Juegos De Dos - [SNK]

By Nanariko-chan

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Título: Juego de Dos "El juego del Amor es el más peligroso de todos" Ereri (Eren x Levi) MafiaAu! Temas: Ma... More

Prologo: Start Game
TABLA DE CONTENIDO
Capítulo 1: ¿Quién es el verdadero asesino?
Capítulo 2: Sospechoso
Capítulo 3: La Rosa Negra
Capítulo 4: Perseguídos
Capítulo 5: Extraños Sentimientos
Capitulo 6: Intereses
Capítulo 7: Nuestro sentir.
Capitulo 9: Boda roja
Capítulo 10: El Ataque de Levi Ackerman
Capítulo 11: Un corazón qué se ha roto
Capítulo 12: Falso Nombre
Capítulo 13: Complicaciones
Capítulo 14: Punto de Tiro: Mismo Objetivo
Capitulo 15: Tu vida, ya no es solo tuya
Capítulo 16: Un lugar seguro
Capitulo 17: Un lugar seguro, part: 2
Capítulo 18: Viejos Hábitos
Capítulo 19: Lo qué es MIO
Capítulo 20: Decisiones y Recuerdos
Capítulo 21: Vuelta al Trabajo

Capítulo 8: Arrepentimiento

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By Nanariko-chan

· La mañana siguiente: Arrepentimiento ·

[Eren narra]

Las horas van pasando y llega el amanecer de un nuevo día. La cabeza me molesta un poco, pero me voy acomodando en la cama. Estirando más que todo el cuerpo, como cada mañana y bostezo.

—!! -Aunque al abrir los ojos este día, descubrí que donde estoy durmiendo no es mi Lujosa cama de color sólido y de edredón importado, además no es una Sleep Number 360. Si, así es... Mi cama es una de esas camas que se tienden solas y etc... la última moda en tecnología y un apoyo a mi creciente flojera matutina.

Al sentarme no me veo en mi cama de miles de dólares sino en... un... King since. Esta cama es sumamente amplia, lo cual me tiene a una respectiva distancia de Rivaille... Aunque veo algo, mis piernas no estaban del todo de acuerdo y se enredaban con las suyas.

—Je, je -exclame y me senté sobre la cama, veo como unas sabanas estiradas en el suelo, también la ropa de ambos adorna el suelo y por el fondo, cerca del tacho de basura veo un condón usado.

—Nnh -Me cuesta algo de trabajo levantarme de la cama y más, separarme del cuerpo del que había sujetado tanto anoche. Aunque me mate por decirlo y verlo descansar ahora... hace que se vea sumamente tierno. —Ri.. vaille 

Le habló suave al oído, pero no recibo una respuesta al parecer está muy dormido. Toque parte de su mejilla libre y acalorada con un dedo, pinchando su mejilla visibles mientras la otra la tiene enterrada en la almohada. No pasa nada.

—haaa –bostezo y estiro los brazos arriba, luego voy sentándome en la orilla. — Fue la mejor noche de mi vida

Digo al aire, giro a mi izquierda y encuentro unos cigarros. Deben ser de Rivaille, cogí uno y me dispuse a fumar en el balcón. Me vendrá bien para sacar el estupor, ya luego iré por cafeína.

—... -Con un encendedor cercano, me pongo uno ala boca y lo voy fumando, lleno de humo el techo de la habitación.

Una vez desciendo los ojos, veo mi ropa esta por todo lado en el suelo y algunas en la cama.

—... -Me aventuro a pararme, voy al baño y orinando con la puerta abierta. 

Jo. Rivaille, ni así te despiertas... 

Pensé y me reí. Aunque ayer fue un encuentro sorpresa, no niego que me encanto. Boto el cigarro a la basura. Me pongo de pie descalzo y desnudo, voy cogiendo mi camisa tirada y algo desgarrada, con varios botones faltantes y por el suelo. 

— Quizá... debí controlarme un poco ayer. -digo al rascarme la cabeza. Si Mikasa me ve así, me mata.

Un escalofrió recorre mi espalda cuando lo recuerdo. 

— ¡Tengo instituto! -chillo y blasfemo, luego me cubrí la boca, volteó atrás de mi y encuentro a Rivaille... Aún está durmiendo mucho.

—Bueno, mejor -digo y rebusco en la cama. Encuentro un pantalón, pero hace muy ajustado. Creó que no es el mío, je je.

Sigo buscando y encuentro otro, efectivamente es el mío. En el bolsillo de Rivaille encuentro una tarjeta y su móvil. Voy tecleando un par de cosas y lo devuelvo.

Sí, yo era aquí... él que se va por la ventana. 

Mis ojos se giran viendo la hora, ¡se hace tarde para el instituto!

—Carajo.

Me muevo más rápido hasta terminar de vestirme por completo, tengo casi todo y su respirar me llama la atención a minutos de partir. Me subo a la cama de rodillas e inclinándome un poco más a él

—...- Lo observo detenidamente en su facciones dormidas, muevo algo sus mechones y le deposito un beso en la frente y no los labios.

Maldición.. ¿yo queriendo ser cariñoso?

Me aparto de inmediato y me cubrí la boca con la mano, ¿Qué rayos pienso? Debo irme, me aseguro los últimos botones de mi camisa y voy cogiendo el saco en una mano

—... -Debo irme, irme, irme ya... me repetía, pero en la entrada de las gradas y giro a verlo.

No debo ser tan cursi, pero con él... No parece tan malo serlo.

Pienso, niego con la cabeza y recogí el arma del buró. Camino en dirección a la escalinata, pero de nuevo doy otra vuelta y admiro su cuerpo reposando en la cama. Rivaille va mostrando ese culo tan pomposo que tiene.

— Jooder. -digo con una sonrisa de oreja a oreja — Creó que no solo me gustas, Rivaille.

Declaro para mi. Hecho ello, me pongo el saco y salgo por las escaleras hacia abajo y por fuera de su casa.

• ────── ✾ ────── •

[Levi narra]

Comienzo a estar consciente, pero sin abrir los ojos... me sentí extraño con mi mano, estoy buscando en la cama y tras varios intentos sin hallar nada me doy cuenta que... ¡Está vacía!

—!! -Abro los ojos de inmediato y me senté sin más en la cama con toda la rapidez que tengo y en un impulso, ¡Gravísimo error!

—Agh, Maldición –gruño adolorido. Tengo un intenso dolor en la parte baja de mi espalda, dolor en las caderas y la parte trasera de las rodillas. Todo esto sumado, hace que vuelva recostar en la cama y descanse de vientre otra vuelta.

— ¡¡Eren!! –le grito. Que no crea que se va a librar del golpe, pero no oigo respuesta.

Me ignora o...

—... -Me pongo de lado y empeora el dolor de espalda. —Te...mataré por esto, ¡¡EREN!! 

Grito con más volumen, pero solo se escucha el eco de mi voz en todo la habitación 

—Maldición -solté entre labios — ¡¿Dónde estás?!

Solo hay silencio, entonces obtuve mi respuesta... se fue y me dejo aquí muriendo de dolor.

Ese puto mocoso.

Veo el reloj en la pared y va marcando las 11 am.

—Tch, mocoso idiota –digo y con algo de esfuerzo muscular. Hay lugares de mi cuerpo en que se sienten tiesas y otras muy flácidas...logre llegar a la orilla de la cama y cuando estaba por sentarme caigo al suelo. —agh, maldición 

Maldito cuerpo, pensé. La sábana fue enredada en la mitad de mi cuerpo. Me arrastro un poco y logró tener soporte de la esquina del colchón, duele pero logre ponerme de pie.

Todo el cuerpo me duele sin importar qué. Camino con dificultad y varias veces casi caigo, pero consigo al fin entrar al baño. Lo primero que veo en el espejo es mi cabello desmarañado y varias marcas en mi cuello y pecho.

—Mocoso precoz -toco las marcas y al final mis labios... cuando lo vea lo destripare, pero... —Me gusto.

Prosigo mi despertar y entro en la ducha. 

Medio hora más tarde y con dificultad logre vestirme de abajo. Limpio, regrese a la habitación y cambio de sábanas que aparte ayer. Terminada mi labor de desinfección, tomo mi teléfono y veo si tengo alguna llamada. Nada.

—Qué extraño -busco en mis contactos y veo uno nuevo, de tener 15 ahora son 16... buscó el nuevo y sale "tu seme".

Muevo mi mano para ir a la configuración del contacto. Cambio el nombre y le pongo: "Mocoso".

Mejor iré a su oficina. Hanji me...

Iba a tomar mi cuchillo y encuentro un papel doblado. Lo abro y me deja sin palabras.

..............................................................

Buenos días, Rivaille.

Primeramente debo decirte que... Ayer te amé mucho, lindo amante. Me gustas más de lo que pensaba. No sonrías mucho, eso no es bueno para tí.

Se presentó un compromiso en el instituto. No puedo quedarme y terminar de verte dormir.

Sabes Rivaille... Eres muy bonito cuando duermes tan pacificante en mi pecho, gracias por posar tan bien. Nos vemos en la misma cafetería Starbucks, a las 2 Pm. 

No tardes, estaré ahí desde las 1. Tu rompe culos favorito.

-Eren.

.....................................................................

—Tch...- doblo la carta y la guardo en mi bolsillo. — Sigue siendo un niño

Lo insulte, pero veo la hora y son las 12:30 pm. Iré arreglar la parte de abajo de mi casa y...

Y aunque parte de mí lo niega, salgo de la habitación con un sonrojo por esa cita.

• ────── ✾ ────── •

[Eren narra]

Sé que dije que iría al instituto, pero llegue tarde y el viejo no me dejo entrar. Tch, ¿Qué más da? Ni yo quería entrar. Llego a mi habitación y tomo el ascensor, a pesar de qué mi casa es de tres pisos y en la segunda planta esta lo mío.

