Edward: -¡Oh por Dios!- me bajó la falda del vestido y se levantó.
Jane: -No, Edward sigue dándome- reí. Esto iba a estar en las noticias de mañana. Sólo me imaginaba 'Hermanos gemelos fajando a todo dar'
Director Bieber: -Bien, aquí no hay nada que ver, fuera todo el mundo.
Periodista: -Jane ¿Te gusta tu hermano gemelo?
Periodista: -¿Mantienen un romance secreto?
Periodista: -¿Son hermanos de verdad?
Periodista: -¿Eres bisexual?
Jane: -Si a todo- sonreí.
Justin: -¿Qué es esto?- entró.
Director Bieber: -Ayúdame, encontraron a Jane y a Edward en una posición no muy justificable- hizo una mueca.
Justin me miró yo estaba haciendo poses exageradas frente a la cámara mientras Edward estaba escondido en el baño. Cobarde.
Justin: -¡Fuera todo el mundo!- empezó a sacar a todos los reporteros con ayuda de la seguridad del internado, no muy eficientes según me contaba mi madre.
Cuando lograron deshacerse de todo el mundo, Justin dio un portazo y me miro airado, yo le alcé una ceja.
Justin: -¿Que tú no tienes el más mínimo control? Nisiquiera por el velorio de tu padre.
Edward: -¿Ya se fueron?- se asomó por la puerta del baño como un chiquillo cobarde.
Jane: -Sí, ven y sigue dándome- di una carcajada.
Justin: -¡Esto no es gracioso, Jane Claire!
Edward: -Un consejo; no se enoje y la reprenda, eso la excita más- salió de su escondite para lanzarse en el colchón a la par mía. Pasó su brazo sobre mí.
Justin: -Wow, sí que la conoces.
Edward: -Sé lo que va a hacer antes de que lo haya pensado.
Jane: -¡Cállate! Él no puede saber eso- le susurré. Edward me conocía muy bien, a él era el único que no podía engañar, pero no podía dejar que le contara todo de mi al papasito que quería controlarme.
Justin: -¿Cuánto cobras por un curso intensivo de antropología Jane?- se sentó en la cama.
Jane: -¿Quién dijo que podía sentarse?- lo empujé- Esta cama sólo se acuestan los Bieber.
Justin: -Leigh no era Bieber- suficiente para que me ardiera la sangre, se me fermentara, combustionara y evaporara.
Jane: -¡A esa p%rra de m%$da no la vuelve a mencionar!- me puse de pie sobre la cama.
Edward: -Siéntate- me ordenó.
Jane: -Que se siente esta- le mostré mi dedo del medio.
Justin: -¡Respeta a tu hermano!
Jane: -Mire señor director cuidador niñero del diablo usted no me va a venir a decir que puedo o no hacer, me hace un favor y se va ¡Ya mismo de esta habitación!
Justin: -Más bien, tú estás en mi habitación, así que quien debe retirarse eres tú.
Jane: -¿Uh?- mis ojos se abrieron al igual que la puerta.
Abuelo Bieber: -¡Jane Claire Bieber y Edward James Bieber! ¡¡Me explican ya mismo que pasó!!- resoplaba molesto.
Edward: -Abuelo no es lo que parecía, simplemente estaba cortándole la cinta de la etiqueta a Jane.
Abuelo Bieber: -¿Y para eso tenían que estar enbrocados de esa manera?
Jane: -Si te pones a pensar los únicos indecentes aquí son tú y los periodistas que entraron sin tocar a una habitación. Aunque estuviéramos fajando enseiro no tenían porque entrar ¿No crees?- me senté de un tirón.
Edward: -Es un bueno punto- puso su cabeza sobre mis piernas.
Justin: -Hasta yo estoy deacuerdo en eso- decía mientras estaba cruzado de brazos arrecostado en la pared.
Abuelo Bieber: -¡Pero ahora estarán en las noticias de mañana!
Jane: -Eso no es fuera de lo común para mí- acaricié el suave cabello de Edward, igual que el de mi padre. Él me lanzó un beso en el aire.
Abuelo Bieber: -¿Seguros que no tienen algo?- nos miró asustado.
Edward: -Abuelo es mi hermana gemela- rodó sus ojos.
Jane: -Mira lo que hacemos- le di un piquito a Ed en la boca.
