El curso había comenzado con aparente normalidad. Luego de recoger sus horarios, los niños se dirigen al Gran Comedor para desayunar.
-Jenna: Tengo tanto sueño... (se queja con cara de profunda tristeza)
-Albus: (Sonríe al ver su expresión) Desayuna bien y se te pasará.
-Scorpius: Cuando comiencen a llenarnos de deberes te olvidarás de dormir (sonríe).
-Jenna: (Suelta una risita) No lo creo.
Las lechuzas con el primer correo de la semana entran volando al Gran Comedor.
-Albus: Compartiremos la primera clases de Herbología, Jenn... ¡AH!
Se interrumpe sobresaltado al ver estrellarse su lechuza blanca sobre su plato de tostadas.
-Albus: ¡Milkie! (ceñudo, retira la carta de la pata del animal) Gracias...
La lechuza negra de Scorpius aterriza con elegancia sobre la mesa sin tumbar ni una copa. Scorpius toma el paquete.
-Scorpius: Gracias, Cronos (la acaricia).
-Jenna: Oh por favor, ¿podrían prestarme a una de sus lechuzas para enviar una carta para mi familia? (con expresión de suplica)
-Scorpius: Sabes que sí, Jen.
-Albus: Utiliza a Milkie... (se apresuró a decir) No tengo ninguna respuesta que enviar y él lo hará con mucho gusto.
-Jenna: ¡Gracias! (sonríe ampliamente)
Ata la carta a la pata de la lechuza blanca. La acaricia y le da un terrón de azúcar.
-Jenna: Ten un buen viaje, bonito (con dulzura).
La lechuza ululó y salió torpemente volando del Gran Comedor.
Jenna comienza a comer sus huevos revueltos con tocino mientras Scorpius abría su paquete. Como siempre: golosinas enviadas desde su casa, la edición matutina de El Profeta y una carta de sus padres. Scorpius toma primero la carta con ansiedad y la lee. Albus a su vez, mira el nombre de la persona que le envió su carta, frunce el ceño y la mete algo brusco entre sus libros.
-Jenna: ¿No abrirás tu carta? (curiosa)
-Albus: ¿Qué? Ah... No (baja la mirada y se mete un bocado de una tostada a la boca).
-Jenna: Puede ser importante.
-Albus: Es papá, seguro deseándome buen inicio de año. No te preocupes, ¿sí? (trató en lo posible de sonar dulce)
Jenna hace una mueca alzando una ceja y vuelve a comer de sus huevos.
-Scorpius: Mamá sigue sin mejorar... (evidentemente triste)
-Jenna: Oh Scorpius... (apenada, posa su mano sobre la de él conciliadoramente)
-Albus: Se pondrá bien, amigo. Ya lo verás.
-Scorpius: Eso espero...
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Los niños llegan a su clase de Herbología. El profesor Longbottom los recibe y les indica que lo sigan al Invernadero 3. Allí la clase se basó en estudiar y replantar Mandrágoras
-P.Longbottom: ¿Alguno de ustedes podría decirme las propiedades de la raíz de Mandrágora?
Scorpius levanta la mano y el profesor le cede la palabra.
-Scorpius: La Mandrágora puede usarse como ingrediente esencial en muchos antídotos. Y pues es un reconstituyente eficaz, ya que sirven para devolver a su estado original a la gente que ha sido transformada o encantada.
-P.Longbottom: Excelente, señor Malfoy (le sonrió amablemente). ¡10 puntos para Slytherin!
Albus palmea el hombro de su amigo a modo de felicitaciones y Jenna lo mira sonriente. A su alrededor se escuchan murmullos:
-El hijo de voldemort sabelotodo.
Scorpius se entristece notablemente.
Al salir de los Invernaderos, Jenna se dirige a la clase de Transformaciones junto con los de Gryffindor. La profesora McGonagall, les entregó un escarabajo a cada uno debiendo transformarlo en un botón. Jenna, con mucho asco por el escarabajo, intentó concentrarse y hacer lo mejor que pudo.
Luego, en la clase de Defensa contra las Artes Oscuras, el profesor Finnigan continuó con la práctica del Encantamiento Desarmador, Albus seguía sin mejorar demasiado.
Y como lo había predicho Scorpius, salieron llenos de deberes en su primer día de clases.
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Los niños se dirigen a las Mazmorras, a la clase de Pociones. Los alumnos de Gryffindor y Ravenclaw salen mientras los de Slytherin y Hufflepuff entran.
-Scorpius: ¡Hola, Rose! (animado)
Rose pasa por su lado con la mirada en alto, ignorándolo deliberadamente. Jenna ve la escena apesadumbrada, caminando un paso atrás de sus amigos. Escucha los murmullos de los otros alumnos que van pasando por su lado:
-Ahí va el Squid junto al hijo de Voldemort.
-El hijo de Harry Potter junto al Hijo del mago Tenebroso.
Entraron al Aula de Pociones, con el profesor Slughorn. Albus, Jenna y Scorpius ocuparon una mesa junto a Bowker Jr. un compañero de la casa de Slytherin.
-P.Slughorn: ¡Bienvenidos queridos estudiantes! ¡Jenna! (Se acerca y estrecha su mano) Que gusto verte, ¡mi chica favorita!
El profesor Slughorn no se cohibía de dar a conocer su favoritismo hacia los alumnos. Jenna sonríe avergonzada.
-Jenna: Gusto verlo, profesor.
-P.Slughorn: ¿Estudiando mucho en el verano?
-Jenna: Pues sí (tímida).