Las escaleras en este momento no quiero ni probarlas, con la escalinata de Rivaille tuve suficiente sufrimiento de piernas.

—Uff...-me tiendo en la cama boca arriba, frote mis partes por encima del pantalón y... Aun me escuece la sensación. Cierro los ojos meditando un poco, recordando más que todo la noche anterior...Esas expresiones, los sonidos que hizo al sentirse invadido... mi nombre escapando de sus labios, sus piernas tendiéndome la trampa al mantenerme preso y... agh, la grata sensación al estar···

Casi sin darme cuenta, había metido las manos en mi pantalón y por dentro del bóxer, mordiendo con ligereza los labios y haciéndome una serie de masajes.

Yo...yo...

—Ham, mhh. Ri···

—Eren –escucho, abro los ojos y ¡Estoy duro!

— ¡Maldición! –me pongo de pie de inmediato y corro al baño. Por fuera de mi habitación, se oye mi voz con la respira forzada y como que en todo el transcurso en que bajo la erección llego a pensar en él de nuevo.

Su rostro...es el único qué llega a mi mente.

—Diablos, ¿en serio? Yo... –hablaba al correrme en mis manos.

— ¿Estás ahí? ¿Eren? –oigo la voz de una intrusa por el pasillo, antes de llegar a mi habitación.

—¡¡Mikasa no entres!! -grito al salir del baño, Pero ella entra hasta quedar dentro de mi cuarto.

—Ahs, Mikasa... te dije que no entres -digo con fastidio al salir limpio del baño.

— ¿Por qué no fuiste a clase? –demanda.

—No me sentía bien -digo a la ligera, volteando el rostro y para ella... parece que he dado la peor noticia. Avanza hasta a mí, toma mi rostro con ambas manos y me gira al suyo para ver de costado. Pone la mano en mi frente y revisa si tengo fiebre.

—Esto, es innecesario –digo.

—Abre la boca –ordena.

—Mika-ah. Auh, Mikasa ¡estoy bienh! Uh –digo al cubrir mi boca, viendo que toco el molar que me voló Rivaille y duele.

—Eren, ¡estás herido! –declara su tercera guerra mundial.

—Es un molar... no es para tanto –contrarresto y giro los ojos arriba.

— ¿Quién te golpeó?

— Ya no importa –le atajo de mi lado y salgo abajo por las escaleras. Al principio el dolor me remuerde, pero no dejo que lo noté.

— ¡Estás cojeando! –grita en alarma. 

Tks. No sé para qué me molesto en fingir, ¡Esta mujer está obsesionada conmigo!

—Es una secuela del ataque a la bodega, estaré bien...  –Continúo y comienza a caminar a mi lado —Lo importante es el trabajo, ¿Qué hay de hombre que buscó?

—Hanji dice que tendrá la información en una hora.

—De acuerdo –Llegamos al garaje y yo me subo a mi auto, un Lykan Hypersport que es considerado hasta ahora como el segundo carro más caro del mundo. El mío es en color negro y su precio no es nada barato, vale por lo menos 4,5 millones de dólares. Un diseño exclusivo y potente.

—...Dile que me mande toda la información al celular –digo a Mikasa en mi costado por fuera del auto, ni me molesto en dar retro y cambio caja para arrancar.

— ¿A dónde vas? -pregunta al ver que arrancó y no la dejo subir.

—Me voy con un contacto, Mikasa –Ella me mira en silencio, detengo el caro antes de salir —No se te ocurra seguirme, debo ir sólo... Esa rata no se me puede escapar 

Le hablo con las mano en el volante. Veo el reloj de mi auto. 12:45 Am, si aceleró llegare a las una menos cinco y eso, menos diez.

— ¿Te puedo ayudar? –se ofrece.

— YO SOLO me basto para destrozarlo –decreto al ponerme unos lentes oscuros y pisar el acelerador.

Oh... Y de qué manera te destrozaré, Rivaille.

En mi pensamiento avanzó, saliendo de mi hogar hacia la autopista y me pregunto si debería ir por flores... si. Quiero ver su cara de incógnita, ja ja...

Estaciono en una tienda. Bajo los lentes de mi rostro y veo en el interior algo, que me llama la atención. Apuesto que las negras... esas francesas le gustan, pero optaré por las azules, las alemanas no están mal.

Mi frac negro es un poco elegante. De hecho, me tome la molestia de impregnar este con mi aroma y el de mi regalo. Regreso al auto, poniéndome en marcha.

— Rivaille, ¿Qué le estás haciendo a mi mente?

Llego a decir por lo bajo y salgo a la primera mesa en los palcos. Me senté a esperarlo, misteriosamente alegre.

• ────── ✾ ────── •

[Levi narra]

Estaba a 20 minutos de que llegara la hora de reunión.