Justin: -¡Ay por Dios!- salió de la habitación molesto.
Abuelo Bieber: -Le doy dos días para que los regrese- salió tambien.
Edward: -Te quiero- me sonrió tierno.
Jane: -Y yo a ti, inútil- le di una bofetada suave.
Edward: -Mi desquiciada- me abrazó por la cintura.
Jane: -¿Sabes? ¿Cuánto crees que nos pagarían por tus espermas? Podríamos ganar dinero- Edward rio.
Edward: -¿Al menos no vas a prostituirme?- acarició mi mejilla.
Jane: -Obvio no, nadie más que yo puede tocarte- acaricié todo su rostro- ¿entendiste?- guiñé de sus mejillas toscamente.
Justin: -Afuera ambos, tengo que dormir- dijo pegado su pie contra el piso rítmicamente al tiempo que tronaba sus dedos.
Jane: -¿Escuchaste algo, Ed?- me hice la desentendida.
Edward: -Yo nada ¿Y tú?
Jane: -Como que un iluso quiere sacarnos de la habitación de nuestro difunto padre.
Justin: -¿Nisiquiera piensan bajar a dar la cara?- nos miró desconcertado.
Jane: -Mire señor Mánchester, le aviso que este es el internado principal de Londres. Su fundador es Edward Bieber osea mi bisabuelo y el actual director es mi abuelo ¿Usted?
Justin: -Harry Lí-Sellers el que va a nalguearte si sigues de malcriada.
Edward: -Uyuyuy, mejor me pongo cómodo- se levantó de mis piernas y se recostó en la almohada, yo me levanté sin quitar la vista de Justin.
Jane: -Señor Lí no sé qué ¿Tiene idea de dónde está?
Justin: -Edward ¿Ya notaste que tu hermana trae vendadas las muñecas?
Edward: -¿Son vendas? Pensé que era su nueva moda- rió. A Edward siempre le parecían entretenidos mis espectáculos.
Justin: -Quebró el espejo de una gasolinera en la carretera de Mánchester.
Jane: -Ay que fuerte- me burlé- Dándole las quejas a mi hermano gemelo, Edward no me regañes- hice un puchero en burla.
Justin: -Coño, Edward ¿Qué clase de hermano eres? Que no proteges a tu hermana- dijo atónito.
Edward: -Se nota que no sabe la história de nuestro nacimiento.
Justin: -Me la sé hasta en japonés. La viva de tu hermana casi te mata en el vientre.
Edward: -Ajam. Aparte que yo soy mayor que ella biológicamente pero ella me mangoneó para salir primero.
Justin: -Estaba urgida por venir a envenenar a su familia.
Jane: -Usted no sabes nada de mí- me aproximé a él- ni de mi veneno- entrecerré los ojos viendolo fijamente- Ni quiere saberlo, se lo aseguro.
Justin: -No me intimidas- negó con la cabeza.
Jane: -Es una lástima, pues le conviene tenerme miedo- estaba a centímetros de su rostro.
Edward: -Si se van a besar me avisan para cambiar de ángulo y tener mejor panorama- Ay Edward eres tan oportuno.
Justin: -Yo no beso a 'MiniVeneno'- Bonito apodo, muy romántico. ¿A dónde quedó el 'cariño' 'nena' 'hermosa'? 'MiniVeneno' era el apodo con el que todas las chicas caían rendidas enamoradas, sarcasmo.
Jane: -¿Se lo preguntamos al estacionamiento del Hospital de Mánchester?- alcé una ceja, la puerta se abrió.
Abuelo Bieber: -La gente ya se fue, pueden bajar- Sin quitar la vista de Justin le hice una reverencia para que saliera, él salió rápidamente.
Jane: -¡Edward cárgame!- Edward se levantó y me cargó sobre su espalda, bajamos las escaleras y llegamos al gran salón. Sólo recordé cuando mi madre hizo aquel show frente a mi abuelo en aquella reunión.
Edward: -Hola, Dani- me bajó y se acercó a Danielle, combustión dentro de mi una vez más.
Jane: -¿Y el ataúd?- miré para todos lados.
Abuelo Bieber: -justin fue cremado- me acercó una caja de plata.
Jane: -¿Qué? Mi-mi-mi padre...¿Mi padre está hecho cenizas?- di dos pasos hacia atrás.
