Zayn retiró sus lentes de pasta y frotó sus párpados con pereza. Llevaba la tarde tratando de terminar un ensayo para la escuela, pero supo que era suficiente cuando sus ojos empezaron a arder.
Era sábado por la tarde y no tenía nada más en qué ocupar su tiempo, ya que Liam había salido al cine con sus amigos, así que se obligó a ser productivo. Dos horas de su vida haciendo tarea, era suficiente.
Se levantó de su escritorio y salió de su habitación, yendo escaleras abajo en busca de algo para comer. Se encontró con Ismail en la cocina, el chico llevaba unos lentes de pasta parecidos a los suyos mientras leía en su iPad.
-Hey. -el mayor saludó cuando lo vio ingresar. Zayn sólo hizo un gesto con la mano.
Ellos no habían vuelto a discutir, de hecho, habían hablado un par de veces luego de lo que pasó y Zayn realmente estaba tratando de tomarse el tiempo para conocer mejor al chico. Después de todo, estaría en su vida para siempre, le gustara o no.
-¿Novedades de la universidad? -Zayn se atrevió a preguntar, mientras sacaba todo lo necesario para prepararse un sándwich.
Ismail retiró sus lentes y presionó sus párpados un momento antes de mirarlo y dejar el iPad sobre la mesada.
-No, pero está bien, sólo han pasado dos semanas.
Zayn asintió. -Ya llegará. ¿Te aseguraste de colocar bien la dirección?
-Sí. -Ismail resopló una risa. -Trisha me ayudó con eso.
-Genial. -Zayn asintió mientras daba un mordisco a su sandwich. -Por cierto, ¿dónde está mamá?
-Llevó a Safaa y Whali al centro comercial.
Zayn volvió a asentir y se hizo el silencio. No sabía qué decir para que el momento no se tornara incómodo, pero vamos nunca había sido bueno para mantener conversaciones y entablar amistades; sino pregúntenle a Liam.
Por otro lado Ismail sólo miraba a su hermano menor, no quería volver a su lectura y desaprovechar la oportunidad que tenía de conocer más a Zayn, pero no sabía cómo hacerlo. ¿De qué le gustaria hablar? ¿Qué temas le interesaban?
-¿Quieres uno?
-¿Cómo va la escuela?
Preguntaron ambos al mismo tiempo. Ismail sólo negó, dándole la oportunidad a Zayn para que hablara. El menor terminó de masticar y respondió luego de tragar.
-Lo mismo de siempre. -se encogió de hombros. -Tareas. Profesores y compañeros que no soporto. Más tareas.
-¿Es tu último año? -preguntó riendo.
-Aún me queda un año más de tortura.
-¿Y ya sabes qué es lo que quieres estudiar?
-No quiero pensar en eso. -respondió mientras guardaba todo lo que había usado. -Quiero decir, lo he pensado y sé lo que quiero, pero aún no me quiero estresar con eso.
-Bueno, aún tienes tiempo.
-Seh. -Zayn respondió algo más relajado. La incomodidad anterior disipada casi por completo. -Y tú, ¿a qué carrera aplicaste? ¿estudiabas algo en Bradford?
-Mm no, -Ismail también relajó su postura y miró a su hermano. -Con la enfermedad de mamá no podíamos pagar la universidad, yo trabajaba a tiempo completo en una construcción.
Zayn tomó una botellita de agua del refrigerador y asintió, tomando asiento frente a Ismail. El mayor sonrió notando el genuino interés.
-Apliqué a arquitectura, -continuó -Siempre me interesó y se me da bien dibujar así que...
-¿En serio? -eso captó la atención de Zayn aún más. Un pequeño indicio de emoción revoloteando en su estómago.
Ismail asintió y tomó el iPad frente a el, manipulando el aparato antes de girarlo hacia el moreno menor y mostrarle sus creaciones.
-Estos son algunos dibujos que pasé a digital. -explicó mientras Zayn tomaba el iPad y pasaba entre las imágenes. -Mis bocetos están arriba en algunos cuadernos. También tengo una cuenta de Instagram en dónde subo cosas.
