Corrí hacia el balcón donde habíamos aterrizado y me impulsé para volar hacia el Bifrost. Con el aire chocando contra mi rostro vi como un gran perro que pensaba atacar a todas las personas que estaban en el puente.¡Perro! Mierda, Watson; ya volveré por él. Descendí frente a los ciudadanos dispuesta a hacer un escudo que proteja a todos, pero Hulk lo tomó de la cola alejándolo y cayendo ambos al mar.
Un gran número de esqueletos se acercaron a atacar. Mi primera idea fue controlar sus mentes, gran error, eran muertos ¡____ tonta! En el instante que me di cuenta de ello, uno logró hacerme un gran corte en el brazo derecho, saliendo la espada por el otro extremo. ¡Mierda!, otro llego por mi espalda pero Heimdall logró evitar que se acercara más.
- Mi reina, ¿puede seguir?.-habló formalmente mientras evitaba que algún otro de los revividos asesinara a alguien.- ¿Puede curarse?
- Gracias, Heimdall. Podré seguir con la izquierda.-pateé a uno hacia las aguas turbulentas.- Lo malo de no haber entrenado lo suficiente la magia es que -me agaché y golpeé otro en las piernas.- necesito concentrarme mucho. Frigga estaría decepcionada.
- La reina Frigga estaría orgullosa de usted.
Sonreí pensando en esa idea, Frigga murió protegiendo a su pueblo, evitando que los elfos obtuvieran la gema. Yo estaba dispuesta a hacer lo mismo. Loki, ¿llorarías por mi muerte? , aunque siempre dices que los sentimientos no están en tu naturaleza, pero justo por esa razón es que eres el Dios de las Mentiras. Porque el "yo no amo a nadie" es tu mayor mentira.
Uno de los revividos me tomó bruscamente del brazo herido, por lo que gemí de dolor. Suspiré y decidí concentrarme totalmente en lo que pasaba y no en lo que podría pasar. Sin embargo, el tener un brazo inmóvil no me ayudaba, intenté usar un poco de telequinesis con la izquierda pero otro me tomó la extremidad, impidiendo que lo moviera. Vi como este sacaba su espada y tan solo cerré los ojos esperando lo que tuviera que venir. Pero los abrí rápidamente al escuchar el sonido de ambos cuerpos estampándose contra el suelo.
- ¿Cómo estás? Soy Korg y el es Nick .-una gran masa de rocas viviente me saludó. En este punto de mi vida ya no estoy entendiendo nada.- Vamos a abordar esta nave y saldremos de aquí, ¿Quieres venir?
Volteé mi mirada hacia la neblina que se había formado y distinguí una capa en ella... ¿acaso?
- ¡Su salvador está aquí! - Loki, hijo de... lo amo demasiado.- ¿Me extrañaron? - todos lo veían con admiración y agradecimiento, después de todo su rey había llegado para salvarlos.
Me levanté del suelo cuidando mi brazo herido, viendo como él se acercaba con una sonrisa despreocupada, como si no me estuviera desangrando.
- Les haré caso, a ti y a Thor.- puso sus manos sobre la gran herida y en un par de segundos pudo curarla. Él era un hechicero entrenado por años con una de las mejores brujas, yo solo lo había hecho por un mes.- Puedo ser más que un traidor. Un buen rey y buen esposo.
- Te amo, Loki.
- Y yo a ti, preciosa.
Nos sonreímos mutuamente para luego ir a luchar junto a los demás. Él sacó sus preciadas dagas y yo los combatía con telequinesia. Usaba las espadas de los revividos que ya habían caído para apuñalar a los que seguían luchando. ¿Quién te conoce Matilda? Soy el más perrón aquí.
De repente el cielo se tornó oscuro y un gran rayo impactó sobre el palacio. Los revividos empezaron a correr hacia quien había aterrizado en el Bifrost, Thor. ¿Ese era el poder del Dios del Trueno?, tal vez sí teníamos oportunidad de ganar. Unos fuegos artificiales sonaron a mi espalda y vi como Valkiria salía de la nave destrozada con una sonrisa triunfal.
Loki y yo combatíamos espalda con espalda. Su casco cayó rodando hacia el borde del puente pero con mis poderes lo traje hacia mi y me lo puse, creí que sería más pesado.
- Te queda muy bien, mi reina.- me guiño un ojo y reí.
- Llegaste tarde.- Thor se acercó a nosotros cuando ya no habían más enemigos de pié.
- Perdiste un ojo.- molestó mi pelinegro.
- Esto aún no acaba.- Valkiria señaló con su espada a Hela, quien se acercaba lentamente.- Debemos disolver a los revengadores.
- Golpeala con un buen rayo.
- Ya la golpeé con el rayo más fuerte de la historia, ¡y no le hizo nada!
- Debemos pararla justo aquí.- informé.- Mientras más tiempo pase en Asgard, más poderosa se vuelve.
- ¿Qué haremos entonces?.- cuestionó Val.
- No voy a hacer el ayúdenme.- Loki miró a su hermano, esperen, ¿qué es el ayúdenme? Dio unos pasos adelante y volteó a ver a las personas que aun subían a la nave.- Padre dijo que Asgard no es un lugar, es su pueblo.- ambos hermanos se miraron, supongo que recordando lo que Odín les dijo antes de que muriera.
- ¡Loki, debemos de causar el Ragnarok! La corona de Surtur, la bóveda.