-P.Slughorn: No me extraña, ¡esa es mi chica! (con orgullo y mira a Albus) ¡Albus Potter! (le estrecha la mano animadamente) ¡Mi otro chico! ¿Cómo está tu padre? ¿Bien? Supongo que ocupado con tanto trabajo en el Ministerio. Un gran amigo tu padre. Tu madre también debe estar estupendamente, muy talentosa tu madre.
-Albus: Sí... (tratando de ocultar su molestia)
Slughorn pasa junto a Scorpius sin molestarse siquiera en mirarlo. Saludó a Lysander y a Flora Zabini preguntando por su bisabuelo y abuela, respectivamente, y se posicionó frente a los estudiantes.
-P.Slughorn: Muy bien, alumnos de Segundo (con mucho animo), comenzarán este curso activamente. Quiero ver que tanto estudiaron (le guiña un ojo a Albus). Prepararán para mí una sencilla pócima Calmante, no tiene que ser perfecta claro está, ¡pero esfuércense como si fuera absolutamente obligatorio que lo sea! Tienen una hora. Comiencen, comiencen (finalizó con una sonrisa).
Jenna inmediatamente abrió su libro de Pociones, se había sentido fascinada por esa materia en particular desde el año pasado cuando vió la primera clase de Pociones.
Tomó su caldero y comenzó a calentar agua a 30°C agregando arena poco a poco. Y echó luego 5 gramos de Opio en polvo y 1 gramo de Extramonio, la poción adquirió un color amarillento.
-Albus: Hay que agregar... ¿Qué era? (confundido)
-Scorpius: Un cuerno de Bicornio (le susurra a Albus, quien se encontraba más cerca de él en la mesa).
Albus busca dicho ingrediente y lo agrega en su caldero siguiendo las instrucciones de su amigo. Jenna estaba muy concentrada; comenzó a agregar en su caldero hojas de Adelfa minuto a minuto, como decía en las instrucciones, esperando a que la pócima adquiera un color rosado.
-Albus: Y algunas gotas de sangre de salamandra... (muy concentrado leyendo las instrucciones)
Ésto último, Jenna lo escucha mientras hundía una roca volcánica en su caldero, y mira apresuradamente a sus amigos con extrañeza. Scorpius agrega el ingrediente mencionado por Albus.
-Jenna: Oigan.. ¡NO! (susurra)
Era tarde. Las pociones de Albus y Scorpius explotan en sus caras. Los demás alumnos se sobresaltan y ríen burlándose de los dos niños. Jenna los mira preocupada.
-P.Slughorn: ¡Por las barbas de Merlín...! Otra explosión. Bueno, ¡15 minutos niños!
-Albus: Ok. ¿Cuál es el contraingrediente? ¿Qué tenemos que cambiar?
-Scorpius: Todo... (desanimado)
-Jenna: Chicos, ¿qué hacen? ¿Qué instrucciones están siguiendo? (preocupada)
-Albus: Las del libro. Pagina 115.
-Jenna: ¡No! (susurra) Era la pagina 105, Albus. Rápido, no queda tiempo. Háganlo así...
Rápidamente Jenna les susurró como realizar la Poción indicada y los chicos trataron de hacerlo lo más rápido que pudieron.
-P.Slughorn: Listo niños, las manos lejos de sus calderos (entusiasmado). La pócima Calmante perfectamente realizada tiene un color rosa sumamente claro. Veamos.
Jenna sintió una opresión en el estómago al oír eso.
Uno a uno, el profesor Slughorn recorrió cada caldero esperando encontrar el color indicado. Reaccionando con distintas expresiones que iban desde un asentimiento, pasando por una mirada de lastima, hasta una negación con la cabeza con profunda decepción.
Llegó a la mesa donde se encontraban los tres niños. Miró la pócima preparada por Craig Bowker, la cual había adquirido un color marrón fangoso. El niño se ganó una mirada de lástima de parte del profesor; Jenna le murmuró un sincero "Lo lamento" al chico, el cual se vió bastante afligido. El profesor se acercó al caldero de Albus con una gran sonrisa, miró dentro y pareció sorprenderse bastante. La poción estaba en la fase amarillenta.
-P.Slughorn: Muy bien, Albus, ¡muy bien! (contento)
Albus sonrió y miró de soslayo a Jenna, la cual se sonrió tímidamente. El profesor pasó a mirar el caldero de Scorpius rápidamente sin darle mucha importancia, pero se sorprendió un poco al ver que la poción ya se acercaba más al color rosa claro. Con una exclamación palmeó el hombro del joven Malfoy, quien sonrió y se sintió muy bien consigo mismo. El profesor prosiguió a mirar el caldero de Jenna, la cual, convenientemente, resultó ser la última en revisar. La cara de satisfacción del profesor Slughorn no tuvo precio.
-P.Slughorn: ¡Magnífica! ¡Asombrosamente magnífica! ¡Es casi completamente perfecta, Jenna, mi chica! (extasiado) ¡30 puntos para Hufflepuff!
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-Jenna: Lo siento, chicos (en serio lamentándolo). Si hubiera estado más pendiente de ustedes...
Acababan de salir de la clase de Pociones y se disponían a subir para su clase de Historia de la Magia.
-Scorpius: No te preocupes Jenna, nos ayudaste, te lo agradecemos. (Sonrió tímido)
-Albus: Ya sabíamos que sin esa ayuda estábamos destinados a fracasar... Como en todo (completamente desanimado).
-Jenna: No digas eso, Albus (con expresión triste).
-Scorpius: Me esforzaré más (decidido). Esta asignatura me gusta, puedo hacerlo mejor.
-Jenna: (Le sonríe) Así se habla.
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Uno extra porque sí♥