-Wow. -Zayn sonrió deteniéndose en los detalles de las imágenes. Tenían algo en común, ¿qué tan loco era eso? -Mm, yo también dibujo.
-Lo sé, -Ismail sonrió con timidez, -Yaser me lo dijo. Me gustaría verlos en algún momento, sólo si tú quieres.
-Sí, -Zayn se encogió de hombros mientras le devolvía el iPad. -Puedo mostrarte algunos. Los tuyos son muy buenos, sin embargo.
-Gracias, Zayn. -Ismail sonrió a su hermano. Se sentía como una pequeña victoria para él haber logrado mantener esa conversación todo ese tiempo. Era el único en la casa con el que aún no rompía el hielo por completo, se sentía bien saber que podían conversar sin que el menor quisiera golpearlo.
Yaser ingresó a la cocina un par de segundos después, tratando de disimular que había escuchado toda la interacción desde el pasillo. Los jóvenes Malik habían estado tan inmersos en su conversación que no oyeron a su padre llegar.
-Buenas tardes, niños. -Yaser sonrió, dejando su maletín sobre la mesada.
-Hey, pá.
-Buenas tardes, padre.
El mayor de los Malik sonrió a ambos mientras se deshacía del saco de su traje. Normalmente los sábados sólo trabaja hasta el medio día y llegaba a casa para almorzar junto a su familia, pero ese día las cosas habían estado más que complicadas en la oficina.
-¿Y las chicas?
-En el centro comercial.
-Es día de desfalcar a su padre, asumo.
-El cumpleaños de Whali está cerca, -Zayn respondió burlón. Yaser fingió una mueca de dolor. -Y Saafa empezará clases de ballet.
-Y tu madre se pregunta por qué trabajo tanto.
Ismail y Zayn rieron un poco, observando como el mayor tomaba una botella de agua del refrigerador y se unia a ellos al rededor de la mesada. Se hizo silencio por un instante, el padre de ambos buscando la manera de no perder la oportunidad de pasar tiempo con sus dos hijos. La conversación que había escuchado lo había llenado de esperanza y una renovada energía que no tenía cuando llegó a casa.
-¿Deberíamos preparar la cena? -preguntó el mayor. Y de igual manera se respondió. -Sí, hagamos eso. Subiré a cambiarme, Zayn por favor lleva mi maletín al estudio.
-¿Sabe cocinar? -Ismail preguntó luego de que su padre abandonara la habitación. Zayn tarareó dudoso de qué responder.
-Hace el esfuerzo. -respondió tomando las cosas de su padre para hacer lo que le pidió. -Por lo menos no nos intoxica.
•••
Zayn sonrió en cuanto abrió la puerta y se encontró a Liam del otro lado, adorablemente engullido en un abrigo demasiado grande para él. El castaño traía las mejillas sonrojadas ligeramente por el frío y una sonrisita tímida.
—Hey, babe. —el mayor murmuró, acercándose al castaño por un beso y pegando la puerta a su espalda para que nadie (su padre) estuviera de chismoso.
—Zee... —Liam lo miró conflictuado por un momento, pero se acercó también y observó detrás de él antes de inclinarse para recibir el beso. El mayor sonrió satisfecho.
—Tranquilo Li, no es la primera vez que vienes a casa.
—Ya lo sé, —Liam murmuró delante de él. —Pero sí es la primera vez desde que Yaser se enteró.
—Bueno, —Zayn hizo una mueca. —No fue de la mejor manera, pero es bueno que lo sepa, ¿no?
—Supongo. —Liam mordió su labio preocupado y le dedicó a Zayn un puchero cuando este se hizo a un lado para dejarlo pasar.
Liam no había estado convencido de ir a casa de los Malik a la salida del cine, pero Zayn había insistido. Era sábado, no había visto al chico desde el día anterior en la escuela, lo extrañaba. No se lo dijo, por supuesto, pero ese no era el punto. El mayor le había texteado que lo invitaba a cenar, Liam aceptó de inmediato pero en el camino su mente iba a mil por hora, al igual que los mensajes que le enviaba a Zayn, preocupado por Yaser y cómo iba a afectar su relación ahora que él sabía. Zayn había tratado de calmarlo durante todo el camino, en vano por supuesto.
El moreno ayudó a su chico con su abrigo, y luego le pidió que lo acompañara a la cocina en dónde se encontraba su padre e Ismail, tratando de seguir cada indicación que el mayor le daba.
—¡Liam! —Yaser saludó en cuanto lo vio ingresar, sin dejar de batir algo en un bowl de aluminio. —Que bueno que te nos unes, ¿te quedas a cenar?
Liam suspiró con tranquilidad y miró a Zayn, quien le devolvió la mirada como diciendo “te lo dije”
—¿Hiciste samosas? —el castaño le preguntó al mayor, acercándose con más confianza, saludando a Ismail en el camino.
—¡Por supuesto!
—Entonces me quedo, por supuesto.
—¿Ven? Liam cree en mis capacidades. —Yaser reprendió a sus hijos, quienes habían estado cuestionando todo el tiempo sus métodos en la cocina.
El tiempo pasó entre conversaciones vagas y risas, causadas por el mayor de los cuatro. Yaser siempre había sido el Malik favorito de Liam, después de Zayn, por supuesto. El castaño adoraba a Trisha, pero Yaser simplemente era tan facil de llevar y tan bella persona, a Liam no le sorprendía para nada la adoración que Zayn sentía por su padre. Y el verlo ahora, además, tratando de ser lo mismo para Ismail, a Liam le parecía maravilloso. Trisha apareció tiempo después con Safaa y Whali y muchas bolsas de compras que Yaser miró con falso dolor.
—Hola jaan. —Yaser sonrió secando sus manos en una franela con florecitas y se acercó a saludar a su esposa con un beso.
Liam soltó un pequeño suspiro por el apodo cariñoso. No era la primera vez que se preguntaba si Zayn se lo diría alguna vez. Recordaba el significado que años atrás Yaser había compartido con él, cuando su curiosidad lo llevó a preguntar, la primera vez que lo escuchó.
—¿Cocinaste, Yassy? —Trisha preguntó maravillada, mientras peinaba con su pulgar las pobladas cejas de su marido.
—Lo siento, má. —Zayn dramatizó. —Tratamos de detenerlo, pero es más fuerte que nosotros.
—¿Quieres quedarte sin cenar, beta? —Yaser amenazó a su hijo. Zayn fingió cerrar sus labios, poner un candado y tirar la llave lejos, mientras se movía cerca de Liam. —Eso pensé.
Todos se reunieron en el comedor principal de la casa Malik, el ambiente se sentía tan cómodo, a Liam le recordaba las infinitas veces que se quedó a cenar cuando era mas pequeño y no pudo evitar mirar a Ismail del otro lado de la mesa. El chico estaba inmerso en una conversación con Yaser y sus hermanos, mientras Trisha servía la cena y pasaba los platos a cada uno de sus hijos. Luego vio a Zayn y no pudo evitar sonreír cuando el moreno lo hizo, completamente ajeno a su mirada. No pudo evitar pensar que se merecían ese tipo de momentos, ya habían pasado por mucho, era tiempo de que su familia volviera a estar unida.
Se dispusieron a cenar, preguntando sobre el día que había tenido cada uno y haciendo planes de futuras salidas, Liam estaba encantado. La cena que Yaser había preparado estaba perfecta, contra todo pronóstico. El ambiente era ligero y se respiraba tranquilidad; al menos hasta que Trisha hizo una pregunta.
—¿Ya tienes novia, Li?
En la mesa se hizo silencio, algunos cubiertos golpearon la vajilla y se escuchó una risita por parte de Safaa.
Liam miró a Zayn con disimulado pánico pero el chicos parecía estar igual de shockeado como él.
—Mmm, —Liam tragó saliva antes de negar ligeramente, sin apartar la vista de su plato.
—¿En serio? —Trisha insistió tratando de bromear. —¿Me estás diciendo que no hay ninguna chica linda que te interese?
—Trish, amor —Yaser habló desde el otro lado de la mesa. —No avergüences al niño.
