Dulce Maldad [En Librerías]

By JessRe

16.1M 1.5M 949K

«Detrás de toda belleza, se oculta el peor de los males» #1 en fantasía 16/02/17 #2 en fantas... More

Dulce Maldad en librerías 🌙
Trilogía Destinados 🌙
Sinopsis 🌙
Prólogo 🌙
Capítulo 1 🌙
Capítulo 2 🌙
Capítulo 3 🌙
Capítulo 4 🌙
Capítulo 5 🌙
Capítulo 7 🌙
Capítulo 8 🌙
Capítulo 9 🌙
Capítulo 10 🌙
Capítulo 11 🌙
Capítulo 12 🌙
Capítulo 13 🌙
Capítulo 14 🌙
Capítulo 15 🌙
Capítulo 16 🌙
Capítulo 17 🌙
Capítulo 18 🌙
Capítulo 19 🌙
Capítulo 20 🌙
Capítulo 21 🌙
Capítulo 22 🌙
Capítulo 23 🌙
Capítulo 24 🌙
Capítulo 25 🌙
Capítulo 26 🌙
Capítulo 27 🌙
Capítulo 28 🌙
Capítulo 29 🌙
Capítulo 30 🌙
Capítulo 31 🌙
Capítulo 32 🌙
Capítulo 33🌙
Capítulo 34🌙
Capítulo 35 🌙
Capítulo 36 🌙
Capítulo 37 🌙
Capítulo 38 🌙
Capítulo 39 🌙
Capítulo 40 🌙
Capítulo 41 🌙
Capítulo 42 🌙
Capítulo 43 🌙
Capítulo 44 🌙
Capítulo 45 🌙
Capítulo 46 🌙
Capítulo 47 🌙
Capítulo 48 🌙
Capítulo 49 (Final) 🌙
Agradecimientos 🌙
Secuela 🌙
Portadas 🌙

Capítulo 6 🌙

315K 33.1K 21.3K
By JessRe

Arianne

Cinco minutos después, Asher y yo salimos juntos del club deportivo. Algunas miradas curiosas se dirigen hacia nosotros, pero él no lo nota. Es como una película dramática, la clase de escena cuando la muchedumbre observa con fascinación al hombre más atractivo.

Sus piernas musculosas lo mueven hasta una motocicleta negra con un solo casco. Mis mejillas siguen ardientes cuando me encuentro con sus ojos. Pensé que había exagerado la última vez que contemplé su apariencia, pero bajo la luz del día es increíblemente hermoso. Fascinante, incluso.

Observo la longitud de su delgado y atlético cuerpo envuelto en una camisa negra, jeans oscuros y botas estilo militar. Mi evaluación termina cuando se aclara la garganta con una sonrisa. Ahora estoy cocinándome como un asado en el horno debido a la vergüenza.

Es solo un chico, Arianne.

—¿Cuál es tu plan? —pregunta.

—¿Qué?

Se cruza de brazos.

—Tú me invitaste a comer algo.

—Oh —Me mojo los labios —. Hay una cafetería cerca que tienen los mejores brownies que he probado en mi vida.

—No me gustan los brownies.

Mi boca se abre en shock.

—Podemos comer otra cosa...

—No —dice —. Tampoco me gusta estar rodeado de personas desconocidas, prefiero escoger el lugar dónde hablaremos sin que nadie nos escuche.

Alejo un mechón fuera de mi cara con un soplido. Fui yo quien pidió su tiempo así que no estoy en ninguna posición de objetar.

—Está bien —cedo.

Me ofrece el único casco de la motocicleta.

—Sube —ordena.

Dudo un segundo.

—No me subiré a esa cosa.

—Mi motocicleta es más rápida —suena impaciente mientras se acomoda sobre la bestia —. ¿Quieres hacer esto o no?

Ya me tomé la molestia de buscarlo y sería estúpido retractarme cuando insistí tanto.

—Lo haré —trago saliva y acepto el único casco —. Vámonos.

Su sonrisa es una llena de suficiencia mientras paso mi pierna por el asiento hasta estar en una buena posición. Luego me deslizo hacia adelante, envolviendo mis brazos alrededor de su duro estómago. La electricidad y el calor chispean cuando nuestros cuerpos se presionan juntos.

—Sostente —dice.

