Jens POV
Una fuerte ventisca corría por las montañas, las llamas se zarandeaba de un lado a otro y el frío llegaba hasta los huesos. El fragor de la batalla en Nueva Roma ahogaba los ruidos que me rodeaban, ni siquiera escuchaba lo que me decía Katie, ya me habia pasado antes, y la mayoría me entendía, aunque la bronca de no estar allí ayudando, siendo útil.....
Las semanas posteriores a nuestra incursión en los dominios de Helios fueron demasiado tensas, Nueva Roma recibió nuevos ataques y nosotros no habíamos podido ayudar ya que Cronos y los otros dioses no nos dejaron ir. Que no querían arriesgarse a mostrar todo el poder que tenía el Olimpo y que debíamos perfeccionar nuestras habilidades, ninguno se lo tomo bien pero sorprendentemente fue Reyna la que se lo tomo mas con calma. Aunque yo sabía que las cosas con Percy no estaban yendo de la mejor manera y que ella hubiese apoyado que no debíamos mostrarnos, había alterado a todo el grupo.
Los egipcios me seguían cayendo bien, Yaz nos ayudaba a curarnos y los hermanos Kane se ofrecieron a ayudar en el entrenamiento, lo cual lo hacia mas interesante. Los shabtis servían bastante y eran peligrosos así que el entrenamiento era bastante real.
-Jens-dijo una voz a mis espaldas-te necesitan en la tienda de mando
Me di vuelta y me encontré a Jaz, estaba vestida con un pantalón de jean junto con una musculosa camuflada. Últimamente habíamos hablado más, pero nuestras conversaciones eran tensas, era algo obvio nuestros pueblos no se conocían demasiado....
-Katie después seguimos-le dije mirando sus profundos ojos verdes.
-de todas maneras no me prestabas atención-dijo ella riendo
-de todas maneras en un rato seguimos
Me acerque a Jaz que miraba a Katie de mala manera y le hice señas de empezar a ir.
-como te tratan los romanos?
-bien-dijo sin demasiado convencimiento-como a las otras chicas
-ha pasado algo? Se te nota preocupada
Respiro profundo y dirigió una mirada hacia los muros.
-la guerra no me deja dormir, saber que en cualquier momento partimos
-no debes preocuparte por eso Jaz-dije mirando su cara-ya cuando pase te podrás hacer mala sangre, mientras tanto solo disfruta de los pequeños placeres que ofrece la Vida...
-placeres...como cual?-dijo ella
-la paz y felicidad, saber que verás a tus amigos en la mañana, el cantar de los pájaros y respirar aire puro cada día, las pequeñas sonrisas que puedas sacar-dije con una sonrisa de lado
Ella puso cara pensativa y sonrió un poco de lado, tenía una sonrisa adorable.... Desvié la vista y me concentre en los ruidos de la batalla, ya habían parado y solo un grito interrumpió ¡Roma Victa! Se escucho como si un ejército lo dijera. Suspire aliviado, los romanos aguantaron otro embate enemigo. Sin darme cuenta ya estábamos en la entrada de la tienda y Jaz me sacudía el hombro.
-qué sucedió?
-te digo adentro...-dije serio
Al entrar en la tienda pude distinguir que todos estaban sentados alrededor de una mesa redonda en la cual se hallaba un mapa. Atenea estaba posicionando unas fichas negras alrededor de un punto rojo. Apenas me acerqué noté que era un mapa de Nueva Roma y vi que lo estaban rodeando, todo estaba rodeado menos el sur, lo cual era sospechoso.
Cronos levantó la vista y tanto Jaz como yo inclinamos la cabeza en modo de saludo.
-ya estamos todos-dijo el
Todos en la sala afirmaron, se encontraban varios Olímpicos,los líderes de las cabañas, los egipcios,Piper,Percy,Reyna y yo.
-Tengo noticias de Nueva Roma-dije
-qué sucede?-dijo Travis hijo de Hermes. Saber que le fascinaba Katie, y no se animaba a declarase, si solo supiera que también era al revés...
-ganaron la batalla, se hizo el grito...
-una buena-dijo Percy
-por qué estamos aquí?-consultó Sadie
-volvieron los espías-dijo Cronos-este es el panorama que vivirán los romanos en un mes... Estaríamos completamente rodeados.