Abuelo Bieber: -Queremos tenerlo aquó.
Jane: -¡Que enfermo eres abuelo!- las lágrimas inundaron mis ojos.
Danielle: -Jane, fue desición de tu abuelo.
Jane: -¿Y nosotros qué? ¿Valemos las mil m%$das que deshechas en el inodoro a diario?- dije alterada.
Justin: -Jane, cálmate- me miró frío.
Jane: -¡Tú cállate, Lí! ¡Aqui no tienes ni voz ni voto! ¡No eres nadie en esta familia, nisiquiera perteneces a ella!
Perrie: -Jane, Justin es como el ahijado de tu padre, es como de la familia,
Jane: -¿Y cómo es que coño nunca me di cuenta de su existencia? ¡Odio esta maldita familia!
Perrie: -¡Jane, basta! ¡Estamos de luto!
Jane: -¡Que luto ni que mil p%tas baratas! ¡Están enfermos todos y ahora mismo les diré sus verdades!
Edward: -Esto va a estar bueno- rió. Todos lo miraron con cara de desaprobación.
Jane: -¿Con quién iré a comenzar?- comencé a rodear el salón.
Justin: -Jane, no hagas esto.
Ryan: -¿Qué pasó aquí?- llegó con un sanwich y las mejillas rellenas.
Edward: -Jane nos dirá nuestras verdades- dijo de lo más tranquilo, como si se tratara que un relato en una película.
Ryan: -Ah bien- dio otro mordisco a su sandwich.
Jane: -¿Qué tal si comenzamos con la z%rra que causó todo esto?- miré a Justin- Liz Poulston.
Justin: -Jane, cállate- dijo furioso. Yo miré a todos asombrada.
Jane: -Este me calla y ustedes no dicen nada ¡Wow!- aplaudí- Pues sí, esa z%rra maldita fue quien tiene a mi madre en coma.
Perrie: -Jane...
Jane: -¡Cállate, Perrie!
Danielle: -Jane no le hables así a mi madre.
Jane: -Tú métete a Edward dentro de el trasero y te callas tambien- dije furiosa- Esa maldita fue la que me hizo decir la mala noticia a mi madre ¡Y por ella ocurrió el accidente! ¡Ella tiene la culpa de todo!
Abuelo Bieber: -¡Jane, basta!
Jane: -¡¡Ella tiene la culpa que mi padre esté en esa caja!!- las lágrimas comenzaron a brotar de mis ojos furiosos- Y tú abuelo, eres un ridículo en conservar las cenizas de Justin Bieber ¡El no era más que un basura que jugó con mi madre!- di un manotazo y boté las cenizas al suelo, estas se regaron en todo el piso.
Perrie: -¡Dios mío, Jane!- todos dieron un grito de espanto.
Jane: -¿Mi padre es cenizas? ¿Ahí quedó Justin Bieber?- señalé el piso- Bien muerto, Bieber- dije muerta en llanto mientras corrí por las escaleras.
Edward: -¡Jane!- corrió tras de mí. Llegué a aquel pasillo donde mi mamá y Bieber pasaban horas hablando en las noches con vista al prado. Me senté en el barandal y comencé a llorar, Edward llegó y sólo me abrazó con fuerza. Amaba a Edward, sabía exactamente cuando no necesitaba que me reprendieran.
Jane: -¡Se fue, Ed! ¡Nos abandonó!- decía desconsolada.
Edward: -No nos abandonó. Nosotros lo abandonamos a él- me tomó de la barbilla- Yo siempre estaré contigo.
Jane: -¿Y ahora que haremos?- decia entre sollozos.
Edward: -Continuar.
Justin: -Disculpa, Edward...¿Puedo estar a solas con Jane un segundo?- interrumpió nuestro tan emocional momento.
Edward: -¿Está bien para ti?- tomó mi barbilla. Yo asentí, Edward desapareció. Justin se acercó lentamente mientras mi mirada permanecía en el piso viendo hacia sus zapatos aproximándose, yo sentía ese nudo en el pecho que no se deshacia.
Justin: -Eres muy...muy directa- dijo caminando hacia la izquierda, observándome como un esperimento científico-...aparte que dices lo que piensas sin pensar si decirlo o no....-yo permanecía callada aspirando la flema que resbalaba por mis pulmones-...No te importa lo que sientan los demás, sino defender tu punto...-caminaba de un lado a otro observándome, yo seguía cabizbaja, sabía que si lo miraba a los ojos iba a derretirme, sus ojos Cafes vibraban más cuando observaba este espécimen tan malvado.
Jane: -Explicarle mis puntos de vista y mi forma de pensar es complicada, aparentemente ilógica y sé que no va a entenderla ni comprenderla.
Justin: -¿Me dejas intentarlo?- Negué- Bien, botaste las cenizas de tu padre en el suelo.
Jane: -Justin Bieber era más que órganos. Justin Bieber era una persona y esas cenizas no son mi padre. Sólo son los restos de su cuerpo.
Justin: -Eso si no me lo esperaba- se acercó a mí y cuando alcé la miraba ya estábamos a centímetros.
Jane: -¿A qué vino?- miré sus labios carnosos y rojos que me pedían a gritos que los devorara.
Justin: -¿Cómo hace Edward para conocerte tan bien y saber como ponerte en tu lugar y no lo hace?- dio una media sonrisa al notar que me comía sus labios en mi pensamiento.
Jane: -Porque es mi hermano y nos encubrimos entre los dos, le conviene estar bien conmigo porque me necesita mas que yo a él.
Justin: -¿Y el lo sabe?
Jane: -Seguramente- alcé la vista a sus ojos. M%$da, me sentía como un pequeño gatito acorralado por un rottweiler enorme; que tiene miedo y duda entre sacar las garras o dejarse devorar por su depredador.
Justin: -¿Por qué te pones así?- puso sus manos a los lados de mis piernas sobre el barandal.
Jane: -¿Cómo?- no estaba segura si se refería a la reacción que provocaba en mí.
Justin: -Mira- se alejó, mi cuerpo se relajó y mi respiración se tranquilizaba-...lejos...-sonrió y se acercó. Mi cuerpo volvió a tensarse y mi corazón a acelerarse-...cerca-susurró, ya entendía a que se refería.
Jane: -No sé de qué me habla- evité tener contacto visual con él a toda costa pero su mirada perseguía a la mía.
Justin: -¿Por qué te tensas cuando me tienes cerca físicamente?- tomó mi barbilla y dirigió mi cara hacia la suya para que lo mirara a los ojos.
Jane: -No me tenso- que mal fingí eso, hasta yo me di cuenta.
Justin: -Son las dos de la mañana, debemos ir a dormir- me ofreció su mano, yo me bajé dejándola extendida.
Jane: -Siglo XXI, las mujeres no somos inválidas- acomodé la falda de mi vestido y caminé dentro del internado.
Danielle: -¿Te sientes bien?- me abrazó.
Jane: -Sí- la aparté brúscamente.
Danielle: -Edward ya se fue a dormir, está en la habitación donde habitúan dormir.
Jane: -¿Dónde dormirás tú?
Danielle: -En la habitación de tu abuela.
Jane: -¿Y mi abuelo?
Danielle: -Se fue al internado de chicos- ¿Al internado de chicos? Se me vino una mega idea que casi me explota la cabeza.
Jane: -Entiendo. Pero pensé que dormiría en la habitación de mi padre.
Justin: -No, ahí dormiré yo.
Jane: -Justin en la habitación de Justin, irónico.
Justin: -No tengo culpa que gracias a tu padre yo haya nacido.
Jane: -Si si como sea, descansa Dani- la abracé y entré a la habitación con Edward, era una habitación de internas anteriormente pero mi abuelo la desalojó completamante para cuando Ed y yo quisiéramos venir a visitarlo. Cuando entré estaba Edward recostado en una de las camas, lo único que cubría su cuerpo era un boxer color marino socado, se volteó al escuchar el sonido de la puerta.
Edward: -Pensé que era Danielle.
Jane: -Ya desearas que Danielle entre y te vea semi desnudo- me senté a la par suya.
Edward: -Aunque preferiría verla a ella semidesnuda- sonrió morbosamente.
Jane: -¡Eres un pervertido!- reí y le di un golpe suave con la almohada.
Edward: -Tú te quieres fajar a Lí-Seller- me empujó y caí de la cama.
