20 de Julio de 2017.
Hora: 9:38am.
Era Jueves, una mañana muy soleada de verano.
Neville Longbottom, uno de los profesores de un colegio al que la mayoría podría considerar fuera de la normalidad a la que están acostumbrados, llega al número 9 de The Cabillas.
Por fuera, se veía que era una casa pequeña, pero no dejaba de tener una fachada bonita y elegante, pintada con los colores blanco y verde; y junto a la puerta, una maceta con un bonito Girasol amarillo.
Neville revisa la dirección una vez más antes de posarse frente a la puerta y llamar. Una vez decidido, traga saliva algo nervioso; no estaba acostumbrado a tratar con Muggles, pero aquello formaba parte de su trabajo y debía completar la tarea que se le había asignado. Llama a la puerta tres veces, y espera. Un minuto después, una mujer joven abre y mira al profesor con curiosidad.
-¿Qué desea?
-P.Longbottom: Buenos días.
-Buenos días.
-P.Longbottom: Disculpe, ¿es esta la casa de la familia Esparza?
-Morillo... (le corrige)
Neville se ve confundido, lee de nuevo el papel con la dirección, se afloja un poco la corbata y vuelve a mirar a la mujer.
-P.Longbottom: ¿Este no es el hogar de la señorita Jenna Esparza?
La mujer se notó extrañada, frunció un poco el ceño y le dedicó al profesor una mirada de desconfianza, se para firme ante el profesor.
-Soy su madre, ¿quién la busca?
-P.Longbottom: ¿Es usted la madre de la Señorita Esparza? (Ligeramente sorprendido por lo joven que parece. Le estrecha la mano) Mucho gusto, soy el profesor Neville Longbottom de...
-¿Profesor? (lo interrumpe desconfiada) ¿Enseña usted en la escuela San Louis?
-P.Longbottom: ¿San Louis? No. Por favor, discúlpeme señora... (hace una pausa esperando que la mujer aclare su nombre)
-Emma (con expresión seria).
-P.Longbottom: Señora Emma, ¿me permitiría usted pasar para poder explicarle el motivo de mi visita?
-¿Hay algún problema?
Una señora mayor, algo baja y regordeta se asoma a la puerta.
-Emma: (Mira a la señora mayor) El señor dice ser un profesor y está buscando a Jenna.
-¿A Jenna?, ¿para qué? (completamente confundida)
Ambas mujeres hablaban con un marcado acento extraño.
-P.Longbottom: Señoras, ¿serían por favor, tan amables de permitirme la entrada a su hogar? (con voz amable, casi suplicante) Será... No les quitaré mucho tiempo.
Neville está cada vez más nervioso, pero trata de mantenerse firme. Ambas mujeres se miran, se las ve preocupadas. Al final, le ceden el paso al profesor y éste entra a la pequeña casa. Dentro, todo se veía acogedor y limpio. Las mujeres lo guían hasta la sala y le piden que se siente, ellas se sientan frente a él.
-P.Longbottom: ¿Se encuentra la señorita Esparza? He venido a traerle ésto (les muestra una carta).
-¿Qué es eso?
-P.Longbottom: Disculpe, ¿usted es... la abuela de la señorita Esparza?
-Sí, soy... Digna.
-P.Longbottom: Es un placer, señora Digna (sonríe amable). Con gusto les explicaré el contenido de esta carta, pero desearía que la niña estuviera presente.
-Emma: Primero explíquenos qué quiere con ella (con severidad. Se cruza de brazos). Si no es un profesor de la escuela donde Jenna estudia, entonces...
-P.Longbottom: Trabajo en el Colegio Hogwarts, y he venido a ofrecerle a su hija una plaza (manteniendo la calma).
-A.Digna: ¿Una plaza? (No entiende)
-Emma: Y, ¿por qué precisamente a Jenna? (sigue desconfiada)
-P.Longbottom: Pues, porque Jenna cumple con las cualidades necesarias para estudiar allí (les sonríe).
Ambas mujeres se miran entre sí, confundidas.
-Emma: (Vuelve su mirada hacia Neville con recelo) ¿Cualidades?
-P.Longbottom: Como bien deben haber notado, la niña no es como cualquier otra (mira a ambas mujeres). Ella es especial...
Las mujeres miran al profesor Longbottom con cada vez más nerviosismo.
-P.Longbottom: ... Y Hogwarts ayudará a Jenna a sacar todo su pontencial.
El profesor se notaba cortés y educado, e intentaba utilizar un tono de voz amable. Aunque las mujeres se notaban a la defensiva, en especial la madre de la niña. Ésta mira de soslayo a la abuela y vuelve a fijar su mirada severa en Neville.
-Emma: Creemos no entender (dijo al fin).
-P.Longbottom: Bien... (ligeramente nervioso, respiró profundamente) Hogwarts, es un Colegio de Magia y Hechicería.
-Emma: (Abre mucho los ojos) ¿De magia...?
-A.Digna: ¿...Y hechicería? (desconcertada)
La abuela mira al profesor con expresión de miedo. Emma, la madre, lo piensa.
-A.Digna: No es posible...
-P.Longbottom: De hecho, sí lo es, señora (con calma). Jenna... la señorita Esparza, es una bruja.
-¿Bruja?
Los tres adultos se vuelven hacia la puerta de la sala. Allí asomada, se hallaba una niña con expresión de desconcierto. Jenna era delgada, y un poco más alta que cualquier niña de su edad, su cabello ondulado era largo y oscuro, su piel color caramelo, como la de su madre, y sus grandes ojos chocolates demostraban temor.
-Jenna: Las brujas son malas, no puede ser (niega con la cabeza, incrédula).
-P.Longbottom: (Se vuelve hacia ella con voz dulce) Hola, ¿tú eres Jenna?
-Jenna: ¿Mami? (nerviosa)
-Emma: (Se levanta y se posa delante de su hija) ¿Qué le hace pensar que creemos en semejante disparate? ¿Cómo puede decir que Jenna es...?
-P.Longbottom: Porque yo también lo soy (la interrumpe con una sonrisa).
-Jenna: ¿Usted es un brujo? (con ojos muy abiertos)
-P.Longbottom: (Sonríe con dulzura) Un mago, sí.
-Jenna: ¿Usted también puede hacer flotar las cosas?, ¿o que desaparezcan?, ¿o que exploten sin querer? (atemorizada)
Neville suspira y sonríe, saca de su bolsillo un pequeño palo de madera delgado: su varita mágica. Jenna observa todo y sus ojos brillan de curiosidad. El profesor agita la varita y al instante hace aparecer un ramo de Girasoles. La niña se lleva las manos a la boca, sorprendida. Las mujeres mayores abren mucho los ojos y se miran entre sí.
-P.Longbottom: Ten (le ofrece las flores). Algo me dice que te gustan los Girasoles.
Jenna, como embobada, se acerca lentamente al profesor. De forma tímida, toma el ramo de flores que él le ofrece.
-P.Longbottom: En Hogwarts, no solo te enseñaremos a hacer magia, sino que además te enseñaremos a controlarla.
Jenna asiente.
-P.Longbottom: (Sonríe y le tiende la carta) Ésto es para ti, Jenna.
La niña toma la carta y la examina. Cerrada con un sello en color escarlata formando un escudo algo extraño. La carta rezaba:
Señorita J. Esparza.
Segunda habitación a la derecha.
Número 9 de The Cabillas.
Londres.
La niña la abre.
-Emma: Jen, ven aquí.
La niña se acerca a su madre y se sienta junto a ella para revisar el contenido de la carta. Escrita en pergamino y con una tinta verde esmeralda. La leen:
COLEGIO HOGWARTS
DE MAGIA Y HECHICERÍA
Directora:
Minerva McGonagall.
[Orden de Merlín,
primera clase]
Querida señorita Esparza:
Tenemos el placer de informarle de que dispone de una plaza en el colegio Hogwarts de Magia y Hechicería. Por favor, observe la lista del equipo y los libros necesarios.
Las clases comienzan el 1 de Septiembre. Esperamos su lechuza antes del 31 de Julio.
Muy cordialmente,
Filius Flitwick
Subdirector.
-Emma: (Frunce el ceño) ¿1 de Septiembre? ¿Cuánto tiempo dura ésto? (le preguntó al profesor)
Jenna examinaba los otros pergaminos.
