Capítulo Final.
Hara era una mujer en todo el sentido de la palabra, la madurez junto con la responsabilidad habían llegado hasta ella en tan poco tiempo que no le permitió si quiera respirar.
Ahora estudiaba a las afueras de la ciudad, ya no había protección ni mucho menos un adulto que no fuese ella. Su padre junto con su madrastra la llamaban continuamente interesados por su bienestar. Preguntaban cosas, como si había hecho amigos, si le estaba yendo bien con las clases y si tenía dinero suficiente como para seguir alimentándose.
Su padre había cambiado tanto, que era casi irreconocible, era una persona tan nueva. Trabajaba desde casa, era atento, siempre pedía disculpas y se moldeaba así mismo como un esposo ejemplar.
Yuso había hecho crecer flores en un suelo baldío. Lo hacía feliz.
En cuanto a mi madre, nunca supe algo de ella. Nada, ni un saludo, un mensaje o cualquier cosa significativa de su amor o atención.
Quizás no estaba hecha para ser madre. Y por lo mismo la perdonaba.
En cuanto a lo que era, tenía amigos, una vida tranquila y ningún romance a la vista, o al menos eso le decía a Jungkook cada vez que nos veíamos.
Creía que mi vida había quedado ordenada hasta que lo vi.
Sus ojos brillaban y su cabello, ahora castaño oscuro, destellaba con los rayitos de sol que se abrían sobre el techo de la parada de autobuses.
Parecía igual de asustado y asombrado que yo, lo pude notar por como había dejado caer sus compras dejando que las manzanas cayeran lejos de sus pies. Un señor tocó su hombro indicándole su desorden pero solo lo ignoró.
Levanté la mano, dispuesta saludarlo, las piernas me temblaban y sentía ganas de vomitar. Él me devolvió el saludo un poco pasmado desde la otra parada de autobuses. Me sentía halagada al saber que me había reconocido aun después de tanto, ya no tenía facciones tan infantiles y el se veía demasiado conservado para su edad.
Me sentía en otro mundo, en otro lado, era otra yo, otro él.
Nuestros autobuses llegaron, tragué saliva mientras me armaba de valor para subir al vehículo, no sin antes sonreír mientras lo despedía de vuelta.
Mi corazón no se calmó incluso después de haberme sentado junto a la ventana.
Miré como subía a su autobús luego de recoger sus cosas del suelo. Sus ojos me buscaron entre los asientos pero no quería que me viera. No deseaba ver de nuevo esos ojos que tanto me costo borrar.
No lo volvería a ver jamás.
Llegando a mi departamento, dejé las cosas en el sillón mientras sentía como el corazón intentaba salirse por la boca. Acababa de ver a Park Jimin, después de tanto nuestros caminos tuvieron un cruce, un cruce desesperante.
Intenté animarme, tomé algunas cosas para cocinar mientras dejaba que la música borrara cualquier pensamiento flotante. Las manos me temblaban mientras intentaba sujetar el cuchillo, a veces respiraba hondo e intentaba cantar la canción, pero no funcionaba.
Unos toques llamaron mi poca atención, dejé lo que hacía mientras llegaba a la puerta.
— ¿Por qué demoraste tanto en abrir?, me estaba muriendo de frío.
Jungkook entró con su gorro calado hasta las orejas, retiro su chaqueta dejándola posar sobre el sofá y miró por sobre mí detallando el desastre de la cocina.
— Cocinar no es lo tuyo, ¿verdad?— preguntó en tono burlón.— Deja que te ayude para que me des.
— No hace falta que continúes, no sé que estoy pensando en cocinar.
—Ya vi,—rió.— Tengo unas horas libres antes de recoger a mis hermanos, puedo hacer algo decente. Solo necesito una ayudante que no sepa cortar una cebolla.
— Puedo ocupar la vacante.
Cuando estuvimos a solo minutos de terminar, alguien toco la puerta, lo miré extrañada pensando que sería alguna de mis compañeras que había llegado sin avisar.
Tomé mis zapatos dispuesta a alejarme de la cocina y cuando abrí la puerta creí que me iba a desmayar.
Jimin se encontraba jadeante con el cabello entrelazado en su frente, su mano reposaba en el marco intentando coger aire. Llevaba la misma ropa con la que lo había visto.
— Hara—susurró, su voz seguía siendo la misma. —Perdón por llegar así, pero cuando te vi en la parada no supe reaccionar. He seguido tu autobús hasta los edificios, buscando en cada puerta hasta que escuché que estabas aquí...—Por un momento cayó mientras una sonrisa se mostraba en sus labios.— Siento que estoy dando detalles innecesarios, me disculpo de nuevo, no puedo controlar la lengua y siento que en cualquier momento escupiré mi corazón. Hara.
— No puedo creer que me hayas seguido hasta mi casa, ¿por qué lo harías?— una parte de mí sentía felicidad. Él me había estado buscando desde que nos vimos, estaba interesado en encontrarme, pero ahora que estaba aquí...
— ¿Te gustaría cenar conmigo está noche? —preguntó.— Deseo verte y poder hablar lo que no pudimos decirnos. Entenderé que quizás ahora tu corazón está ocupado con alguien más, pero puedo demostrarte todo el amor que he guardado para ti en estos últimos cinco años, si me lo permites...
Lo miré sorprendida, aferré mi mano en la perilla intentando no caerme, sus ojos penetraban mis pensamientos haciendo que no pensara con claridad las cosas. Jungkook estaba en la cocina esperando por mí, mientras yo veía a Jimin quien esperaba llevarme con él.
Cada extremo era tirado, jalando y jalando al punto de romperse, Jungkook era mi amigo, quien estaba dispuesto a esperarme, mientras Jimin era el amor de mi niñez, quien mi corazón había querido esperarle.
¿Me quedaría con Jungkook en mi departamento o me iría con Jimin, quien esperaba hablar del pasado conmigo?
¿A quién acompañarías tú?
Un final en donde eres libre de seguir el camino que deseas, puedes creer en un viejo amor o comenzar uno nuevo, pero recuerda, los sentimientos nunca se van del todo, así que dime, ¿Estás lista para decidir?
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Muchas gracias por tomarte el tiempo de leer, me disculpo si tuve algunas fallas en el transcurso de la historia, ahora que estoy en el final me doy cuenta de lo mucho que disfruté escribir esto y de lo mucho que disfruté el leer sus comentarios. Amo a cada uno de ustedes, gracias por darme un espacio en sus pensamientos, hacen que mis días sean menos grices ♥♥♥♥
Si alguien tiene una duda con el final, es un final abierto, ustedes pueden escoger con quien se quedará Hara.
M.