¿Por qué ando agitado? ¿Tengo un mal presentimiento?

Intente comunicarme con Hanji, pero me dijeron que se encontraba ocupada y que no fuera para allá. Extraño. Estacionó el auto enfrente. 

— El día de hoy... está fresco.- digo para mi, fijándome en algo que bueno... nada tiene que ver, ¿Estaba nervioso? 

—Imposible -digo  saliendo del auto, cerrándolo con un botón de la llave en mi mano e ingreso en la cafetería. Hay poca gente... Así mejor, no levantaríamos mucha sospecha. Busco por todo el lugar, pero no lo veo. 

Mierdas. ¿Dónde se habrá metido ahora ese mocos···

—Disculpe, señor –me habla alguien a mi costado, volteo a verla y es la chica que atiende en la recepción. Me acercó a ella, algo extrañado de que se dirija a mi persona sin haberla llamado.

— ¿Es usted, Rivaille? –me pregunta. Entrecierro los ojos, ¿Cómo demonios me conoce?

—Si –contesto sin más y con las manos en los bolsillos. Hoy no tengo calcetines en los zapatos, no los encontré y presiento que el mocoso de mierda es responsable de ello. 

—Que bueno, sígame por aquí  -dice ella, cambio el rostro serio a uno alegre y reconfortante. Como si llevara tiempo esperándome, el mocoso debió hacer algo.  — Por favor, lo llevare a su mesa

 Estoy por hacerlo cuando termina de decir: El joven Eren Jaeger lo espera en el balcón. 

—!! -Me detengo en bruto y ahí es cuando todo se oscurece para mi persona, con tan solo oír ese apellido.

¿Escuche bien? "Jaeger?" ¡IMPOSIBLE!

— ¿Me puedes repetir lo que dijo? –hablo al sujetarle de los hombros y emplear algo de fuerza en el agarre al verla sonreír cuando yo...me veo  incrédulo, sin moverme un paso.

—El joven Eren Jaeger lo espera en··· 

Ella no termina de hablar y yo ya le solté, corrí hacia la pequeña escalera de lugar para subir arriba y poder verlo con mis propios ojos.

¡¡¿Jaeger?!!

¡¿Cómo es posible que tenga relación con ese sujeto?!

— Tiene que ser una maldita broma -digo entre dientes y alistándome para sacar mi arma del saco.

Eren... Eren se llama... Eren Jaeger

¡Eren es el hijo de la persona que más odio!

 ¡Yo debería saber su apellido! No puede ser Jaeger, Eren es...

—... - Casi tropiezo en el paso que quiero dar. Eren es bueno con las armas, mata sin piedad y su apellido es.... —No sé cual es.

¡¿Con quién mierdas me acosté anoche?!

Hablaba y pensaba para mí sin parar. Todo en mi súbito ascenso... estoy más presuroso por llegar arriba, en lugar de digerir la noticia bien y... 

—hha, hha -Llego al balcón más rápido de lo que creo, pero no es como lo recordaba ni como un JAEGER lo prepararía para un enemigo. Están todas las luces un poco bajas. Una mesa está apartada para dos... Tiene velas encendidas y bebida...

Esto –me detengo, bajando la guardia y comenzando a caminar algo anonadado — parece tan... ROMÁNTICO.

—!! -Sacudo la cabeza. Pensar en esto, solo me distrae y yo debo... debo recordar que esto lo hizo un Jaeger, debe hacer alguna trampa. 

Vuelve mi enojo, camino un poco en rumbo a la mesa y doy la vuelta a un costado y al otro. No lo encuentro por ningún lado, trato de escuchar cualquier ruido y nada. 

— Tch... ¿Qué mierda trama? -Digo y doy varios pasos hacia atrás, metiendo un poco mi mano en mi chaqueta para agarrar la navaja y es cuando llego a sentir una respiración en mi cuello, sus brazos me rodean por la espalda y···

El filo de la navaja enteramente metálico, con el mango azul y en la hoja grabada la palabra "Muela", es sobrepuesta a mi garganta. 

¡¿Que?! ¡MIERDA!

¡Me matará mientras yo le estoy dando la espalda!

¡¿Por qué mierda fui tan descuidado?!

Mientras me repechaba y no podía moverme, el filo abre mi carne junto a su aliento en mi cuello y luego viene su asquerosa voz diciendo:

—Hola, Lindo Amante –Eren va apretando un poco hacia dentro y mi garganta, trago duro y sangro un poco.

—Je, je -Eren ríe y sonreí al ver esa acción de mi parte, me libera. Yo giro y lo veo a mi espalda.  —Te asuste, ¿verdad?

Burla, peor no digo nada. Solo veo como la mueve en su mano el arma, dándole la vuelta y cerrándola, para luego extenderla a mí.

— Tómala, Rivaille... Es para tí -me dice.

Este tipo, es idiota.

