| 12. Terminamos en medio de una guerra de demonios |
Kat
Pasaron varios días desde mi último encuentro con Louis. Las últimas noticias de él no fueron nada agradables, pues ahora parece dedicar su tiempo libre ocasionando caos y matando gente por diversión. Y bueno, yo seguía en negación, me negaba a creer que el Louis que yo conocí se había ido dejando otra versión realmente escalofriante. Quería seguir pensando que debajo de esa oscuridad todavía quedaba algo humano en él ¿Soy demasiado incrédula si me aferro eso? Mi sentido común me dice que deje de aferrarme a una causa perdida, pero algo dentro de mi insistía en que quizá no estaba del todo perdido. Si Anakin Skywalker pudo volver del lado oscuro, Louis también puede ¿Cierto? O tal vez sea mejor hacerle caso a mi sentido común y dejar de creer eso, Louis era una causa perdida, cruzó la línea al lado oscuro y no estaba segura de tener esa oscuridad en mi vida.
Y también estaba este pequeño asunto del vínculo con Altair. Encontrar la forma de romper el hechizo era un callejón sin salida, ya buscamos en todos y cada uno de los libros mágicos que tienen los Tomlinson y no hay nada de nada. Es increíble cómo en cientos de generaciones de su familia nunca se hayan encontrado con tal hechizo, y digamos que mis escasos recuerdos sobre los ingredientes o las palabras que dijo Altair mientras hacía el hechizo no sirven de nada.
La mayor parte del tiempo, olvido que estoy místicamente vinculada con un demonio malvado, pues lo único que he sentido en los últimos días ha sido un golpe en el pie, que seguro se golpeó con la base de la cama, no puedo quejarme mucho porque a los dos minutos estaba completamente curada. Su poder de regeneración era una ventaja, gracias a eso ya no tengo moretones por los entrenamientos y evité lo que sería una horrible abrasión por quemarme con la estufa mientras preparaba el desayuno con Dan.
Me pregunto cómo funciona exactamente el vínculo, si esto se limita solamente a algún daño físico o va más allá de eso, como si compartimos emociones o cosas así, no sé con exactitud si las emociones que llego a sentir a lo largo del día son propias o de Altair. ¿Podría sentir si tengo cólicos, o si pesco un resfriado? Esas son mis dudas existenciales que no me molestaría verlo para preguntarle.
Y dejando de un lado el problema de Louis y Altair, todo sigue con su curso normal. Mis hermanos y yo llegamos a la conclusión de que no podíamos dejar todo lo que solíamos hacer antes de ser guardianes. Cuando termine el verano, volveremos a la universidad, y también buscaremos algo en qué invertir el dinero de la herencia que mamá y el tío Ronald nos dejó. Will propuso que abriéramos un club, no es una idea tan descabellada pues no hay muchos por aquí, pero aún es un tema a discusión.
Mientras esperaba a mi vida normal, y para apartar todo el asunto de Louis de mis pensamientos, la mejor forma de mantener mi mente ocupada era seguir practicando con mis poderes. Nunca se me había ocurrido que como guardián de agua, mis poderes incluían la termoquinesis, que es la habilidad de manipular el estado físico y la temperatura del agua.
Miro fijamente el vaso de agua que se encontraba en la barra de la cocina, llevaba una hora intentando congelar el agua del vaso, pero supongo que tardaré en hacerlo y poder sentirme como la reina de hielo.
— Vamos, vamos — murmuré apoyando mi barbilla en el borde de la barra, teniendo el vaso a unos pocos centímetros de mi rostro —. Congélate.
— Quizá si lo pides por favor — interrumpe Logan abriendo el refrigerador —. ¿Aún nada?
— No — niego con la cabeza algo frustrada —. Está muy silencioso, ¿Qué hacen?
— Yo intentaba lograr arena movediza en el jardín, pero terminé haciendo un bonito castillo de arena — sonrió —. Drake se quedó jugando con uno de los mapaches que suelen meterse a la casa, y sobre Dan y Will, no tengo idea.