—No estoy tratando de avergonzarlo, —Trisha respondió —Solo digo que ya están en esa edad, y a mí me gustaría que Zayn nos presente una noviecita un día de estos.
Yaser miró a su hijo, quien lo miraba de regreso pero no era una mirada que buscara ayuda, por el contrario Zayn se veía serio y decidido. Miraba a su padre en busca de aprobación, el Malik mayor no pudo evitar sentir orgullo y también un poco de preocupación.
—Tu decisión. —murmuró encogiéndose de hombros. —Lo que quieras hacer, tienes mi apoyo.
—¿Qué ocurre? —Trisha preguntó intrigada.
Zayn le dió una mirada a Liam, quien parecía asustado, pero el moreno pensaba que no habría mejor oportunidad que esa. No podía esperar a que su madre se enterara por accidente, cómo lo había hecho Yaser. Quería que lo supiera por él mismo.
—Bueno, no sé si sea posible presentarte una novia pronto, má.
—Bueno, cariño...
—¿Pero qué tal un novio?
Zayn interrumpió a su madre y sorprendió a Liam cuando tomó su mano, entrelazó sus dedos y elevó a ambos por encima de la mesa para que la mujer lo viera.
Un nuevo silencio se formó en la mesa, Trisha observó las manos juntas y luego observó a Yaser, quien sólo asintió en confirmación con una pequeña sonrisa de labios apretados.
Zayn sentía que se iba a desmayar en cualquier momento, era demasiada tensión, su ansiedad empezaba a aumentar y el valor que sentía hacia minutos se esfumaba de a poco. Liam conociendolo como lo conocía, empezó a dibujar círculos con su pulgar sobre el dorso de su mano aún entrelazada, tratando de relajarlo.
—Bueno, —Trisha carraspeó y les dedicó a todos una sonrisa tensa. —La cena estuvo deliciosa, cariño. Subiré a mi habitación ahora.
Zayn sintió vértigo y ganas de vomitar, definitivamente esa no era la reacción que esperaba. Volteó a ver a su padre con pánico cuando su mamá se puso de pie y empezó a subir por las escaleras.
—Oye, —Yaser llamó la atención de su hijo, buscando calmarlo. —Eso estuvo bien, Zayn tranquilo. Yo me encargo de mamá, ella sólo está un poco sorprendida, dale un poco de tiempo. Estoy orgulloso de ti, ¿me escuchaste?
Zayn le dió una sonrisa débil antes de que Yaser siguiera a su madre escaleras arriba. Por otro lado, Liam se puso de pie y se perdió por el pasillo camino al patio trasero. Zayn no sabía si ir tras de él o subir en busca de sus padres.
—¿Zee? —Whaliya llamó con cautela. —Ve con él, no dejes que se vaya así.
—Sí, Zayn. —Ismail se unió —Ve con Liam, nosotros nos encargaremos de Safaa y de recoger todo.
El moreno asintió en automático, poniéndose de pie y caminando a pasó apresurado cuando imaginó a Liam yéndose molesto. ¿Había hecho mal?
—Li... —Zayn respiró tranquilo cuando salió al patio trasero y encontró al castaño caminando de un lado a otro sobre el césped.
—¿Te volviste loco? —Liam le preguntó entre dientes, no se veía molesto pero sí preocupado. —¿Cómo se te ocurre soltarle la noticia así?
—Lo lamento, —Zayn se abrazó a sí mismo, confundido, sus pensamientos yendo a mil por hora. —Jamás imaginé que ella reaccionaría así, sabes que este no es un tema tabú. Tío Ezra...
—Eres su hijo, Zayn. No es lo mismo.
—¿Crees que me odie?
Liam dejó de caminar de inmediato y se apresuró a acercarse a él. Rodeo la cintura del moreno en un abrazo y recargó su cabeza en su pecho. Zayn lo rodeó con sus brazos y lo apretó contra él.
—Por supuesto que no, no digas tonterías.
—No puedes saberlo.
—Claro que puedo, ¡es tu madre! —Liam reprendió en voz baja. —La misma Trisha que atrapa las arañas con un vaso y una hoja de papel, para luego liberarlas en su jardín. Ella jamás podría odiarte.
Zayn suspiró y apretó a Liam aún más contra su pecho. La ansiedad que había empezado a sentir, olvidada en lo profundo de su mente. Tener al castaño con él lo ayudaba demasiado. Era una situación difícil, definitivamente no se esperaba que la noche terminara así, pero tampoco habría hecho nada diferente.
Lo había pensado por mucho tiempo, y definitivamente nunca lo había dicho en voz alta, pero amaba a Liam. Estaba ridículamente enamorado de él y estaba seguro de que el castaño era su persona. No importaba lo que su madre o los demás pensaran, Zayn no renunciaría a Liam por nada.
•••
Yaser ingresó a su habitación con cuidado, cerrando la puerta a sus espaldas y recargandose en ella por un momento. Trisha se encontraba del otro lado de la habitación, observando en silencio por la ventana.
—Jaan.
—Tú lo sabías. —Trisha no preguntó, afirmó, aún sin girarse. Yaser suspiró.
—Lo sabía. —aceptó. —Pero no porque él hubiese querido decirme. Lo escuché hablando con Ismail el día que pelearon. Aparentemente él y Liam llevan un tiempo juntos, pero no encontraba el momento para hablarlo con nosotros.
—¿Cómo pasó esto?
—Amor... —Yaser murmuró con cariño mientras se acercaba a su mujer. —Las personas se enamoran a diario.
—Sabes a lo que me refiero, Yaser. —Trisha giró cuando sintió los brazos de su marido a su alrededor.
—¿Qué quieres que te diga, cariño? —Yaser se encogió de hombros, sonriendo cuando notó lo que Trisha veía por la ventana. Su hijo y Liam estaban abrazados en medio del patio trasero, conversando en susurros. —Sabiamos que Zayn tenía una debilidad por ese niño.
—Siempre pensé que Zayn me daría nietos.
—Aún puede dártelos. —Yaser se encogió de hombros. —Sabes que ese no es el problema, ¿qué es lo que en verdad te molesta?
—No estoy molesta. —Trisha negó pasándose las manos por el cabello. —Al principio estaba sorprendida y quizá un poco incómoda, no sabía cómo reaccionar. Nadie te prepara para esto, por Allah.
—No, nadie lo hace. —Yaser besó su frente.
—Pero luego, me sentí decepcionada...
—Trish...
—No de mi hijo, —Trisha se apresuró a aclarar. —Sino, ¿de la situación? No lo sé, Yaser imaginé la vida de mi hijo diferente.
—Bueno, jaan pero no podemos controlar lo que nuestros hijos hacen con su vida.
—Ya lo sé.
—Zayn está a nada de convertirse en un hombre, —Yaser sujeto el rostro de su mujer para verla a los ojos. —Y creo que has hecho un excelente trabajo con él. Debemos sentirnos orgullosos, ¿sus preferencias harán que tu amor por él cambie?
—Por supuesto que no, Yaser. —Trisha frunció el ceño molesta con su marido por tan si quiera sugerir aquello. —Es mi bebé de quién estamos hablando, jamás nada de lo que él hiciera lograría que mi amor por él cambie.
—Entonces cariño, debes bajar y decírselo. —Yaser los acercó a ambos a la ventana. —Porque conocemos a nuestro niño y esa cabecita suya debe ir a mil por hora.
—¡Qué estúpida! —Trisha se regañó tomándose la frente y girando a ver a su marido con preocupación. —No fue mi intención reaccionar así, no supe manejarlo. No quiero que Zayn piense que no lo acepto. Yo lo amo.
—Está bien, Trish. —Yaser la abrazó con fuerza tratando de calmarla. —Él entenderá, ahora sólo necesita saber que tiene el apoyo de mamá.
—¡Por supuesto que tiene el apoyo de mamá, mi niño!
Trisha alejó a su esposo de inmediato y salió de la habitación en busca de su hijo. Yaser solo pudo reír antes de salir detrás de ella.
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😱
¿capitulo nuevo? ¿kesta pasando aki?