—... -Le miro con cautela. Esto...es otra una trampa. Mi mano seguía en mi bolsillo, Eren intenta algo más y puedo cortarle la···

—Vamos -saca mi mano y la abre, ve que tengo un cuchillo mariposa en mi mano. Lo matare como me la qui···

—!! -Eren lo coge, me quito el cuchillo y lo arroja como basura por detrás de su espalda, antes de que intente algo y avance un paso por este, coloca la otra navaja en mi mano.

—Este presente es mejor para tí –me dice. Se gira, me da la espalda y va a sentarse en la mesa. 

—Pensé en darte flores, pero serían inapropiados para un asesino de tu talla...  –habla. Sigo de pie sin creerlo y completamente mudo. — Siéntate ya, me tome la molestia de pedir tu orden

—.... -Todo esto, me tiene muy confundido... ¿Por qué tiene la guardia tan baja conmigo?

—Toma asiento –repite y me señala mi silla con un ademan de mano. No puedo procesar casi nada de lo que dice, es completamente opuesto a lo que "alguien que quiere matarme haría", es ridículo y no puedo verlo de otra forma que una trampa o burla a mi persona. Por lo que obviamente la mirada que le dedico, está muy agresiva.

— ¿Sucede algo, Rivaille? –suelta mi nombre a la ligera, como si me conociera de toda la vida y pudiera tomarse libertades conmigo.

—¿No te gusta el té negro? -pregunta al ver que ni he tocado la taza a mi delante —Vi que lo pedías mucho y pensé que te gustaría 

Dice y va ladeando la mirada a un costado... pareciendo confundido, nervioso y algo decepcionado. 

—... -Lo observe  todo, sin perder el tiempo en ningún detalle a sus acciones y a lo que musitaba entre labios, "¿Lo habré arruinado?" ¿Qué significaba eso?

— ¿Huh? - Exclama él cuando nuestras miradas se cruzan y hace un mohín. Dejo de verlo y observo lo que me dio. 

¿Acaso... busca que lo mate? ¿Por qué demonios me regala una navaja?

Agarró el cuchillo con mucha fuerza en mi mano, tanto que hasta lastima un poco.

—Eren... Querido Eren Jeager. -le hable tras una larga pausa y me acerco un poco a él. — Nunca me imaginé que llevaras ese apellido... 

Eren deja la taza que tomaba, para ver como fruncía el señor al pronunciar su nombre en voz alta y entrecerrando los ojos.

—...Tienes de apellido de muerte, Maldito Mocoso.

[Eren narra]

Rivaille me habla de forma un poco... rara. Regreso mi rostro al suyo y se oye bastante serio al pronunciar mi Apellido. ¿De la muerte, eh? La verdad sí. Todas las personas que se topan con nosotros terminan muertas, así que... Mi apellido sin duda atrae la muerte.

—No te preocupes, Rivaille. No te voy a matar... Ya no -le puntualizó lo último y él entrecierro los ojos al girar un poco la cabeza adelante — Me llamas mucho la atención como para que te cabe una tumba.

Rivaille frunce el ceño y se sentó con brusquedad. Haciendo sonar el arrastre de la silla y hasta amenazando.

—Yo te cabaré una tumba... Bastardo –me habla con enojo, pero parece al mismo tiempo controlarse con respiraciones y guardar la navaja al cruzarse de brazos.

— ¿Molesto? –digo, ya que su tonito no se me pasa por alto. Rivaille afila su mirada contra mí, de forma hostil.

— ¿No te agrado mi presente? –vuelvo a preguntar y veo su taza llena. 

Ni siquiera la ha probado, pensé que era su favorito. Maldición.

— Se va a enfriar tu café, toma... No la envenene –digo. No entiendo porque el entorno se ha tornado tan tenso. Carajo, creo que no le gusto mi pedido.

 Mierda, me gruño, algo frustrado. Esta es mi primera cita oficial... con alguien, que bueno... me gusta y hasta creó llegaré a amar... Y no estoy dando la talla, que frustrante.

—... -me llego a poner dos dedos en la sienes t entrecierro un poco los ojos hasta que me habla de nuevo.

—Oh... Tu presente, si es lindo. –dice. Si, le gusto. — Aunque se verá más hermoso bañado en sangre 

Acaba diciendo y lo veo tomar su taza, un sorbo. Curiosamente, eso me alivia. La verdad me está estresando mucho esta situación. Lo llego a sentir muy aprensivo o son ideas mías. Mmm. Yo no quiero eso... Ni mucho menos.

— !! -Me levanto de la mesa en bruto y con una mano toco la suya. La que está libre y también la que estruja. Va a parar mi cuello. Rivaille se estira y con la otra mano bajo su taza mientras voy a besar sus labios.

Rivaille tiene el saber de té en los labios, pero me evita y no lo entiendo. Yo me voy lamiendo los labios frente a él, a modo de incitarlo.

—Exquisito sabor -digo — ¿Qué dices, Rivaille? ¿Quieres probar el sabor en los míos también?