Entonces arranca y acelera.

El viento de la mañana alborota mi cabello castaño debajo del casco provocando que varios mechones se dispersen. La luz del semáforo cambia a verde y Asher aumenta la velocidad. Sorprendentemente no siento miedo. Todo lo contrario: emoción y adrenalina. Esto es increíble, como si pudiéramos volar. La moto se inclina un poco más y cierro los ojos porque estamos yendo muy rápido.

—Relájate, no provocaré ningún accidente —Asher le da un apretón a mi muslo.

Mis brazos lo rodean con fuerza y apoyo mi mejilla en su espalda.

—Más te vale.

A medida que seguimos avanzando, me doy cuenta de que estamos acercándonos a un lugar muy conocido.

El bosque.

El nerviosismo me aborda porque esto ha sido una pésima idea. No puedo creer que acepté venir con él. La curiosidad mató al gato, ¿no? Definitivamente sí. La moto se detiene cerca de los árboles y bajo mientras me quito el casco.

—¿No pudiste elegir un lugar dónde va cualquier persona normal? —reprocho.

Asher se ríe.

—Tú aceptaste mis condiciones a cambio de cualquier información.

Le lanzo una mirada molesta.

—Nunca acepté nada.

Se muerde el labio.

—Mira, no soy el asesino en serie que todos pintan. No mato chicas en el bosque —resopla con irritación —. Así que no te preocupes. Regresarás sana y salva con tus amigos.

Me encojo un poco por sus palabras y me siento culpable al instante.

—Yo... nunca creí que lo seas.

Rueda los ojos.

—Da igual. Te diré lo que desees y terminaremos con esta conversación.

Carraspeo.

—De acuerdo.

Observo de nuevo nuestro entorno. Hay un pequeño arroyo rodeado de árboles y flores silvestres. El agua es cristalina y la suave brisa genera escalofríos en mi piel. Lo único que puedo oír es el ruido que hace el agua al caer de la pequeña colina. El lugar es pacífico.

—Aquí hablaremos con calma —masculla —. Sin interrupciones.

—No te gusta ser el centro de atención —comento.

—En mi caso no me gusta recibir ese tipo de atención, pero no estamos aquí para hablar de mí —Mira el amuleto en mi cuello —. ¿Quién te lo ha dado?

Debato si es buena idea decirle o no, pero al final decido confiar.

—Mi madre.

Asiente.

—Es un amuleto que ayuda a protegerte del mal de ojo, influencias de brujas o demonios —manifiesta —. Los druidas solían usarlo y tu madre es una.

Pestañeo con fuerza ante esa revelación repentina. Encontré un libro sobre druidas en el sótano, mamá adora a dioses celtas y les reza cada noche. ¿Cómo no lo noté antes? Fue muy evidente respecto a sus creencias.

—¿Qué...?

La mirada de Asher se pierde en el bosque.

—¿Tu vida alguna vez ha sido normal?

—No —contesto de inmediato.

—Dime por qué.

Mi estómago se retuerce, oleadas de bilis rozan mi garganta.

—Nada ha sido normal desde la muerte de mi hermano. Fue asesinado por un hombre lobo, tengo muchas pesadillas y se puso peor cuando cumplí dieciocho años hace un año.

Me escucha con atención.

—¿Qué más?

—Nunca conocí a mi padre, pero leí una carta que le envió a mamá.

—¿Qué menciona la carta?

—Se fue para protegernos.

Sus cejas negras se fruncen, dándole un aspecto peligroso.

—Tu padre es un cazador, Arianne. Forma parte de una orden que se encarga de eliminar a criaturas sobrenaturales.

Me quedo entumecida en estado de conmoción. ¿Mi padre es un cazador? Esa realidad me sorprende, aunque no debería si mi madre es una druida. Mi vida es la locura absoluta, pero doy las gracias de que Asher sea honesto. Por primera vez no me siento rara de hablar con alguien sobre mis teorías acerca de lo sobrenatural. Él me... entiende.

—¿Cómo lo sabes?

—Josh es amigo de mi padre y yo lo conocí cuando era un niño —coloca las manos dentro de los bolsillos de su pantalón —. Mi familia sabe que estás de regreso, podemos darte las respuestas que buscas.

