejercicios — Taeil movió repetidas veces su cabeza, recordando momentos horribles con la antigua maestra de química.
Bastante terrorífico.
Ambos estuvieron unos minutos allí, de vez en cuando charlando y riendo.
Los días pasaban y ambos estaban de cierta manera ansiosos. Taeil bastante más que Mark.
Tampoco iba a negar que el rubio ojeó alguna vez un vídeo de Youtube con la obra. Esperaba ser algún personaje sencillo, pero que le deje una buena calificación.
Pasaba los recesos con Taeil y en ciertos momentos se topaba con el chico topo. Incluso si ya eran días, al parecer el rencor duraría años. No sabría decir si él era más idiota por no saber disculparse correctamente, o si el pelirrojo un infantil por chocar bruscamente cada que pudiera y luego sonreír tierno.
También había que recordar que se metía a pasar tiempo en un casillero. No era necesario explicar el por qué era extraño.
๑❥๑
El día había llegado.
Probablemente, su verdadero fin. Había rezado unas cuantas veces en su cabeza con el fin de que el universo, Dios y todo los seres milagrosos, su pusieran de su lado por hoy.
Salieron del salón hasta llegar al gimnasio, encontrándose con una considerable gran cantidad de alumnos, todos de primer año. Luego venían ellos, llenando casi por completo el lugar. No era agradable y deseaba irse los más pronto posible.
A Mark nunca le habían gustado las multitudes y tampoco pretendía hacerlo.
Una cabellera rojiza y un pequeño chico abriéndose paso entre los empujes fue divisado por Mark.
Solo gruñó, intentando desviar su mirada del menor.
Le sorprendía que no les doliese cada empujón del chico, porque si bien, a penas era una centímetro más bajo que él, físicamente se veía mucho más bajo, incluso más joven, posiblemente debido al corte de cabello y la ropa colorida que usaba, además de casi siempre usar chalecos.
—¡Atención! — habló fuerte el ya conocido maestro — Vamos a dividir los grupos ahora mismo para comenzar a explicarles que deberán hacer.
Se formó un silencio notorio, mirando todos atentamente al profesor, de quien a su lados aparecían tres alumnos más.
—Ellos son mis ayudantes — señaló con sus manos a los chicos — Ellos se encargarán de guiar a algunos grupos. Son bastantes alumnos, por lo que es obvio que no podremos supervisar a todos.
La mayoría asintió, todos razonando lo mismo y más aún conociendo lo bulliciosos que eran.
—¡Hola! — una chica castaña saludó sonriente a los demás recibiendo reverencias.
—Hitomi estará encargada de supervisar al grupo que hará las decoraciones y todo lo relacionado al escenario.
Era bajita y de cuerpo delgado. Tenía un cabello liso y bastante largo, aunque con ondas en las puntas, decorado con dos pequeños lazos. Iba con un vestido azul con encajes, el cual combinaba con su aspecto dulce y tierno.
—Dios santo, ¿En serio puede existir gente tan tierna? — el castaño la observaba con ternura, aunque media audiencia lo hacía.
Mark seguía con su rostro serio.
No iba a negar que estaba muerto de nervios. No le gustaba demasiado actuar, porque tampoco había hecho una papel más allá de ser un árbol bailarín en primaria, pero hacer decoraciones se le daba fatal, incluso si lo intentaba, sería un peligro tenerlo en esa sección.
Pronto, se presentó otro de los alumnos, nuevamente, una chica.
—Hola — saludó sonriente — Soy Seulgi, encargada de los actores y del avance en su personaje — una chica que a penas pasaba el metro sesenta sonrió amable y saludó a los demás, para luego ser acompañada de otro chico algo más serio y tímido, quien al parecer se llamaba "Renjun", el cual solo hizo una reverencia respetuosa hacia los alumnos y maestros.
Así pasó el tiempo en que nombraron a los grupos, quedando separados ambos chicos y siendo llevados directamente a practicar.