-y el sur?-dijo Clarisse
-no tienen suficientes efectivos para hacer una maniobra más envolvente, pero la hará apenas llegue-dijo Atenea mientras movía las fichas en el tablero.
-quien comandan las fuerzas-dijo Percy-Perses no estará en los cuatro flancos
-no sabemos, se han movido durante la noche, pero son demasiados como para enfrentarlos-dijo un chico de unos 19 años que estaba en las sombras de la habitación.
-quien es Cronos?-dijo Reyna mirando mal al chico de la capucha
-es uno de los espías, se llama Lucius Glaber-el chico salió de las sombras sacándose la capucha. Su rostro era duro, tenía una cicatriz en el ojo derecho, su cuerpo estaba bien entrenado, tanto como un jugador de fútbol americano. Tenía dos espadas guardadas en la espalda y en su brazo derecho tenía las siglas S.P.Q.R. con 7 líneas y una espada sobre una calavera.
-hijo de Thanatos-dije sorprendiéndome-yo te conozco de algun lado
-me sorprendes, estábamos en la misma legión...
-Luego siguen hablando-nos cortó Percy con mal humor, algo raro en él, luego debería preguntarle-hay que seguir con el problema
Lucius me dedico una sonrisa y seguimos escuchando de la reunión. Ninguno se ponía de acuerdo,todos ofrecían una solución distinta lo cual era imposible escuchar.
-suficiente-gritó Atenea golpeando la mesa-
Un silencio sepulcral se hizo en la habitación, todos vimos como Atenea intimidaba con la mirada a los presentes. Percy amasaba sus sienes como esperando que cayera un plan, la mayoría miraba el mapa con indignación.
-hay que luchar y dejar de huir como cobardes,hace meses que no ponemos en movimiento este ejército-dijo Ares-los soldados están sedientos de sangre
-existe un problema Ares, nos superan en número, un ataque en campo abierto significa la muerte-dijo Piper para mi sorpresa-además si rodea una ciudad tu crees que no rodeara a un ejército?
-una hija de Afrodita va a darme consejos sobre la guerra?-dijo Ares acercándose a Piper
-y si evacuamos la ciudad?-dije mientras pensaba en evitar el desastre que trae la guerra
-como? Y adonde los llevaras?
-imposible, ningún ejército a marchado sobre Roma por más de 1500 años-dijo Reyna con los ojos abiertos como platos
-ya lo han hecho, y muchas más veces han estado cerca- dijo Atenea.
-ese será el Plan B-dijo Percy-pero si o si hay que armarlo
-yo creo que puedo hacer un portal para transportarnos-dijo Sadie-una vez que estemos dentro será fácil salir
-defenderemos la ciudad entonces
-por donde iremos?-dijo Cronos observando el mapa
-por el Sur, el camino es más sencillo-dijo Atenea
Había algo que no encajaba, por que el sur estaba libre, solo teníamos que atravesar un bosque y tendría Nueva Roma refuerzos. Cosa que para Perses no era favorable.
-no vamos a ir por el sur-dije yo-algo me da mala espina, ¿por que dejaría el sur libre Perses?, sabiendo que nosotros podemos llegar.
-no tiene suficientes tropas-dijo Reyna
-cuantos soldados dispone Perses, mi querido Lucius?-dijo Cronos
-aproximadamente unos 60 mil o más señor, siempre se sigue sumando tropas...
-nos superan 6 a 1-dije-hay algo que no me cierra, con semejante número puede mandar tropas por el Sur...
-quiere que tomemos ese camino y es lo que vamos a hacer?-dijo Deméter
-no lo se....
En ese momento se escuchó la sirena de ataque, tres guardias entraron corriendo por la entrada cargando un cuerpo lleno de flechas... El silencio inundo la habitación mientras veíamos como depositaban el cuerpo de uno de los soldados de avanzadilla
-qué sucede?-dijo Cronos gritando
-señor es un grupo de unos 5 mil hombres-dijo un guardia con el casco-no se ven una fuerza muy organizada, pero avanzan con confianza
-de esta sala solo saldrán Percy, Jens,Piper y Jaz-dijo Cronos-los demás seguirán con el plan
Los nombrados incluyéndome salimos corriendo cada uno a su tienda, la mía y la de Piper estaban más cerca que las demás, así que decidimos cambiarnos ahí en parejas. Percy y yo por un lado y las chicas por otro. En 5 minutos teníamos las armaduras puestas y estábamos en la parte alta de la muralla al frente de los hombres. Corrían soldados para todos lados, algunos no habían llegado a ponerse las armaduras
-preparen a los arqueros-dijo Percy-Piper y Jaz deben de ayudar de arriba, nosotros iremos con las tropas que están en la puerta...
-pero...-iba a quejarse Piper,pero la detuve porque los soldados enemigos se dividieron en dos para dejar pasar a Tres hombres que iban a pie. Uno de ellos levantó el brazo con la espada envainada.
-quien es su líder?-grito mientras se sacaba el casco. Una larga cabellera negra junto con una barba aparecieron en el rostro del hombre-quiero establecer una tregua...
Entre nosotros cuatro se produjo un silencio, en voz baja les dijimos con Percy que sigan con el plan, mientras nosotros nos encargamos de entretener a los enemigos. Bajamos volando y caímos unos 10 metros adelante de ellos.
-quienes son y qué quieren?-dijo Percy
Ahora que los veía de cerca intimidaban mas, sus cuerpos no estaban totalmente cubiertos por armaduras sino por pedazos de ellas, en donde faltaba un pedazo se encontraban heridas que estaban cerradas.. Emanaba un olor ácido que era una mezcla de sangre putrefacta y vino. El que se había sacado el casco no superaba el metro ochenta pero tenía fuego en la mirada...
-yo soy Castus, y el es Nassir-dijo el moreno que estaba detrás de Nassir que era quien se sacó el casco... Castus estaba armado con dos espadas, mientras que Nassir poseía una lanza con dos filos.
-yo soy Perseo Jackson y el es Jens...-Percy no sabía mi nombre completo, y lo iba a mantener en secreto...
-no son romanos-dijo uno de los que se encontraba atrás escupiendo el piso.
Castus se acerco un poco mas y nos observó con detenimiento.
-fue un placer conocerlos-dijo Nassir-ahora vamos a darnos un baño de sangre romana-esto último lo dijo gritando. El ejército comenzó a golpear sus escudos y sus espadas.
-hagamos algo-una idea loca cruzó por mi cabeza-que les parece si peleamos tus tres mejores guerreros contra los nuestros..si nosotros ganamos ustedes se van, en cambio si perdemos...
-el campamento es nuestro-termino Castus
-es un trato entonces?-dijo Nassir con media sonrisa de lado
Percy asintió y quedamos en que la pelea se haga en dos hs. Avisamos a los demás, que sorprendentemente no nos miraban mal. Solo Jaz y Piper se había enojado, Reyna solo bajó la cabeza y la mayoría asintió apoyando mi locura.
La elección era obvia iremos Percy y yo, solo resta encontrar a alguien mas que nos ayude, que no corra demasiados riesgos..
-quienes irán?-dijo Piper
-nosotros dos seguro porque hicimos el pacto, solo necesitamos a alguien más.... esto es a muerte-dijo Percy. Vi que Lucius tensó los hombros, mientras tenía una pelea de miradas con Cronos que pasaba demasiado inadvertida, su apellido me sonaba de algún lado. Y algo hizo click en mi cabeza
-Lucius tu no eres un legado tambien?-dije seguro, pero poniendo duda en mi palabra-además de ser hijo de Thanatos
-el apellido Glaber tiene un largo recorrido por Roma-me interrumpió Cronos-la mayor parte del tiempo fue un trabajo en las sombras de la República hasta que..
Esta vez fue el turno de interrumpir de Lucius que no miraba a nadie.
-Gaius Claudius Glaber, apareció en escena, aspiraba a grandes cosas-mientras decía esto Reyna solo se tapaba la boca y los que reconocían el apellido lo miraron con desprecio-solo fue un idiota que a base de trampas y engaños llegó a ser Pretor y Legatus, hasta que Espartaco le quitó todo, estuvo presente en la Tercera Guerra Servil(rebelión de esclavos), fue uno de los primeros generales en caer en la trampa de Espartaco, fue derrotado y despojado de todo...
-tu nos acompañaras-dijo Percy, Lucius solo sonrió.
-no, él debe irse antes del amanecer-dijo Cronos y la cabeza de Lucius decayó mirando el suelo
-es el candidato perfecto, quien mas puede ser aparte de él, sabes tan bien como todos en esta sala que nadie más puede arriesgarse aparte de nosotros dos
-en eso tiene razón Percy-dije mirando a Cronos y esperando que entendiera que no dejaríamos ir a nadie de esta sala-además tú nos asignaste el mando de la defensa, deja tomarnos nuestras propias decisiones
-esta bien, pero cuidense no quiero andar viendo lágrimas ni quemando sus cuerpos-dijo Cronos con una sonrisa que daba miedo, mientras miraba a todos
-de igual manera quiero que los arqueros estén preparados, no nos podemos arriesgar a que nos ataquen-dije yo, viendo que los enemigos te pueden traicionar
-lo que enfrentan son hombres, ex esclavos de la república, están bajo el mando de Espartaco seguramente -dijo Atenea con los ojos cerrados-no hay que dejar que ninguno escape
-pero derramaremos demasiada sangre...-dijo Jaz-y puede ser que sean muchos de los nuestros.
-no importa si el sacrificio se tiene que hacer se hará-dijo Reyna sin mirar a nadie en particular
Seguimos discutiendo hasta que nos dimos cuenta de que nos quedaba media hora para la pelea. Luego de despedirnos de todos, menos de Lucius, Reyna, Piper y Jaz que nos estaban acompañando hasta la armería, lugar donde habíamos dejado las armaduras. Se me hizo un nudo en el estómago, el miedo y los nervios me agobiaban, pero también sabía que mis padres y mis tutores no estarían de acuerdo con el miedo, en especial uno...
Nos comenzamos a preparar los tres mientras las chicas nos ayudaban, en lo que podían, lo sorprendente era que ninguna de las tres hablaba, era como si nos hicieran una ley del hielo. Ya sea por los nervios o la ansiedad nosotros tres nos hacíamos chistes, apuestas para descontracturarse, los demás nos observaban e inclinaban la cabeza en señal de respeto. En sus ojos veía determinación pero también miedo.
-Saben que los odio?-dijo una voz femenina detrás mío, los tres nos dimos vuelta a ver quien lo había dicho y vimos a Reyna con los ojos llenos de furia, yo solo mire a Percy y le pegue un codazo para que fuera con su novia a aclarar las cosas. Ellos dos solo se separaron y nos dejaron a los demás en un incómodo silencio, unos chicos se acercaron y Lucius se fue dejándome con las chicas, supuse que serian sus amigos.
-te vas a cuidar tarado?-dijo Piper con una sonrisa y una lágrima que amenazaba por salir
-oye, estoy al lado del héroe más grande de la modernidad y de un romano que quiere asesinar a todos los esclavos para poner el nombre de su familia en lo más alto-dije con confianza mirando a las dos a los ojos, excepto Jaz que tenía la cabeza gacha-vamos a volver, hay que dirigir un ejército...
-creo que si puedes.-Piper no pudo terminar de hablar porque Reyna se fue corriendo sin mirar atrás y un Percy que estiro el brazo pero que no llego-voy a ver que paso con Percy y de paso despedirme...cuidate Jens...
-eso haré-y con un último abrazo nos despedimos..
Yaz seguía sin levantar la cara y comenzó a sollozar, verla así me generó un vacío en mi interior, sabia que eramos amigos pero no creí que me tuviera tanto aprecio.
-Yaz..puedes verme a los ojos?
Ella no respondió solo siguió mirando para abajo, estaba poniéndome nervioso la situacion, asi que me acerque y la abracé, estaba tiritando, no sabía si era por el frío, la bronca o vaya a saber uno. A mi me recorrio un escalofrio por toda mi espalda y se me puso la piel de gallina.
-perdon, todavia no me acostumbro a esto...
-a la guerra?-dije yo
-no...-dijo sonriendo de lado-a tu terquedad y tu idiotez o tus ideas...
-lo tendrás que seguir haciendo, no soy alguien que muera fácil, y tengo que seguir cuidando del Campamento...
Ella levantó la cabeza y me sonrió, decidí separar el abrazo a duras penas y pude ver todos los rasgos de su cara. Sus ojos claros, su pelo rubio, sus cejas finas y sus preciosos labios que me volvían loco, pero solo eramos amigos, por más distracción que me generara y ganas de besarla debía controlarme. Por más que quisiera, nuestros pueblos se odiaban y no tendría una buena reputación para cuando vuelva... Cuando me di vuelta vi a Piper que abrazaba a Percy y lo traia donde yo estaba, Lucius aparecio atras mio y me entregó una botella de agua a mi y a Percy.
-Vamos que nuestros amigos nos están esperando-dije yo
Nos dimos vuelta y salimos por las puertas de la fortaleza, esta vez decidimos caminar hasta el punto de reunión, estaba a unos 200 metros de la fortaleza y a igual distancia del ejército enemigo.
-No haremos duelos individuales, seguramente sea una pelea de tres contra tres-dijo Percy mientras movía su espada de un lado para otro, Lucius llevaba consigo dos espadas y yo había adoptado una espada y un escudo, como había iniciado originalmente.
-Al fin se dignan a venir-dijo Castus, mientras movía la espada-apenas termine esto violare a sus mujeres.
Los acompañantes de Castus solo rieron y él sacó su otra espada.
-eres tu Glaber?-pregunto Nassir-eres identico a ese patético general, es una pena que huyó con el rabo entre sus piernas deseaba matarlo
El lugar que habíamos elegido era un monticulo en el medio del terreno, desde ahí veíamos la longitud de su ejército enemigo y ellos veían nuestras defensas.
-Lo hacemos por turnos Nassir?-dijo Jens sin mirar a Castus.
-no, pelearemos los 6 a la vez-respondió Nassir.
En ese momento el enemigo que se encontraba a la derecha de Nassir ataco. Era un hombre de casi dos metros, un cuerpo trabajado y un hacha enorme, tanto Nassir como Castus se abrieron y quedamos las parejas del duelo.
Lucius contra Castus, Percy contra Nassir y a mi me había tocado el premio grandote. Decir que la pelea para mi empezo bien seria un decir, porque nuestro pequeño amigo me dio una patada en el escudo haciendo que volara dos metros. En el piso intentó unas tres veces seguidas de partirme en dos, tuve que girarme porque parar un hachazo seria perder mi brazo y mi escudo...
POV Narrador
La pelea no había empezado bien para ninguno de los semidioses,Percy no podía atacar ya que la distancia de la lanza no le permitía acercarse, Castus estaba acribillando con ataques a Lucius que se encontraba sereno esquivando los diferentes ataques que le daba el moreno. Mientras que Jens solo intentaba de no quedar como calcomanía en el piso...
Mientras tanto Piper y Yaz observaban la pelea desde lo alto de la muralla, ambas impresionadas por la habilidad que presentaban los enemigos en combate cuerpo a cuerpo, las órdenes ya estaban repartidas y uno de los generales ya había salido con 5 mil hombres para rodear a los esclavos.
Castus comenzó a perder el envión de fuerza y de ataques, haciendo que Lucius contraatacara los golpes se repartieron con heridas mínimas, hasta que el semidiós aprovechó un error atravesando una de sus espadas en la pierna y cortando la mano izquierda del moreno que solo grito..
-Sabes quien soy maldito esclavo?-dijo el romano esquivando un ataque desesperado del moreno que lo dejó totalmente desarmado ya que el semidiós piso su mano separando así su espada.
-eres escoria romana que muy pronto morirá, hijo de Thanatos-esto lo dijo y solamente el romano se rio
-esto es por Claudius Glaber y por cada romano que asesinaste en tu vida-dicho esto el romano separó la cabeza del moreno de su cuerpo con una hermosa finta, la espesa sangre manchó la espada del romano que solo veía con asco al mutilado cuerpo.
Mientras se desarrollaba esta lucha Percy había podido golpear uno de los brazos de Nassir, mientras que el sirio golpeó uno de los costados del griego rompiendo un par de huesos con su pesada lanza. Deseoso de terminar el sirio atacó con más ímpetu y atravesó a Percy... La voz de Piper sonó por todo el valle, el sirio miro la cara de su contrincante y sonrió. Pero un ardor surgió desde el estómago y la espada atravesando tanto carne como metal se hizo espacio en la mente de la víctima..
-Enserio pensaste que me habías matado Nassir-dijo Percy sosteniendo su lanza a un costado del cuerpo. El cuerpo del sirio cayó con un golpe seco y la espada salió en limpio, ni se trabo con la armadura ni con la carne. Los vitoreos del ejército enemigo se callaron y todos dirigieron su atención al más grande de los luchadores.
Tanto Jens como el gigante estaban golpeados, aunque las heridas del más pequeño de los hombres eran más profundas, el escudo yacía a un costado junto con la espada y el hacha. Esta última se encontraba partida al medio y con el filo peligrosamente cerca de la pelea, el más pequeño deseoso de terminar, golpeó una de las piernas del gigante que no cedió.
-ahora es mi turno-dijo el gigante, golpeó en el pecho a Jens haciendo volar un par de metros, esta vez las costillas del greco-romano cedieron, su pecho comenzó a cerrarse quitando su aire de los pulmones. El gigante ajeno a las otras peleas se acerco con confianza para terminar con la vida que se encontraba a su merced, cojio su hacha partida por el camino y avanzó, ni siquiera noto que no se encontraba la espada... Levantó su hacha por encima de su cabeza y sonrió al ver que su posibilidad de cumplir su cometido estaba cerca, pero sus piernas se lo impidieron.
Una espada en cada pierna lo tenía inmovilizado y tan rápido como giro la cabeza sus brazos fueron desmembrados por los hombros. Los tres semidioses que seguían de pies a duras penas observaban como el esclavo se desangraba en la tierra. Las espadas de las piernas pertenecían a Lucius y a Percy, pero la espada que acabó con los brazos fue la de Jens.
-es hora de acabar con la plaga-dijo Lucius
-No podrán con nuestra alianza-dijo el esclavo tosiendo sangre-morirán a manos de sus enemigos, los dos griegos no sobrevivirán al ataque a Nueva Roma , tu romano caerás bajo la espada de mi amo...
Los tres semidioses se miraron con cierto recelo, hasta que Jens atravesó su espada por el corazón. Un cuerno sonó a lo lejos y las tropas enemigas comenzaron a avanzar....
Pov Jens
Decir que esperaba que no rompieran el pacto era una mentira, en el fondo sabía que no pondrían en riesgo la victoria por tres muertes de un bando. Lo que nos quedaba era ponernos a una distancia prudente de nuestras flechas, porque si no vamos a sufrir una hermosa y digna muerte.
Comenzamos a bajar del monticulo, los tres estabamos bastante heridos, pero parecía que la adrenalina nos estaba ayudando a no desfallecer. Los arqueros enemigos comenzaron a jugar tiro al blanco con nosotros pero podía sentir las flechas surcando el aire y detenerlas para que no llegaran.
-No vamos a llegar a la entrada-dijo Percy confirmando mis dudas, teníamos los enemigos a 100 mts y nosotros habíamos avanzado solo 50 mts hacia la entrada.
-En eso tenes razon, haz la seña Jens-dijo Lucius mientras desenvainaba las dos espadas. Yo solo tire de la cadena de mi cuello y un arco salió. Solo debía tensar la cuerda y la flecha aparecería, lo cual lo hizo pero yo la solté, firmando así nuestra sentencia de muerte.
Observe que los arqueros desde la muralla tomaban posiciones, antes de irnos habíamos dejado las órdenes claras, no arriesgariamos la fortaleza por tres vidas. Los escuadrones que no tiraran una salva de flechas tendrán castigos severos, dados por nosotros mismos o por los que nos suplanten en caso de muerte... Pude ver que casi todos los escuadrones comenzaron a tirar, el único que no vi fue el de Piper, es decir dos cuartos del ejercito no tiraron. Seguía analizando la trayectoria de nuestras flechas para no tener sorpresas por la espalda..
-Están listos?-dije yo, mientras ponía el escudo y mi espada en posición
-Eso siempre Jens-dijo Percy mirando a las tropas enemigas que venían gritando desaforadas y sin ninguna formación.
Nosotros comenzamos a cargar contra ellos, pero no íbamos solos, detrás nuestro apareció una gran cantidad de caballería cargando al enemigo desde el frente y rompiendo aún más sus filas, la sorpresa duró un par de segundos hasta que las tropas enemigas se armaron de vuelta, sin mucho éxito pero comenzaron a cerrarse. Otro grito de guerra apareció en el fragor de la batalla, el enemigo estaba rodeado, el ejército aliado había dado la vuelta mientras nosotros teníamos el duelo a muerte.