- ¿Muy atrevido, no? Hasta para mi.- sus esferas verdes se posaron en mi.- "Protegerte a ti ante cualquier adversidad. Y amarte hasta el final de mis días..." es hora de cumplir mis votos.
Corrió por el puente, yendo a cumplir el plan que solo él y Thor habían entendido. El rubio se lanzó nuevamente contra su hermana, pero ahora siendo resguardado con sus rayos. Valkiria y yo lo apoyamos mientras esquivábamos sus dagas de obsidiana. ¿Dónde hay un pico de diamante cuando lo necesitas?
No contamos con que Hela haría una daga lo suficientemente grande como para atravezar parte de la nave. Más revividos hicieron aparición intentando subir a matar a las personas, empecé a correr hacia ahí pero escuché un sonido familiar para mi, armas. Cuando un asgardiano saltó a volver a matar a los enemigos pude ver que eran armas de Stark Industries.
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Loki corría por los pasillos del que un día había sido su reluciente castillo. Sin embargo detuvo grotescamente sus pasos al ver un ser muy conocido para él en el suelo. Sin pensarlo mucho levantó a la mascota muerta de su esposa en sus brazos. No sería Surtur el único que reviviría.
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Me arrastré muy mal herida por el suelo del puente mágico. Si creía que los ataques de los enemigos anteriores habían sido contundentes, Hela les ganaba por lejos. Tenía heridas profundas en casi todas las partes de mi cuerpo, la mayoría en mis piernas por lo que no podía ni levantarme. Jesucristo bendito coge mi alma y has con ella lo que quieras. Aun así intentaba curar a Valkiria que estaba en peor situación que la mía.
- Hela, ¡ya basta! .-Thor se levantó con sus últimas energías.- Si quieres Asgard, es tuyo.
- No estoy para juegos, her-ma-ni-to.
Estiró su brazo hacia nosotras y de este salió una daga muy afilada en dirección a la morena. No, no dejaría que ningún asgardiano más muriera. Puse mi cuerpo frente al de ella para que no saliera herida. Sintiendo un dolor en mi hombro, no pude aguantar más tiempo conciente.
[...]
Escuchaba un par de voces que se oían lejanas. ¿¡Valkiria está bien?! Me removí cuidadosamente en mi lugar, al parecer estaba echada en una cama.
- ______, ¿te duele algo?-una voz gruesa pero dulce.
- La curé, Thor.- su hablar era inconfunfible para mi.- ¿Linda?
Abrí mis ojos encontrándome con ambos hermanos viéndome expectántes.
- ¿Dónde estamos?- mi garganta estaba seca, por lo que mi hablar fue rasposo.
- Thor, trae agua.- mandó Loki sentándose en el confortable colchon.-En la nave que le robé al Gran Maestro.
El rubio salió de la habitación dejándonos solos.
- ¿Qué sucedió? -cuestioné poniendome a su altura. No sentía dolor alguno y mis heridas habían sido curadas, supuse rapidamente que fue gracias a él.
- Surtur destruyó Asgard.- jugó con sus dedos nervioso.- Soy el peor rey del universo.
- Si no hubieras llegado todos estaríamos muertos. Nos salvaste, Loki.- mis dedos viajaban por su oscura cabellera.- Asgard sigue aquí, en las personas. Pero necesitamos un rey, sin más mentiras.
- Sin más mentiras... -su mirada buscó la mía- Te lo prometo, desde ahora seré un buen rey, también un buen esposo. No te defraudaré, amada mía. Seremos felices.
- Júralo, Loki.
- Lo juro por lo que más amo. Lo juro por ti, mi reina. Seamos felices y formemos una familia.
Posé mi palma en su frente para persibir sus pensamientos, en estos no encontré ninguna pizca de malicia. Él... lo estaba diciendo de verdad. Sin mentiras.
- Hay que ser felices, mi rey.- sonreí mientras lágrimas salían de mi rostro por la emoción.
- Protegeremos a nuestro pueblo.- posé mi cabeza en su hombro.- ¿Juntos?
- Juntos.
Thor volvió a ingresar con un vaso en mano, pero alguien entró más rápido que él. ¡Watson! Apenas me vio subió a la cama para lamerme toda la cara.
- ¡Mi bebé! -lo apachurré en mis brazos mientras reía por las cosquillas que generaba su áspera lengua- Sobreviviste al ataque de la fea Hela -jugué con sus mofletes.
- Bueno, la verdad es que... -Voltee a ver a el rubio pero Loki lo golpeó en el estómago para que dejara de hablar.
- No le hagas caso, es más músculo que cerebro.
- No me golpees o haré el ayúdenme.- Loki palicedió, arqueé una ceja al no saber de lo que hablaban.- Los están esperando afuera, majestades.
Decidí no indagar en lo anterior. Me levanté para cambiar mi vestimenta y peinado con un poco de magia, como si fuera cenicienta.
- ¿Lista? -mi rey me ofreció su mano para salir juntos.-
- Lista.
Salimos juntos con las manos entrelazadas, todos se hicieron a un lado para dejarnos avanzar hasta el frente de la nave, donde había un gran ventanal con vista al espacio. Le hice una seña a Loki para que se sentase en el trono improvisado y así lo hizo, sacando su pecho orgulloso, deseando una prospera nueva etapa para los asgardianos.
- ¿A dónde?
- ¿Qué opina la reina?.- sus ojos verdes brillaban.
- Vamos a la tierra.
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Esta vez no spoilearé nada, solo les recuerdo que el 4 de Junio estarán pasando una actuación de Tom por Youtube.
Entramos a IW.
Muchas gracias por los 100K