De alguna manera, era algo triste el estar lejos de él. Si ya a penas hablaba en lo normal, ¿Cómo lo haría con desconocidos? Todo era complicado. Si bien, Taeil a veces era un idiota, también era su amigo.
Al menos, se hubiese sentido mejor estando con quien hablar y bromear.
Definitivamente apestaba.
—Chicos, los guiones están listos. Los chicos del club de escritura son bastante productivos, así que hoy escogeremos directamente a los actores — Seulgi, quien era la encargada de ellos y el tema de la práctica, era alguien bastante agradable y comprensiva.
—¿Puedo ser yo? — habló Eunwoo, un chico que ubicaba debido a participar en varias obras y perteneciente a la academia de actuación.
El pelinegro tenía bastante talento, pues el rubio había visto una que otra vez al más alto actuar en pequeñas obras escolares. De todas formas, también tenía en cuenta lo mucho que se esforzaba, pues sus habilidades eran naturales, pero era la persona quien debía pulirlas y saber aprovecharlas.
—Tristemente no, el maestro Taeyong decidió hacerlo por azar — señaló empática — Lo ideal es que prueben algo nuevo y puedan obtener nuevos conocimientos.
Mierda.
Eso era peor, porque no estaba en sus planes trabajar con alguien, aún menos si no lo conocía. Bueno, si le tocaba ser una planta o una roca no habría mayor problema.
La castaña comenzó a revolver la bolsa, dejando con intrigas a todos, porque los primeros nombres serían los de los actores principales.
Al rubio ya ni le importaba quien llegase a interpretar, una nota es una nota, así que si le tocaba ser una piedra, intentaría ser la mejor piedra existente. Obviamente esto no incluía alguno de los repartos principales, ya que quería salir rápido de ello y evitar demasiado problema.
Le rezaba a todos los dioses griegos y los de aquellas leyendas que leía en la clase de literatura, porque lo último que quería era ser actor principal. Era un trabajo pesado y de mucha interacción. Pasaba totalmente de ello.
—¡Romeo será Mark!
Quiso llorar ahí mismo.
La joven anunció alegre, pero pronto cambió su rostro a una expresión confundida y curiosa.
—¿Quién es Mark? — la castaña preguntó, mirando en su mano el papel arrugado que sacó de la pequeña bolsa que contenía todos los nombres de los estudiantes reunidos en aquél lugar.
El rubio levantó la mano, siendo visto por algunos chicos, pero se mantuvo en su lugar.
—Oh, bueno, ahora veremos quien hará de Julieta — Seulgi revolvió los papeles dentro de aquella bolsa, recibiendo múltiples miradas.
El asunto, era que si bien, Mark repudiaba el exceso de gente y hablar demasiado, a los demás alumnos no les ocurría lo mismo.
Romeo era Mark, así que claramente querían estar en el papel de Julieta. Era una oportunidad de oro, imposible de desperdiciar, porque incluso si el rubio tenía una cara desagradable casi a diario e ignoraba a quien se le acercara, excluyendo a Taeil, claro, muchos adolescentes se sentían atraídos a él. Tenía una apariencia llamativa, pero una personalidad horrible. La gente sabía cómo era, pero a pesar de ello, se ilusionaban pensando que podrían ablandar su frío o malvado corazón.
Algo que era poco probable que pasara.
—Lee Donghyuck... —habló dudosa.
Sintió fallar su respiración y abrió los ojos lo más grande que pudo. Sus piernas tambalearon levemente y sus ojos se cerraron con fuerza a la vez que fruncía su ceño.
Dios santo, su suerte era del asco. Solo le pidió una cosa al mundo y ni si quiera eso pudieron cumplir.
Esperaba que se ubiesen referido a otro Lee Donghyuck, no le importaba si era el gemelo perdido o algo raro, solo quería que no le tocase con él.
Ni si quiera podrían trabajar juntos.
—¿Pero no es un chico? — su salvación había llegado, ahora solo le tocaba esperar a que el chico dijera que no quería ese papel y todo fuera relativamente bien
Pero claro, hoy, nuevamente, no era su día de suerte.