El sudor recorre mi piel, la conmoción, la confusión y el miedo me dejan estando ahí, desconcertada. Mi cerebro está tan aturdido que ni siquiera puedo formular una frase coherente. Inhalo una profunda y lenta respiración, tratando de traer el aire a mis pulmones.

—Sé que todo es nuevo para ti. De lo contrario, no estarías en el pueblo —Las palabras de Asher son tranquilas —. Hay muchas cosas que no sabes y yo no soy el indicado si buscas explicaciones. Mi padre sí.

Mi corazón tartamudea. Llevándome los dedos a las sienes, suavemente masajeo el dolor que puedo sentir aumentando en el lado derecho de mi cabeza. Es demasiado para procesar.

—¿Qué sugieres?

—Eres bienvenida en la fortaleza Karlsson, puedes ir cuando quieras —murmura —. Prometo que nuestro único propósito es ayudarte. Hazlo sin presiones.

Un revoloteo de alivio se apodera de mi pecho. Es ingenuo confiar tan rápido, pero Asher ha sido el único dispuesto a hablarme sin rodeos u omisiones. Y lo mejor es que no intenta convencerme de que estoy loca.

—¿De verdad?

—Sí —afirma —. Las puertas estarán abiertas para ti.

Las lágrimas pican mis ojos.

—Yo... solo... estoy tan confundida.

—Pronto ya no lo estarás —afirma y me tiende la mano. Lo acepto con mis ojos fijos en los suyos —. Te llevaré de regreso al pueblo. Tienes tiempo de pensarlo.

—Gracias.

Me dirige de nuevo a su motocicleta.

—Vamos.

🌙

Nos detenemos frente a la cabaña que comparto con Ethan y Lily. Le devuelvo el casco a Asher y le agradezco por traerme. Ha sido más que atento conmigo. No entiendo el afán que tienen los demás en dejarlo mal.

Asher es... lindo.

—Te daré mi número —Su voz es rasposa —. Llámame si decides ir a mi casa.

Dioses... Menos de una semana en New Hope y ya suspiro por un chico. Me dará su número sin que yo lo pida.

—De acuerdo —busco el celular en mi bolsillo con manos temblorosas y anoto su número cuando lo encuentro —. Gracias por tu tiempo.

Sus ojos avellana lucen más claros por los rayos de sol en su rostro.

—No me des las gracias aún. No hasta que todas tus dudas se aclaren.

—Bien —comienzo a irme —. Te veo después, supongo.

Camino lo más rápido posible y entro a la cabaña. Cierro los ojos cuando escucho a la motocicleta alejarse y respiro con alivio. Mis nervios se disparan en su presencia, hay una conexión extendiéndose cada vez que compartimos miradas. Mi corazón tiene problemas en latir cuando veo su sonrisa y no me siento extraña con él. Es como si por fin encontrara mi lugar en el mundo. ¿Qué me pasa? ¿Por qué me altera tanto?

—Bueno, bueno —Lily aparece en mi campo de visión —. ¿Acaso ese era Asher Karlsson?

—Uh... sí —Se interpone en mi camino cuando pretendo pasar —. Salimos juntos.

Los ojos de Lily casi se salen de sus cuencas.

—El chico malo del pueblo a tu completa disposición, Julianne enloquecerá.

Lo que menos deseo ahora es entrar en una disputa por un chico.

—Iré a darme una ducha —evado el tema.

—Oh, no —Lily atrapa mi brazo —. ¿Cómo lo lograste?

Le frunzo el ceño.

—¿Qué cosa?

—Tener su atención —mueve la cabeza con curiosidad en sus palabras —. Asher no es cercano a nadie excepto a sus hermanos y Julianne. Ya no lo es después de lo que ha pasado con sus novias.

Me intriga saber qué rayos pasó, pero involucrarme en chismes sin fundamentos no es lo mío. Quiero enfocarme en mis problemas, el resto no es de mi incumbencia. Además, no creo que Asher sea un psicópata.

Simplemente... no.

—Estoy muy cansada —Le ofrezco una sonrisa de disculpa a Lily —. Hablamos en otra ocasión, ¿sí?

Me suelta.

—Claro, pero no escaparás de mí —guiña un ojo —. Me dirás con lujos de detalles que te traes entre manos.

Mi respuesta es otra sonrisa e ingreso a mi habitación. Suspiro mientras le pongo seguro a la puerta. Este día tuvo giros inesperados y el rompecabezas va tomando formas.

Mi padre es un cazador de seres sobrenaturales.

Mi madre es una druida.

¿Eso en qué me convierte?

Una persona normal definitivamente no.

Después de desnudarme, me hago una pequeña bola bajo la ducha. El agua cae y mancha el maquillaje de mis mejillas. El interior de mi mente es un infierno de rabia e impotencia. Un extraño acaba de revelarme trozos de mis orígenes antes que mi propia madre.

El caos adormece mi razonamiento y me muerdo los labios para callar mis gritos de frustración. La luz del baño parpadea varias veces y cuento hasta tres para calmarme. Quiero creer que hay una explicación para tantos secretos. Las cartas de mi padre es un indicio, pero el temor de mi madre es un misterio. ¿Me ocultó del mundo porque soy una criatura peligrosa?

🌙

Estoy en una esquina cerca de la casa de Amelia. Saldrá en cualquier momento y será mi oportunidad de seguir indagando.

Bingo.

Veo a una chica de cabello corto, con falda azul y camisa blanca. Sé que es Amelia porque vi su fotografía en internet cuando leí informes sobre ella y su amiga muerta. Tiene auriculares en los oídos y mueve su cabeza ligeramente al ritmo de la música que escucha.

Esta es mi oportunidad.

Salgo de mi escondite y me acerco para tocar su brazo. Ella jadea sorprendida por mi osadía y me mira con evidente molestia. Espero que no me rechace o grite.

—¿Qué sucede contigo? —pregunta irritada y se zafa de mi agarre.

—Lo siento —me disculpo —. Si no te importa, quisiera hablar contigo.

Arquea una ceja.

—¿Hablar sobre qué? —espeta. Suena a la defensiva.

—Ayer fui a tu casa, pero tu padre no me permitió verte —murmuro. Sus ojos se agrandan y rápidamente empieza a alejarse —. ¡Espera! Eres la única que puede ayudarme. Sé que no estás loca.

Algunas personas nos miran con curiosidad, pero no les presto atención.

—Yo no puedo ayudarte —sisea —. Recuperé mi vida y no está en mis planes recordar.

—Sé lo que se siente —Le digo y parpadeo rápido para aclarar mi visión borrosa —. También perdí a alguien importante por culpa de ese monstruo —Ella está sorprendida por mi respuesta. Que no esté huyendo es una ventaja para mí —. Yo... estoy aquí para hacerlo pagar.

Amelia mira nuestro entorno antes de decirme en voz baja:

—No sé qué pretendes con esto.

—Solo tienes que decirme lo que sucedió ese día.

Exhala.

—¿Qué quieres saber? —inquiere y escucho el dolor en su voz —. Vi cómo ese hombre se convertía en un jodido animal y luego mató a mi amiga. ¿Eso quieres oír? —La mirada de conmoción que me da es probablemente la misma que tengo en mi cara —. Él quería divertirse y lo hizo con nosotras.

Divertirse...

—Te dejó viva —digo —. A mí también. Soy una superviviente.

—¿Tú eres...?

—Arianne Laroux —respondo —. Esa bestia atacó a mi hermano.

Un jadeo ahogado sale de su boca.

—He oído hablar sobre ti. Eres considerada un milagro al igual que yo.

Presiono una mano sobre mi corazón.

—Ese monstruo sigue suelto y quiero encontrarlo.

Sacude la cabeza.

—No puedo guiarte hacia él. Esa noche estaba muy oscuro. Solo vi la silueta de un hombre y después la forma que cambió a un animal. Nunca vi su rostro.

Mis manos tiemblan porque escucharla es como revivir mi experiencia traumática.

—Gracias por decírmelo.

Cubre nuevamente sus oídos con los auriculares.

—Cuida mucho en quién confías. Algunas personas de este pueblo están empeñadas en proteger a esos monstruos —expresa, alejándose —. Suerte en tu búsqueda, Arianne.

Me quedo de pie en el mismo lugar con un torbellino de confusiones golpeándome con brutalidad. Ella dio a entender que ese monstruo las atacó por diversión. Los lobos se hacen presente de noche en el bosque y mi tercera opción es entrar en su territorio.

🌙

Conduzco con calma mientras pienso en mis últimos descubrimientos. Mi investigación no resultó ser un fracaso después de todo. Tengo la esperanza de que el lobo se haga ver. Es una locura, pero me arriesgaré. No me mató hace cinco años y quiero saber los motivos.

¿Qué hará esta vez? ¿Terminará lo que empezó u olvidará quién soy? Esas preguntas serán respondidas cómo sea. Necesito superar el miedo que me retiene desde hace cinco años. Yo... me cansé de esconderme.

El canto de los grillos hace eco en el bosque. La niebla se arremolina en el suelo, aferrándose a las rocas cubiertas de musgos y helechos. Ramas dobladas se tejen a través de los árboles, creando intrincadas telarañas de madera. Caminar en la oscuridad durante la noche puede asustar a la mayoría de las personas. ¿Qué sucede conmigo? Me siento como si estuviera en casa.

—¿Ari?

El viento revuelve mi cabello, enviando una pulsada de miedo a mi pecho. Contengo la respiración, atenta al sonido de esa voz.

Su voz.

—¿Theo? —titubeo —. ¿Theo?

Silencio.

Supongo que volver al lugar dónde mis traumas comenzaron no ha sido buena idea. Son alucinaciones mías por los recuerdos dolorosos. Muevo mis piernas más rápido cuando oigo el chasquido de una rama. Estoy eufórica y ansiosa cuando el collar empieza a picarme.

Algo malo está a punto de suceder, lo veo venir. La alarma pellizca mis entrañas y el miedo me golpea como un puñetazo en el estómago. El temor se instala en mi pecho y vuelvo a sentir la misma sensación de hace años.

El acecho.

Dando vueltas en círculos, miro el bosque que me rodea. Nerviosa, trago saliva. El silencio total me envuelve y es interrumpido por el golpeteo de mi corazón. Una gota de sudor recorre mi piel y no sé qué hacer. Me siento amenazada y acorralada cuando distingo los familiares ojos rojos a escasos metros.

Es él.

El pánico se levanta en mi garganta como bilis y tropiezo hacia atrás hasta que me presiono contra una roca enorme. Mi piel se estremece y la sangre corre por mis venas a una fuerza impresionante. Se acerca, avanza lentamente hacia mí.

—¿Escuchaste eso?

—¿Qué cosa?

—No lo sé. ¿Un... l-lobo?

El recuerdo me tortura y miro desesperadamente mi entorno.

La siguiente rama se rompe y el sonido viene de otra dirección. De la nada, una enorme figura aparece en mi campo de visión y grito. Espero encontrarme con un lobo de ojos rojos, pero me equivoco. Hay un oso enorme rugiendo y casi me hago pis encima. ¡Oh Dioses! Siempre me han dicho que nunca demuestre mi pánico porque sería peor.

—Atrás, osito, atrás —digo como estúpida y el animal ruge —. Sé un buen chico y vete a hibernar.

Carajo.

Me cubro con los brazos mientras espero que sus garras me raspen la piel, pero nunca sucede.

Un lobo blanco se abalanza sobre el oso.

🌙

Adelantos & spoilers en mis redes sociales:

Instagram: JessiR17

Twitter: JessiRivas17

Facebook: Lectores de Jess (grupo para fangirlear)

Pueden encontrar una versión mejorada y capítulos inéditos de Dulce Maldad en librerías. Más información en: www.planetadelibros.com.ar 

Continue Reading

You'll Also Like

109K 15.3K 60
Sinopsis Tras encender el gas para perecer junto a quienes codiciaban la fortuna de su familia, Lin Yi transmigró a otro mundo, ¡y estaba a punto de...
301K 50K 52
«No importa lo rápido que viaje la luz, siempre se encuentra con que la oscuridad ha llegado antes y la está esperando.» -Terry Pratchett. • Histora...
311K 32.1K 60
El chico que juraba no creer en el amor, se ha enamorado y el resultado ha sido un terrible corazón roto. El joven escritor Tyler Murphy ha caído per...
180K 12.5K 23
Todo en mi vida era normal. Hasta que entre a ese bar. ¿Dirás cuál es el problema? Ahi los conocí, conocí el secreto de este pueblo. No puedes confia...