— ¿Por qué, no? –se acerca y besa. Perfecto, eso era lo que quería. Estoy cerrando los ojos, pero coloca la navaja que le di en mi cuello y muerde mi labio superior

—Exquisito... Eren –Acabo diciendo. En mi cuello tengo la navaja y doy suspiro en muestra de abnegación. Ese beso fue mediocre, pero al fin entiendo que es lo que quiere Rivaille que haga.

—Ah, Claro –Dije. De eso se trataba todo, tenía primero que quitarme el arma. Me voy a mi espalda y desenvaino el arma con seguro. Rivaille se asombra de inicio y aprieta más la navaja en mi garganta, yo sonrió y dejo mi arma sobre la mesa.

—Listo... -digo sin dejar de verlo — Ahora Rivaille, ¿puedes darme un beso de verdad... O debo robártelo?

 Pregunto y voy entrecerrando mis ojos de forma lasciva.

—Mocoso... –aprieta los dientes y gruñe un poco. Como queriendo negarse, pero al final cede — Mejor hazlo lo que planeas y yo···

Me pide un beso, me incline o casi abalance sobre él para besar y profundizar al meter mi lengua a jugar. 

—!! -Frente a su insinuación y de forma rápido, tome el rostro de Rivaille en mis manos. Junto demasiado nuestros labios, al poco que la saliva escapa por ambos lados. El exquisito sabor me provoca, se funde más nuestra unión y me apretó más contra él —Nn... 

Mis manos quieren volver a bajar a su pecho, pero mi móvil interrumpe el momento y vibra. Ese maldito sonido hace que mis labios cesen su acción, me aparto un poco y lo recogí de la mesa con molestia, para ponerlo en mi oído.

— ¡¿Qué pasa?! –inquiero por este, me comunican que ya tiene lo que le pedí. Tks. Cierro la llamada

—Se acaba de presentar un inconveniente... -justifico y me levanto, dejo en su persona con un beso más. Me acomodo el saco y tomo mi arma. —Nos vemos en la noche, en el galpón 

Le susurro en su oído y partí hacia abajo en lo que lo escucho decirme:

—Mocoso... tonto

• ────── ✾ ────── •

Más tarde me halle en una situación cómoda mientras iba a reunir con unas personas de dudosa reputación y que iba a darme información, trataron de sacarme de la carretera. Lo que no sabían es que parte de disparar certeramente, también soy un excelente conductor. Logre matar a tres de los hombre en el auto. Uno era el conductor del suyo y a dos los mate con una sola bala en la cabeza. Tuvieron que compartirla. Los últimos fueron divertidos pues nos metimos en el túnel e hice que su alto vuelta y explote de un disparo. Atropelle a uno y él otro se salvo por muy poco, tiene una pierna rota y huye apenas. 

—Mm.. -llame a Mikasa cuando sujete al sobreviviente del saco de su espalda y lo estrelle contra la pared. Su cabeza sangra y trata huir, es tarde. Lo atrape y lo sabe.  

—Y-o, Aht... yo no sé ¡No sé nadahh! –grita mi victima contra el cemento sin enyesar, de la pared a mi derecha.

— ¿En serio? –Burle metiendo mi rostro a un costado derecho del suyo y estoy con una macabra sonrisa que enseña los dientes. —Entonces... ¿Qué razón tienes para temblar tanto? 

Le susurro en su oído, con una abrumadora calma que le eriza la piel. El hombre abre los ojos y yo comienzo mi risa irónica, a decir verdad. Ya sabía que me ocultaba algo... solo faltaba que lo confirmará y con esa reacción es más que suficiente.

Él es ganado.

—Sí me dices todo lo que sabes... Es muy posible que no te maté. –Hable apartándome del sebo inútil.

—Qué yo no ¡s-ehhh! –su alarido llego a mis oídos y no hace más que agrandar mi sonrisa.

Después oír aquel bello crujir de su brazo izquierdo partirse en tres. Es claro que sobreponía el humero contra el cubito y si lo apoyabas lo suficiente para que ejerza su fuerza total, la torsión acabaría rompiendo su cubito y este a su vez comprometería al radio. Por lo que no sea capaz de mover varios dedos.

—¡ahh! ¡Ahh! ¡yahh! ah, no –grita y me suplica — Habla-rehh, ¡hablare! 

—Escúpelo... -gruño. Termina suplicando, como todos mis rehenes — ¿Quién te pago para asesinarme hoy?

—No lo sé –pase a apretar un poco más su brazo y él cierra los ojos con evidencia de lágrimas contenidas.

— ¿Para quién trabajaban esos hombres? -volví a preguntar — ¡Confiesa ya!

—S-Smith. Él dijo que debíamos, ahr –exclama —...Eliminar a alguien llamado Ackerman primero por él y luego... si, sino lo conseguíamos pues...

—!! –me aproximo un poco más, casi acorralando y enterrando su rostro en la pared. — ¿Fue Smith quien hirió el hombro del Ackerman? 