— Esperemos que Dan no haya ahorcado a Will — comenté volviendo al vaso
— No creí que las nuevas técnicas fueran tan difíciles — comenta Logan sentándose a mi lado, mira mi vaso de agua siendo extraordinariamente corriente, si ni siquiera había conseguido hacer que el agua estuviese fría
— Vaya que sí — moví mi dedo en círculos sobre el vaso haciendo que el agua siguiera el compás de mis dedos
— Tendrás que practicar un poco más antes de ir cantando a los cuatro vientos "Libre soy" — ríe —. ¿Sabías que mis poderes también incluyen la manipulación del cristal?
— ¿Enserio? — pensé en cómo eso podría ser posible hasta que recordé una clase de química en la que nos explicaron que el cristal no es más que arena y alguna roca a altas temperaturas, así que prácticamente, es tierra —. ¿A ver?
Logan extiende su mano sobre el vaso de cristal, lo mira fijamente y respira hondo, miro atenta al vaso esperando que algo genial pasara pero el maldito vaso se quedó intacto.
— Vaya, eso es impresionante — bromeé
— No presiones — murmura Logan sin apartar la vista del recipiente, vuelve a tomar aire y escucho algo crujir ligeramente.
Puedo apreciar como pequeñas grietas iban apareciendo en el vaso, en unos segundos, el cristal se rompió haciéndose añicos, rápidamente, uso mis poderes para evitar que el agua se regara, hago que el pequeño chorro de agua gire alrededor de mí y lo dirijo a la cara de Logan. Mi hermano casi se cae del banquito al recibir el chorro de agua en el rostro y me dedica una mirada seria.
— ¿Qué? — sonrío inocente —. No iba a dejar que se desperdiciara — Logan me saca la lengua y se seca la cara con la parte baja de su camisa —. Por cierto, ¿Puedes hacer que el vaso vuelva a la normalidad?
— No había pensado en eso — vaciló —. Déjame intentarlo.
Asentí y moví con cuidado todo lo que quedaba del vaso haciendo una pequeña montaña de cristales, Logan dedica toda su atención al montón de vidrio que se encontraba enfrente de él. Conociendo a Logan, mi hermano no se levantará hasta que haya logrado dejar el vaso justo como estaba, así le tome toda la tarde. Eso es lo que envidio un poco de él, de los cinco, Logan es el que progresa más rápido con sus poderes, estoy segura que si él tuviese mis poderes, ya hubiese logrado congelar el agua.
Drake entró por la puerta trasera que lleva al jardín, tenía un pequeño mapache en su hombro, olisqueando su cuello.
— ¿Te piensas quedar con él? — pregunta Logan refiriéndose al nuevo amigo peludo de Drake
— Ella — lo corrige —. Saluda a la nueva integrante de la familia Stronghold — asiente Drake buscando algo en la alacena
— ¿Y ya tiene nombre? — pregunté
— Te presento a Ivy, Ivy, esas cosas feas son mis hermanos — sonríe Drake dejándome al mapache en las piernas —. ¿Qué comen los mapaches?
— No lo sé — me encojo de hombros y acaricio a Ivy en la cabeza, su pelaje era suave y denso —. ¿Semillas?
Supuse que Ivy solo tenía unos cuantos meses pues era más pequeña que el resto de los mapaches que se escabullen en el jardín. Comenzó a olfatearme, causándome cosquillas con sus pequeños bigotes, estos animalitos son tan adorables.
— La buena noticia, es que comen de todo, insectos, frutas, pequeños animales que cazan... — informó Drake viendo su celular buscando información sobre mapaches —. Será fácil tenerla.
— ¿Qué hace ese animal dentro de la casa? — pregunta Dan señalando a Ivy antes de entrar a la cocina
Noto cómo Logan discretamente pone la toalla de la cocina sobre los pedazos de vidrio para que Dan no se de cuenta que rompimos un vaso por intentar mejorar con nuestros poderes.
— Ese animal es tu hermano Drake, no le digas tan feo — respondí jugando con Ivy, Drake me mira con cara de pocos amigos y Dan sonríe por mi comentario
— Me refería al mapache — aclaró Dan
— Es el nuevo miembro de la familia Stronghold — dice Drake —. Te presento a Ivy.
— Debe ser una broma — niega Dan con la cabeza —. Solo a ti se te ocurre meter a un mapache a la casa.