-P.Longbottom: Son siete años de educación en Hogwarts.
Jenna mira al profesor con mucha atención. La madre de ésta lo mira incrédula.
-Emma: Me refiero es a que... ¿Cuántos días debe estar allá? El 15 de Septiembre debe retornar a San Louis.
-P.Longbottom: (Piensa un momento e intenta elegir las palabras adecuadas) Si desea ingresar al Colegio Hogwarts, debe dejar de lado la educación que ha llevado hasta ahora. La señorita Esparza es una bruja y debe ser educada como tal. Son siete cursos y cada curso comienza el 1 de Septiembre, hasta el 1 de Julio que estará de vuelta en casa.
-Emma: ¿Disculpe? (desconcertada)
-A.Digna: ¿Un año fuera de casa? (horrorizada) ¡Es una niña!
-P.Longbottom: Les garantizo señoras, que el Colegio Hogwarts es un lugar muy seguro. Jenna estará a salvo, educándose con niños de su edad, todos magos igual que ella.
-Jenna: ¡Quiero ir! (dijo de pronto)
-Emma: ¡Jenna! (la mira con ojos muy abiertos)
-A.Digna: ¡No vas a ir! (firme)
-Jenna: ¿Por qué no? (Escandalizada) El profesor dice que estaré bien.
-A.Digna: Tienes que estudiar...
-Jenna: ¡Iré a estudiar allá! (desesperada)
-Emma: ¡Jenna! (la riñe)
-Jenna: Por favor, mami, quiero ir (suplicante). No quiero seguir teniendo problemas en la escuela... (sus ojos se humedecen, respira profundo) con mis compañeros, ni con mis maestros.
Ambas mujeres guardan silencio. Desde que Jenna era muy pequeña, habían sido citadas en numerosas ocasiones por circunstancias extrañas que rondaban a la niña y que involucraban a sus compañeros. Los niños también la molestaban a veces, llamándola rara o murmurando a sus espaldas. La madre de Jenna examina de nuevo la carta. Neville observaba todo atentamente en silencio.
-Emma: San Louis es una escuela pública. Si hay que pagar algo para entrar a este lugar... (mira a la abuela y luego al profesor)
-P.Longbottom: No necesitan pagar nada (se apresura a decir). Hogwarts tiene un fondo para ayudar a niños con bajos recursos. Además, el dinero Muggle es bien pagado. Digo... un poco de su dinero podría ser cambiado por moneda mágica y con eso podrían costear muchas cosas.
La madre de Jenna vuelve a guardar silencio. Lo piensa.
-Emma: Aquí dice que tiene chance hasta el 31 de Julio para dar una respuesta (mira al profesor). Aún quedan unos 10 días para que podamos pensarlo.
-P.Longbottom: Muy bien (ansioso). Puedo volver en 10 días, así ustedes lo habrán pensado mejor (mira a Jenna).
La niña mira al profesor con desespero, implorándole con la mirada que hiciera algo por ella. El profesor se levanta y le sonríe.
-P.Longbottom: Volveré.
La niña sonríe sin ganas, asiente y corre escaleras arriba, donde encuentra a su hermano menor intentando escuchar la conversación.
-Jenna: ¡Jensen! ¿Oíste algo? (con mucha emoción contenida)
El niño, de unos 5 años, niega con la cabeza.
-Jensen: Mami alzó la voz y tú igual, pero no entendí nada...
-Jenna: ¡Jensen, soy una bruja! (le interrumpe emocionada) ¡Lo que hacemos es magia! ¡Somos magos, Jensen!
El niño la mira con ojos como plato, sin poder entender a cabalidad lo que su hermana mayor le dice.
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Abajo, las señoras acompañan al profesor hasta la puerta.
-P.Longbottom: Por favor... (Susurra) Piénsenlo bien. Suprimir la magia acarrea consecuencias... que podrían ser desastrosas.
-Emma: ¿Desastrosas? (entrecierra los ojos) ¿Qué consecuencias?
-P.Longbottom: En el peor de los casos... la niña... puede morir.
La Abuela de Jenna ahogó una exclamación, y la señora Emma solo respiró profundo y asintió con la cabeza hacia el profesor.
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