Pregunto en su oído. Lo hubiera hecho pagar caro ahora, pero Levi ya se lo cobro solo y no me dice nada que no sepa ya. Mi padrino Erwin quería matarme por la muerte de Mike... Lo sé, pero esa última frase que me dejo... Aún ronda en mi cabeza.

"No puedes matar a Levi... a pesar de tenerlo delante"

¿A qué demonios se refería?

"Ya moriste por él, Eren"

Maldita sea, ¡No entiendo nada!

Acaso trataba de decirme que Levi me tiene en su mira, ¿o será que está infiltrado dentro de mi propia familia? Era claro que Erwin tenía mucha información y para suerte del maldito, ya no está respirando.

—Fue el mismo señor... –me responde, en lo que yo meditaba — S-si fallábamos...de-ebíamos pasar el paquete.

— ¿De cuál paquete hablas? –demando. Quizá la información que quería no estaba del todo perdida como yo creía.

—El señor transfirió la gran cantidad de datos e información de la familia Jaeger a manos de otro hombre, en caso de que fuese traicionado... –Trata de girar su rostro para verme — Y cuando el Señor Mike fue asesinado, confirmo que esa familia no tiene honor... ¿Por qué salvaría Eren Jaeger a un Ackerman?

Carajo.

—... -Mi rostro se contrae en rabia. Esa información puede hundir a mi padre y a mí, poco me interesa lo que pase con mi herencia, pero... La información que se encuentra en ese paquete también puede serme útil.

Smith y mi padre, conocían detalles importantes de aquella noche.

Mi padrino siempre manejaba un pendiente en su cuello, sé bien que era una memoria USB. Seguro aquella información valiosa está ahí y con ella chantajeaba a mi padre.

Y ahora... todos sus sucios secretos, pueden caer en mis manos.

— ¿Dónde está paquete? –bramó y se calla —RESPONDEME y tal vez, sobrevivas.

—ahg, ¡Ahh! Yo... Ahh, no ¡no sé-ahg! –gritaba en respuesta. Quejarse y llorar era lo único que decía la miserable rata hasta que veo las luces de un auto a mis espaldas. Mikasa llegó y baja del auto.

—La memoria... de Le Rose, ¡¿DÓNDE?! –Comienzo a gritar, perdiendo el control de mi propia fuerza y presiono con más intensidad su brazo roto. Voy queriendo comprometer el hombro más, pero él solo gime y llora. Mis dientes rechinan en rabia al escuchar el taconeo de ella.

—Mikasa, ¡trae el alicate! –demandó. Le sacaría las muelas como no···

—Nooohh –grita en horrores. —No, no ¡¡Pixis!! Pixis... ¡Se lo dio a Pixis! 

—Pixis... está muerto –Lo suelto y golpeo en su tórax, partiendo esta vez una costilla —Será mejor que sepas mentir mucho mejor, porque lo próxima costilla en fracturarse será la cuarta

Hablo y me mira con atención. Yo le paso a explicar.

—Y si fracturo esa castilla –digo con los dientes apretados mientras él se agarra con la otra mano el pecho —....te perforara el corazón, ¡Empieza a cantar todo lo que sabes!

—Es-s todo lo que sé, ¡lo juro! –tartamudea mientras de sus ojos salen lágrimas, que corren por las mejillas —Smith, solo dijo eso... S-se le daría a pixis y hablaría con una mujer, ¡Es todo lo que oí, LO JURO!

—Su nombre... –requiero, aun sujetando su nuca.

—N-no escuche, no sé más... -proclama con los ojos cerrados —¡Lo juro! ¡Lo juro! por favor... ya no me lastime más

—Tks –me aparto y voy hacia su bolsillo. Sacando su cartera, dejando que su cuerpo cayera sentado hacia el suelo. Me guardo su billetera en el bolsillo de mi pantalón y saco mi arma, reviso la carga. Aún quedan seis balas. El hombre escucha eso y me observa aterrado, pues mi sombra le esta cubriendo la mayor parte de rostro y cuerpo.

—Dijo... dijo que si se lo decía no me mataría –me recuerda. Lo observo, meto la carga de nuevo y quito el seguro. Esta lista para disparar.

—Sí, yo no te mataré –hable sin la menor preocupación en el tono y le pasó el arma —Mikasa...

Ella lo sujeta y apunta a su cabeza en lo que yo me doy media vuelta, se oye:

—¡¡N-no me maté!! ¡¡Ya le dije todo!! Todo lo que quería, por favor... -me suplicaba mientras caminaba  — Usted d-dijo que no me matará, ¡Por favor!

—Nunca dije que saldrías con vida de eso –le aclaro y lo próximo que oigo, es el disparó de Mikasa reventando sus sesos.

—Mm... ya -Me doy la vuelta. Esa tipa, sea quien sea... la mataré. Conseguiré la información, todo a tiempo para nuestra cita.