— Ay, vamos — dice Drake quitándome a Ivy para dársela a Dan —. Mírala, es adorable.
— Oye, no me pongas esa cara — murmura Dan mirando al pequeño animalito —. Ah, está bien, pero tú te harás cargo de el.
— Ella — corregí
— Ella — asiente Dan regresándome a Ivy —. Y no la quiero ver en mi habitación ¿Quedó claro?
— Como el agua — asiente Drake —. Hay que llevarla al veterinario.
— Vayan ustedes, estoy ocupado — dice Logan volviendo al vaso
Drake y yo salimos de la cocina, esperé en la sala mientras mi hermano subía a buscar dinero, las llaves de la camioneta y a Will. Minutos después, ya estaba en la parte de atrás de la jeep con Ivy aún en mis piernas, camino al veterinario para que revisen a nuestra nueva mascota, la vacunen contra la rabia, y comprar algunos accesorios para mascotas como los bol de comida, una casita para mascotas y un par de juguetes.
De regreso, vimos una construcción que nos podría servir para el club que Will tiene en mente, y si soy sincera, me gustaba la idea de tener un club. Tomamos el número que estaba en la pancarta de la construcción para llamar al dueño y agendar una cita para ver el proyecto.
— Lo digo enserio, un club es lo que le falta a este lugar — dijo Will subiéndose a la jeep —. El más cercano está a una hora.
— Apoyo tu idea, pero tenemos que idear bien esto y convencer a los demás — dijo Drake
— Podemos poner karaoke los viernes o algo así — comenté
— Eso me gusta — dijo Will —. Y podemos abrir desde el jueves en periodo de clases, y todos los días en verano. Lunes de margaritas dobles para todos.
— Y podemos traer algunas bandas — dice Drake —. Esto debe ser genial.
Seguimos fantaseando sobre nuestro posible club hasta llegar a casa para compartirlo con los demás, Logan estuvo completamente convencido y Dan dijo que primero hay que hacer un presupuesto y después veríamos si es lo más conveniente. Agendamos la cita con el dueño para mañana a medio día, y dedicaríamos todo el día para calcular costos de todos los materiales que necesitamos para un club.
Al anochecer, nos preparamos para salir con los Tomlinson y seguir con el entrenamiento, mientras mis hermanos se aseguraban de cerrar bien la casa, yo le dejaba uvas, bayas y un poco de agua a Ivy para la cena. Acaricio a mi nueva mascota y me preparo para salir cuando un golpe en las costillas me detiene en seco, me quejo por ello y me dejo caer lentamente en el suelo pues no hacía falta ser una experta en huesos rotos para saber que tenía más de una costilla rota.
Recibo otro golpe en el mismo costado, siento un dolor más agudo, solo espero que no me haya perforado algún órgano importante.
— ¿Ya estás lista? — me llama Dan desde el recibidor —. Los chicos ya están en la jeep... ¿Kat?
— Hay un problema.. — respondí esperando que la habilidad de regeneración de Altair comenzara a hacer lo suyo
— ¿Qué pasa? — preguntó Dan corriendo hacia donde estaba
— Altair... — alcanzo a murmurar antes de tener la sensación de que algo puntiagudo se enterraba en mi abdomen
— Maldición — exclamó Dan sin saber qué hacer —. ¡Maldición!
De pronto, sentí múltiples cortes en todo el cuerpo, la espalda, el pecho, los brazos.... incluso podía sentir el frío filo de lo que sea que estén usando para hacer queso gruyere a Altair. En cuestión de segundos, mi sangre ya había teñido de rojo toda mi ropa. Siento un ya conocido vacío en el estómago, ese mismo vacío que sientes antes de desmayarte.
— KAT — exclama Dan aterrado
Escucho las zancadas de mis otros hermanos corriendo desde la entrada a la cocina.
— ¿Qué pasó? — ese era Drake
— Altair está siendo atacado — dijo Dan
— Si es el maldito de Louis, lo mataré — gruñe Will mientras se arrodillaba a mi lado —. Altair siempre se las arregla para patearle el trasero a Louis, así que tenemos que esperar a que lo haga.. Resiste un poco.
