En otro lugar...
Los casilleros se abrían a cada segundo, varios alumnos caminaban de un lado a otro dispuestos a ir a sus clases y uno que otro joven cargaba regalos, globos o chocolates para regalar ese día tan especial, los alumnos sonreían divertidos ante las expectativas de esa festividad en Monster High.
Muchos monstruitos se encontraban ilusionados con la idea de ver a su pareja, todo mundo sabía que era una festividad especial y les enchinaba la piel la idea de compartir el día de San Valentín con su pareja o con amigos.
Innumerables voces sonaban en cada rincón, declaraciones de amor, entrega de regalos o palabras románticas se escuchaban en todos lados, los monstruitos portaban una sonrisa encantadora, y muchos se conmovían con las muestras de amor ajenas.
¡Feliz Dia de San Valentín! -Exclamaban varios chicos. Amantes, amigos y desconocidos no paraban de hablar de aquella festividad, el día mas importante para los enamorados.
Por el pasillo una pequeña y delgada figura caminaba evadiendo a los estudiantes que se cruzaban en su camino, sus botas rosas con cuerdas negras taconeaban a cada paso, su piel rosada se distinguía completamente, sus coletas se mecían al ritmo de su caminata y su vestido se ondeaba encantadoramente, una sonrisa -que asomaba dos pequeños colmillos- se encontraba plasmada en su rostro.
Al otro lado un monstruo caminaba por el pasillo, sus ojos dorados brillaban de emoción, portaba una sonrisa lobuna y se removía el cabello a cada paso que daba. Su corazón latía a mil por hora y su nerviosismo le delataba por completo, sus manos sudaban y no paraba de mirar a su alrededor esperando encontrarse con la chica de sus sueños.
Caminaba y caminaba, escuchando las exclamaciones de sus compañeros y todo el revuelo que causaba el día de San Valentín, pero a ella poco le importo, pues de un segundo a otro poso su mirada en aquel chico que tanto amaba. Ahí estaba él, viéndola completamente estático, con sonrisa encantadora y sus manos frotando sus brazos por el nerviosismo, sonrió de vuelta y corrió rápidamente hacia aquel chico.
Al estar el uno frente al otro, fue imposible para ella no colgarse del cuello de él, logrando que este se agachara para estar frente a frente, instintivamente este le rodeo la cintura y ella sin dudarlo ni un momento le planto un beso emocionada, beso que fue completamente correspondido. Les tomo varios segundos separarse, sin embargo, no dejaron de mirarse sonrientes y enamorados.
-¡Feliz cumpleaños! mi monstruita Draculaura.
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Feliz día de San Valentín a todas, personalmente yo no festejo este día, pero nuestra amada monstruita si que lo festeja y no exactamente por ser el día de los enamorados. Mañana tenemos capitulo nuevo y se pone denso el ambiente.
Espero les haya gustado mi regalito.