Jane: -¡Eso no...eso no es cierto!- me levanté, Ed me alzó una ceja- ¡No es cierto!
Edward: -Lo desnudas con la vista, ya quisieras ver el tamaño de esa anaconda.
Jane: -¡Edward!- sentí como mis mejillas se quemaban.
Edward: -¿O es una boa?- se reía.
Jane: -¡Edward basta!- moría de la pena, me lancé sobre él.
Edward: -No no, espera ¡Es una cobra! Y se mueve asi- comenzó a fingir el sonido de una cobra y el movimiento.
Jane: -¡Edward no!- reía nerviosa, me senté sobre su abdomen y apresé sus manos contra el colchón- Entiende, a mi ese inepto viejo director no me interesa.
Edward: -Claro que no te interesa, sólo te interesa su mamba negra- rió.
Jane: -¡Por las mil p%tas que parieron a Lí-Sellers! ¡Deja ya su purrote en paz!
Edward: -Tú no la dejarás en paz cuando caiga en tus manos, se te enrredará por el cuerpo como una pitón y te estrangulará.
Jane: -¡Edward Bieber! ¡Cállate ya!- moría de pena, me puse como un tomate. No era nada raro hablar de purros con Edward, pero si del purro de Justin.
Edward: -Quieres que te acorrale sobre su escritorio de director...
Jane: -Edward, cállate.
Edward: -...Y te quite hasta la piel...
Jane: -¡Que te calles!- estaba a punto de explotar de tan roja que estaba.
Edward: -¡Mira que roja te has puesto!- reía a carcajadas, yo seguía sentada en su abdomen.
Jane: -¡No estoy roja! ¡Es que..es que...es que me desesperas!- reía nerviosa.
Edward: -...Y que se quite la ropa y te muestre esa anaconda asesina ¡Ya sé! ¡Ya sé! ¡La metralladora Lí-Sellers!
Jane: -¡Edward noooo!- hundí mi cabeza en su pecho para evitar que viera como estaba.
Edward: -Esa AK-47 apuntando hacia Jane Bieber. Ese cañón mortal se ha levantado y está a punto de disparar, Jane se prepara para el ataque..
Jane: -¡Edward basta! ¡Si sigues voy a gritar!- casi me da un colapso.
Edward: -...Carguen...-hizo el ruido de un seguro de arma.
Jane: -¡No!- sacudí mi cabeza.
Edward: -...¡Apunten!...- sonrió maléficamente, sabía que comparar el purro de Justin con una serpiente venenosa o con un arma letal me volvía loca- ...¡Fuego!- comenzó a mover sus caderas contra las mías levántandolas con fuerza, como su fuese un faje real pero estaba bromeando, además que traíamos ropa, sólo estaba jugando- Jane está recibiendo los tiros de la metralladora Lí-Sellers- seguía moviendo sus caderas rítmicamente exageradas.
Jane: -¡Edward cálmate! ¡Deja de hacer eso!- mi cabello se meneaba por los saltos de la cadera de Edward.
Edward: -¿Qué estoy escuchando? ¿Los jadeos de la víctima?- ambos reímos- Y la víctima se resiste, vamos con esos gemidos ¡Ahh! ¡¡¡Ahh!!! ¡¡¡Ahh!!- Ed comenzó a fingir gemidos sin dejar de movelas las caderas- ¡Más! ¡Más Justin! ¡Mas duro! ¡Rellename con tu plomo!- fingía voz de niña. Yo ya ni podía hablar, estaba muerta de la risa, por poco mojo mis pantalones- ¿Quieres más duro, Jane? ¡Recarguen municiones!- se detuvo y fingió el sonido de una recarga de balas.
Jane: -¡Estás loco!- dije en carcajadas, sinceramente me causaba mucha gracia.
Edward: -¡La víctima se resiste! ¡Li-Sellers necesitamos una arma más potente! ¡La víctima pide diez centímetros más! ¡Entrándole con la viagra!
Jane: -¡Noooo!- di una carcajada.
Edward: -¡Fuego!- comenzó de nuevo con los movimientos, yo moría de la risa y Edward reía a carcajadas al ver mi reacción- ¡Eso, aguanta, aguanta la cobra de Lí-...-la puerta se abrió.
Perrie: -¡¡¡Por Dios!!!
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El hermano más respetuoso que existe