— No duele tanto... — mentí
Dolía. Cada maldita herida quemaba como si estuviese en algún ácido. Cerré mi puño y apreté lo más que pude para resistir, Will tenía razón, Altair se las arreglaría de alguna forma para dejar a su oponente mucho peor... Solo esperaba que el otro no fuese Louis, pero sería engañarme a mí misma, pues ¿Quién más querría la cabeza de Altair en un pico? Bueno, creo que muchos, pero Louis parece querer su muerte más que cualquier otra cosa en el mundo. Maldito Louis.
— ¿Qué hacemos? — pregunta Logan
— No sé — farfulla Will
El dolor no disminuía, y la regeneración de Altair parecía no funcionar en ese momento. Maldita sea.
Justo antes de desmayarme, pude ver como una especie de humo negro aparecía en el centro de la cocina, y una vez que el humo se dispersó, pude ver a Avner cargando con dificultades a Altair muy mal herido.
— Necesito su ayuda — dijo Avner yendo directamente al grano
— ¿Por qué lo haríamos? — cuestiona Logan
— Si mi hermano muere, también su hermana — responde tajantemente —. ¿Es suficiente motivación?
Y después de eso, desperté en el sofá de la sala dos minutos después. Esperaba despertar ya completamente curada, pero hoy no era mi día de suerte, Altair estaba en el sofá más grande, maldiciendo entre dientes.
— ¿Qué pasó? — pregunté
— El imbécil de tu novio — refunfuñó Altair adolorido —. Me sorprende que haya encontrado una forma de anotar un punto a su favor.
— Exnovio — lo corregí, por más que me doliera, esa era la realidad
— Ya decía que qué clase de novio haría eso — replicó Altair
— El vínculo... — dije después de unos segundos de silencio
— No podrán romperlo — suspiró
— No era eso — negué levemente con la cabeza —. ¿Es físico o va más allá?
— ¿Quieres saber si es emocional o algo por el estilo? — descifra el propósito de mi pregunta
— Aja — respondí
— No — responde —. No puedes sentir mis emociones ni yo las tuyas... Y por cierto, ten más cuidado cuando cocinas.
— ¿Y si me enfermo? — pregunté curiosa, mientras tomaba nota mental del consejo que acababa de darme
— Entonces me arrastrarías contigo a una terrible enfermedad — contestó —. Por suerte para ti, yo nunca me enfermo, ventajas de ser demonio.... ¿Por qué diablos tardan tanto?
— ¿Qué están haciendo? — pregunté
— Buscando la forma de cómo quitarme este estúpido objeto maldito — respondió —. Un simple corte de esta cosa te hace más cortes que una coladera o un queso.
— Sí, ya vi — respondí esperando a que busquen una forma de quitarle esa cosa para que empiece a regenerarse —. Te vengarás ¿Cierto?
— Obviamente — respondió —. Pagará por esto.
No sabía cómo sentirme al respecto, supongo que el hecho de casi morir por culpa de Louis ha cambiado todo.
— Lo encontramos — informó Avner corriendo con un trozo de pergamino
— Date prisa, Hunter — murmuró Altair
— En un segundo — asiente Avner desdoblando el pergamino para entregárselo a Dan —. ¿Podrías...?
— No estoy seguro de saber pronunciar bien el latín — vacila Dan
— Dame eso — indica Altair —. Nunc finis maledictio, tenebris ad lucem, favilla et cinere
ignis et cinis, nunc finis maledictio
— Nunc finis maledictio — repite Avner —. Tenebris ad lucem, favilla et cinere, ignis et cinis, nunc finis maledictio.
El objeto maldito que Altair tenía clavado en el abdomen desprendió una tenue luz amarilla, después, Avner toma el objeto y desprende con cuidado de la piel de Altair, siento un alivio inmediato, no debería tardar en curarme por completo.
— Uff, mucho mejor — dice Altair levantándose del sofá —. No suelo decir esto, pero gracias.
— No teníamos de otra — responde Will secamente
— Uno intenta ser amable y no lo dejan — comenta cínicamente Altair —. En fin, nos veremos pronto.
Algo me decía que ese pronto llegaría mucho antes de lo que esperamos, pues terminamos en medio de una guerra entre Louis y Liam contra Altair y Avner, y todos sabíamos que esto solo tenía una forma de terminar: con alguno de ellos muerto.