Mis movimientos se hacían repetitivos, estocada, escudo, estocada y así continuamente. Una parte de mi armadura estaba partida y me lastima las costillas, pero si paraba a quitarla era muy probable que muriera. Estar en el medio de una batalla no es lo más agradable del mundo, pero era divertido y me servía para entrenar mis habilidades, cada tanto lanzaba fuego(gracias Hestia), ahorcaba enemigos con las plantas (Deméter) y los hundía en la tierra (Hades). Lo desagradable de la batalla era el olor a putrefacción y ver distintos miembros humanos desperdigados por todo el campo, sin decir los cadáveres, que cada vez complican más el caminar a través del campo, también ver mis brazos y todo mi cuerpo empapado de una sustancia tibia y pegajosa, era sangre que bañaba todo el piso y a los soldados que estaban en la lucha.
La batalla duró unas dos horas más ya que matar a 5 mil enemigos no era una cosa de minutos, el tendal de cuerpos en el campo era impresionante, solo 150 enemigos habían sobrevivido, estaban desperdigados por todo el campo y lo hicieron al estar rodeados sin oportunidad de moverse. Las caída de nuestro lado fueron mínimas, 50 hombres de caballería y 100 de infantería. Lo que me sorprendió fue la caballería, no esperaba esa ayuda.
En el campo encontré a Percy, Lucius y Piper hablando animadamente, como si los muertos alrededor no los molestaran, ni el olor a podredumbre que estaba en todo el lugar. Cada tanto se sentían gemidos y tanto médicos como soldados se acercaban para atender a los heridos o asesinar a algún enemigo que haya sobrevivido.
De los cuatro la mejor que se encontraba era Piper, ella no se notaba herida, aunque todos estábamos bañados en sangre, los brazos los teníamos super pegajosos y también llenos de tierra.
-Veo que sobrevivimos todos-dijo Lucius sonriendome y palmeando mi espalda-me alegra tanto..
-Por ahora si, pero vamos a la fortaleza que quiero darme un baño-dijo Percy a lo que todos afirmamos y comenzamos nuestra marcha
-Y Jaz?-pregunte ya que no la veia por ningun lado
-Algún interés especial en ella?-dijo Piper con una sonrisa maliciosa, debía estar ruborizado, pero con la sangre no lo notaba nadie...
-Elemental mi querida Watson-dijo Percy en tono de broma-el amor...
Todos comenzaron a reírse, hasta yo lo hice, la risa me alivio por dentro.
-Yo si fuera ustedes dos no me burlaria de nadie-dije doblando la apuesta, a lo que solo Percy se rio y Piper bajó la vista mordiéndose el labio.
En eso aparece Jaz por detras dando un zape en la cabeza a mi y a Percy. El ceño lo tenía fruncido, llevaba una espada atada en la cintura y su armadura estaba manchada de sangre, tenía una sonrisa como una niña en una dulcería.
-Oye no es justo-dijo Percy infantilmente
-Eso es por ser idiotas-dijo mientras le dirigía la mirada a Lucius- a ti no te pegue porque no tengo suficiente confianza.
-La verdad que necesitan un par más-dijo Piper maliciosamente.
-oye somos buenos..-no pude terminar de decir porque comenzó a arder todo el cuerpo en especial las costillas mi vista se volvió borrosa, junto puntos brillantes por todas partes y a marearme. La adrenalina había hecho bien su trabajo hasta ese momento, pero no logré mantenerme en pie y caí de bruces al piso.
Todo se volvió oscuro y sentía que mi alma estaba abandonando el cuerpo.....
Hola a todos. Espero que les guste la historia, estoy actualizando lo mas rapido que puedo.
A veces creo que casi nadie lee esto, o capaz son lectores tímidos. Gracias por los Votos, me ayudan a seguir y a esforzarme mas.
Ya tiene 3.4K de vistos la historia, no me la creo,a los 4k voy a hacer seguro una maratón,lamentablemente la próxima actualización va a ser dentro de tres semanas ya que rindo Finales en la facultad.
μέχρι την επόμενη (hasta la proxima)