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capítulo 61
+Narra Michell+
______, estaba durmiendo, se encontraba tranquila, lo sabíamos por su respiración, y por cómo su pecho subía y bajaba despacio.
Hace unas horas tuvieron que darle un calmante, se enteró de todo a excepción de lo que tenía que ver con Mario, ya sabía que había perdido a su familia lógicamente ya que por eso se alteró de esa manera.
Yo la estaba cuidando Mau y Luna fueron por algo para almorzar, las horas pasaron demasiado rápido ya eran más de las cuatro de la tarde.
Tocaron la puerta, segundos después se abrió, asomándose Luna y Mau. Traían en sus manos un par de emparedados, refrescos y jugos.
—Sigue dormida—Susurro Luna
—No ha despertado para nada—Dije levantándome de mi asiento
—Yo quería burritos—Renegue cuando vi lo que me habían traído de comer
—Yo quería ser Spiderman de pequeño, no todo se puede en la vida—Murmuró Mauricio despeinandome
—Mira ahí—Señale la esquina de la habitación—Hay una araña, si quieres ve, a que te pique así tu sueño se vuelve realidad—Sonreí sarcástica
—Buena idea, aun así tu no tendrás tus burritos de frijol—Dijo sonriendo antes de darle una mordida a su emparedado
—Los burritos de frijol son deliciosos—Dije como niña pequeña y tirandome al sofá
Mientras tanto Luna fue al lado de ______. La observo y volvió con nosotros.
Dos Horas después
—Eso te pasa por torpe, para que le haces caso de ir con la araña—Mencionó Luna. Mientras yo reía
—No quería hacerlo pero la curiosidad mató al gato—Mencionó mientras sobaba su brazo
Puesto que se cayó tratando de subir a una silla de la habitación.
—Son unos exagerados—Los observe
de reojo mire como _____ se movía, les hice una seña a los chicos, para que la miraran.
—Espero te encuentres mejor—Dijo Luna sentándose en la camilla
—Recuerdo todo...—Susurro segundos después
—¿Todo?—Pregunto esta vez Mauricio
—Todo... incluso lo que tenía que ver con Paisa—Nos observó
—Cómo es eso posible...—Mencione
—No lo se, pero necesito respuestas, no se qué modo, no se de quien pero las necesito, algo ocurre—Dijo de la nada
Nuevamente alguien llamó a la puerta, esta vez, no lo podíamos creer...