—Si, lo soy, ¿pero qué tiene? — la voz aguda del pelirrojo en forma de protesta y con un leve enojo se hizo notar, moviéndose un poco entre la gente para así ser visto.
—Oh, es que Julieta es mujer, entonces creí que sería más conveniente dárselo a alguna chica.
El pelirrojo bufó y se acercó un poco más.
—¿Y qué tiene?, creo que perfectamente podría interpretar el papel, soy un chico, pero como dijo el maestro, vamos a adaptar la obra — respondió seguro — Además, sé bastante respecto a actuación, y también he de decir que he leído el libro. Es una buena oportunidad para modernizar un poco la historia.
Hubo un breve sonido de asombro, a la vez que comenzaban cientos de murmullos respecto al menor.
—Entonces... ¡claro! — sonrió alegre — Ahora que tenemos los principales seguiremos con los demás, Mark, Hyuck, siéntense allí mientras. Lo mismo para a los que les vaya asignando un personaje.
Ambos asintieron.
La chica seguía revolviendo la bolsa y nombrando más papeles extraños.
Uno se quería morir y el otro buscaba quien era el tal "Mark".
Pero claramente Donghyuck no sabía quien era Mark y el rubio estaba más preocupado pensando acerca de cómo desaparecer.
—Oh, ¿quién es Mark? — el pelirrojo preguntó inocente, pero chocó con el rubio, quien solo rodó los ojos y frenó frente a él — Disculpa, estoy buscando a Mark, permiso.
Cuando estaba a punto de irse, el mayor tomó de su brazo, haciendo que se diera la vuelta de manera abrupta, quedando frente al chico, mostrando casi inmediatamente su ceño fruncido y un rostro aturdido, pero su confusión aumentó al escuchar al contrario reír sarcásticamente.
—Ese Mark que buscas soy yo, me llamo Mark, Mark Lee.
—¿Qué?, no, no, no, no quiero actuar contigo — en seguida retrocedió unos pasos y negó moviendo su cabeza.
Era obvio que ninguno de los dos quería. Involucrar notas y gente desagradable jamás era buena combinación.
—¿Tú crees que yo sí? — preguntó — Hubieras rechazado el papel en cuanto me nombraron, genio.
—¿Y cómo querías que yo supiera quién eras?, si lo hubiera sabido ni si quiera hubiera dado mi discurso, me hubiera negado y en este momento sería un sol feliz en la obra.
—Bueno, que pena, pues a mi también me hubiera gustado ser una jodida piedra.
Luego de su pequeña discusión, se dieron cuenta que estaban siendo observados por los demás.
—Oh, veo que no se llevan muy bien... — habló la chica castaña, pensando en qué hacer.
—Lo quiero reventar a golpes y en lo posible dejarlo estéril, por favor, no lo soporto y él tampoco a mí — respondió ansioso — Si digo respirando el mismo aire que él me moriré por contaminación y seguiremos infestado el mundo, es muy mala idea.
Donghyuck hablaba y hablaba, ya sonando como incoherencias, pero desesperadas porque notaran que no podían trabajar juntos, sencillamente no.
—Oh... — pensó por unos segundos, tratando de buscar una solución y siendo observada por ojos rogantes — ¡Entonces esta es una buena oportunidad para que ambos logren descontaminarse! — Seulgi los miró con falsa alegría, pues muy en el fondo tenía cierta diversión. No les iba a dar preferencia solo porque se quisieran matar a golpes. Debían aprender a convivir como adolescentes medianamente maduros — Mejor intenten llevarse bien desde ahora, porque no les cambiaré los papeles, chicos.
Y vaya que lo harían.
—🖇️—
Sí , hola de nuevo.
Nuevo capítulo , yesss.
Aviso actual: estoy editando los caps, pero en realidad no va a cambiar en casi nada a la historia original, solo edito escenas y corrijo ortografía.