EL LEGADO

75. La Tortura a la Inmundicia.

Jenna llega a las Mazmorras: Los calabozos.

Los gritos y llantos se escuchaban más intensos ahí, había sangre por todos lados. Una persona encapuchada vigilaba a un par de alumnos que, con sus varitas en mano, torturaban a las personas que se encontraban encarceladas. Habían al menos cuatro chicos amarrados, esposados, ensangrentados, con la ropa hecha jirones: Sangres sucias.

Jenna estaba en shock. Uno de los alumnos que estaban ahí le lanzaba una Maldición Cruciatus a alguien en una celda. Jenna reconoció al niño encarcelado; era un Hufflepuff de Segundo curso. Mientras el niño gritaba y lloraba, el otro alumno reía y se burlaba. Jenna saca su varita y apunta al alumno que lanzaba la maldición. En eso, llega Scorpius.

-Scorpius: Jen, ¡NO! (desesperado)

-Jenna: ¡Expulso! (grita)

El hechizo golpea justo en la cara al alumno y este sale disparado por los aires y choca de golpe con la pared del fondo. Otro de los alumnos corre a socorrerlo y el tipo encapuchado saca su varita y apunta a Jenna.
Scorpius saca también su varita.

-Scorpius: ¡Expelliarmus!

Y la varita de Jenna vuela hasta su mano.

La chica voltea a ver a Scorpius muy asombrada, desconcertada. De pronto, el sujeto encapuchado toma a Jenna con brusquedad por el cuello y la estrella contra las rejillas de una celda.

-¿Qué se supone que estás haciendo, brujita?

-Scorpius: ¡Suéltala! (grita con autoridad)

El encapuchado mira a Scorpius. El chico, consternado, le devuelve la mirada, sin poder creer de quien se trataba.

El encapuchado deja caer a Jenna. Ésta tose y se toca el cuello. Scorpius la ayuda a levantarse, mirando mal al sujeto y salen de los calabozos. Caminan con velocidad por las Mazmorras.

-Scorpius: ¿Estás demente, Jen? (angustiado)

-Jenna: (Dando hondos respiros) ¿Y tú..? ¿Acaso no viste... lo que hacen ahí?

-Scorpius: Claro que lo vi, ¿pero olvidas en qué mundo estamos? No puedes actuar de esa forma tan... ¡Imprudente!

Siguen caminando.

-Jenna: Scorpius... Chapman dijo que esta fue tu idea (lo mira asustada).

-Scorpius: No fue mi idea (suelta con brusquedad). Bueno... Al menos no mía, mía. Sino la idea del Yo de esta realidad (la mira igual de asustado).

-Jenna: ¿Qué clase de monstruo eres aquí? (dolida)

Scorpius no responde, él mismo se preguntaba eso. Entonces saca la varita de Jenna y se la ofrece.

-Jenna: No (la rechaza con un ademán). Guárdamela. Tengo el presentimiento de que estará más segura en tus manos.

-Scorpius: Jen, tienes que tener más cuidado (preocupado).

-Jenna: No, Scorpius (niega con la cabeza). Tú debes tener más cuidado (lo mira con dulzura, y temor). Tú eres una esperanza segura, a mí podrían descubrirme en cualquier momento.

Scorpius no responde, sabe que es la verdad.

-Scorpius: ¿Te fijaste en el encapuchado?

-Jenna: Bastante bien de hecho, ¿olvidas lo que me hizo? (se lleva una mano al cuello)

-Scorpius: ¿Lo reconociste?

-Jenna: (Lo mira confundida) Creo... no estar segura.