Rivaille... creó que conocerte, me está trayendo buena suerte.

—Je –sonrió en mí andar fuera de los canales, con rumbo a mi auto.


• ────── ✾ ────── •

[Levi narra]

—Maldición, hanji –le gritaba a través del teléfono. — ¡¿Por qué carajo no has contestado?! 

—: Enano, he tenido trabajo... Obvio no iba atenderte – responde y se escucha su risa.

—Tch, maldita cuatro ojos. -regaño y suelto humo del cigarro al cielo — Solo dame mi siguiente trabajo.

—: Perdóname, Levi -dice sin sentirlo —: Pero no hay nada este mes

—Debes de estar jugando –gruño y boto el cigarro a la mitad. Mi mal humor aumenta.

—: Es todo, no hay... Así de simple. - me dice en un tono irritante y que casi me hace sangrar por los oídos —: Tómatelo... como tus días libres.

— ¡¿Espera qué?! -dije al dejar caer el nuevo cigarro en mi boca y sujetar con más fuerza el móvil — ¿Cómo que días libres?

—: Así es, riv... como escuchaste "días" no hay nada -me repite —: Así que, disfruta tus pequeñas vacaciones~

Se corta la llamada. Con gran enojo arrojo el celular al sillón individual color rojo que tengo en casa. Agarro la navaja que Eren me dio, la arroje adelante y se entierra en la pared.

—Tch –me voy recostando en el sillón y tengo la radio, la escucho. Necesito tranquilizarme o voy a enloquecer. Enciendo un cigallo y dejo que el humo haga su trabajo. Espirar el humo me va calmando.

—Muchas cosas por un solo día –hable y al moverme de mi posición, sentí un tirón en el culo — Carajo, dolor en las caderas y sin trabajo... Tengo un mocoso, un enemigo... ¡bah!

Pongo mi dedo índice y anular, elevando la mano y simulo disparar al aire. Luego de eso, dejo caer la mano. El eco de mis pensamientos empieza a ser molesto.

—.... -Cierro los ojos y recuerdo aquel instante de la cita hace horas. Tan rápido como me cito, fue tan rápido como se fue... Ese mocoso hace lo que se le da la gana, pensé al verlo partir después de decirle: Tonto.

Agarre la taza que me pidió, era exacto el sabor que me gustaba. Café negro y sin nada de azúcar, me lo termine de un gran trago. Estaba rico...no lo podía dudar y por levantarme y perseguirlo escuche a la recepcionista de antes entregándome un plato de comida. Era filete, bastante caro y no lo servían en la cafetería, pero Eren pidió tal caso para mi persona también. No lo podía creer, debía estar envenenado o algo, pero la mujer me aseguro hacer su mejor esfuerzo en la preparación y me fue dando tanto detalles... Incluso parecía que su sueño gastronómico frustrado el hacerme tal cosa. 

—... -Termine por probarlo y era bueno, me lo acabe y estaba nuevamente por irme, pero que un postre de chocolate y fresas más, que champaña y que montón de cosas cursis que termine por rechazar y aun así me las empacaron al auto. Lo único que me lleve en mano fue aquel presente de la navaja sobre mesa y me lo metí al bolsillo.

— Hha... Mocoso, me confundes ¿Qué quieres? -pregunto al botar más humo y ponerme de pie. De verdad, ¿somos amantes? ¿o seguimos siendo enemigos que... comparten la cama?

"Te veo en el galpón" recuerdo la voz de Eren en la "cena romántica", pero...

— ¿Galpón? –pase a cuestionarme al bajar las escaleras de mi casa y antes de pisar el ultimo escalón, entre abro los ojos y pienso:

Eren...Tiene relación con ese sujeto... 

El Señor Jaeger es su maldito líder o su padre, ¿no?

De alguna manera, puedo sacar ventaja... O eso, llego a pensar. Me detuve y dejo que los mechones caigan al frente, opacando un poco mi vida. Algo me tiene inquieto con respecto a todo esto. Es como... si algo malo fuese a suceder. Mi instinto me lo dice.

— Tengo que estar alerta, pero... ¿A dónde dijo ese mocoso que fuera en primer lugar? –me pongo a pensar en otra cosa, ¿acaso estoy dudando? ¿Olvidando algo importante?

Será que... Mi verdadero objetivo está siendo opacado, ¿por un niño? ¡No! No puedo permitirlo.

— Tks... -retome mi rumbo de inmediato. Saco la navaja de la pared, recogí mi saco y salgo de mi casa. 


..............................................

Hola, Nana aquí regresando a la vida.

Levi se enteró de quien es realemente con quien sale es el hijo de su mayor enemigo... tth...

Veamos si eso aumenta o no la acción en la cama xD

Estoy contenta de volver ... y tambien escogi este dia para publicar ya que es mi cumple...estoy cumpleañera, feliciteme pueblo! Jejeje

Las extrañé mucho.
#Nanariko-chan.

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