20. Distorsionando la realidad

278 25 3
                                    

| 20. Distorsionando la realidad |
Kat

— ¿Kat? — escucho una voz distante llamándome

Me tomó unos segundos volver a recobrar el conocimiento. Lo primero que vi al despertar por completo, fueron un par de intensos ojos castaños observándome con atención, intentando descifrar si me encontraba bien.

Demonios, la mirada de ese chico era tan intensa que tenía la sensación que podía hipnotizarme.

Me incorporo un poco, intentando asimilar lo último que había pasado antes de quedarme inconsciente, Louis había intentado matarme, de nuevo. Aunque no parecía realmente seguro de hacerlo, por unos segundos pensé que había algo en él que todavía tenía remedio, pero ya había dejado de perder mi tiempo con Louis. Observo que Ulrich tenía una fea marca en el cuello por el intento de estrangulamiento, supuse que yo debía tener una igual.

— ¿Cómo te sientes? — pregunta acomodando el pequeño mechón de cabello que me cubría un poco el rostro detrás de mi oreja

Ese simple gesto hace que un hormigueo me invada. Su expresión demuestra cierta preocupación, me tomo mi tiempo para observarlo, el chico podría pasar por un modelo de alguna marca juvenil, o bien de Hugo Boss, seguro le vienen muy bien los trajes. Reparo en sus labios, por una fracción de segundos me vi tentada a cortar la poca distancia que nos separaba. Y me tomó un par de segundos darme cuenta que me había vuelto loca.

¿Pero en qué demonios estoy pensando? Rechazo por completo aquella idea que mi loca mente se hizo.

— Creo que el golpe cuando caí al suelo debió afectarme — respondí finalmente

— Será mejor que descanses un poco — opinó, hizo un simple movimiento de manos y apareció un vaso de agua.

— Gracias — digo recibiendo el vaso

— ¿Qué pasó? — preguntó sin apartar su intensa mirada, demonios, este chico me pone nerviosa —. Parecía que tenías todo control cuando me pediste un segundo athame.

— Estaba todo bajo control — asentí —. Pero de alguna manera Louis consiguió liberarse, me tomó por sorpresa.

— ¿Para que querías un segundo athame?

— Pensaba volver a bajar al sótano y asegurarme que no muriera desangrado, lo último que necesito es a su hermano mayor tomando venganza — suspiré tomando un sorbo de agua —. Supuse que Louis intentaría atacarme y quitarme la daga, así que necesitaba uno falso

— Chica lista — me alaga

— No tanto — suspiro —. Perdí mi garantía para asegurarme que no le hagan daño a mi padre — hago una mueca —. Conociendo a Louis, querrá vengarse de la forma más sucia, y retorcida que pueda.

El simple hecho de imaginarme cómo Louis se vengaría por haberlo apuñalado me aterraba. Ha demostrado que es capaz de cualquier cosa con tal de conseguir lo que quiere, no lo dudó ni un segundo en amenazar a papá con tal de conseguir su estúpido amuleto, me asusta pensar que le haga daño solo para desquitarse conmigo.

— Bueno, por el momento no tiene poderes — observó —. Así que tardará en hacer algo, les da tiempo para ocultar a su padre, puedo hacer un hechizo para evitar que lo rastreen, estará a salvo.

Por gestos como ese, hace que cuestione mi maldita moral. Rayos, debo apartar todos esos pensamientos raros que se me cruzan por mi alocada mente, lo vuelvo a atribuir al golpe que recién me di en la cabeza y que es el único chico con el que he tenido contacto en los últimos meses y que no intenta matarme, necesito conocer más gente o seguiré pensando en cosas absurdas.

Irrealidad IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora