第87章
Yan Feili se levantó lentamente y limpió el desorden de la noche anterior, reemplazando todas las sabanas y los edredones por unos nuevos. No tenía sirvientes como Beitang Ao, y le resultaba imposible pedirle a su cuñada que le ayudara a lavar y cambiar las sábanas sucias. Afortunadamente, está acostumbrado a vivir solo y puede limpiar por sí mismo.
Anoche, estaban tan absortos en su acto de amor que no tuvieron tiempo de hablar un poco más. Yan Feili lamentó no haberle preguntado sobre Li'er y ahora se preguntaba cuándo volvería a verlo.
Cuando Beitang Ao regresó a la residencia real, era casi el amanecer. Llevó a Moxue a los establos y lo ató, y luego volvió a su habitación. Antes de que pudiera entrar en la habitación, observó un punto negro que se acercaba gradualmente desde el horizonte lejano. Con una ceja alzada, pasó por alto la puerta de su habitación y se dirigió al patio sur. Había un pequeño edificio de tres plantas frente a un jardín de flores, con una vista impresionante y elegante.
Beitang Ao subió de un salto hasta la planta más alta y se colocó frente a la barandilla, de espaldas a la sombra de los árboles, y contempló cómo se acercaba ese punto negro, que en realidad era un águila voladora.
Beitang Ao la saludó y el águila dio dos vueltas antes de aterrizar en su brazo. Beitang Ao quitó el cilindro de bambú atado al agarre del águila, lo abrió y sacó el objeto que había dentro. No pudo evitar fruncir el ceño mientras bajaba las escaleras con el águila posada en su brazo.
"Ling Zhu, ordena inmediatamente a alguien que averigüe sobre esta persona." Beitang Ao utilizó la Técnica de las Sombras para convocar a Ling Zhu y le dio instrucciones: "Las fuerzas de la Puerta Celestial no están en Yaojing, y este venerable Rey no quiere utilizar a la gente de la familia real, así que ve a reunir a los Guardias de las Sombras e investiga este asunto."
"Sí." Aunque Ling Zhu no sabía qué le preocupaba al Maestro de Secta al no querer utilizar las fuerzas de la familia real, siempre había cumplido las órdenes y se retiraba cuando las recibía.
Beitang Ao jugó con la carta secreta en su mano y la agitó, convirtiendo el papel en polvo y esparciéndolo por el aire.
Beitang Ao no estaba muy preocupado por este asunto, pero cuando pensaba en Yan Feili, creía que es mejor ser cuidadoso. Solo me culpo por no haber erradicado el problema de raíz en aquel entonces, ¡para que no causaras ningún problema hoy!
---
Después de unos días de recuperación, Beitang Yaohui finalmente mejoró, y Beitang Yaori estaba extremadamente feliz. Todos los días, después de practicar y hacer sus deberes, venía a hacerle compañía y a jugar un rato con él. Para cuando se recuperó por completo, ya habían pasado más de diez días.
Al ver que ya no estaba gravemente enfermo, Lin Yanyan volvió a la Sala Budista. Cada vez que contemplaba a este niño, que poco a poco iba recuperando su salud, inevitablemente pensaba en su propio hijo, que no pudo sobrevivir a la enfermedad y murió prematuramente, por lo que ya no quería permanecer a su lado.
Asimismo, Beitang Ao también se había recuperado por completo de la lesión en su hombro, y cómo ya no tenía más excusas, tuvo que reanudar sus funciones en la corte. El nuevo emperador acababa de ascender al trono, y acababa de pacificar el Reino de Ming. Cómo Beitang Ao llevaba más de un mes sin ir a la corte, inevitablemente había acumulado muchos asuntos que necesitaba su atención urgente. En este momento, tenía que concentrarse completamente en estos asuntos y no tenía tiempo para ver a Yan Feili. Solo Beitang Yaori, al observar que Hui'er se había recuperado, deseaba ir al campo a buscar a su padre adoptivo de nuevo.
Recientemente, Beitang Yaori se había comportado extremadamene bien y fue muy educado. Desde el día en que escuchó las palabras de su padre y de su madre concubina, había guardado muchas preguntas en su corazón, pero no había mencionado ni una palabra.
Después de regresar del campo, Beitang Ao le había dicho a sus subordinados que nadie podía revelar lo que había sucedido en el campo con Yan Feili. Sin embargo, se había olvidado de mencionárselo a su hijo. En realidad, no es que lo hubiera olvidado, sino que no quería que Li'er creyera que su encuentro con Yan Feili era un secreto, así que no se lo pidió expresamente.
Naturalmente, Beitang Ao no temía que los demás supieran que había visto a Yan Feili, pero ahora que los dos estaban enamorados y llenos de emociones dulces, necesitaban ser cuidadosos. Si los subordinados bajo la Puerta Celestial los veían, ambos temían que esto causara algún inconveniente, así que simplemente no lo mencionaron y lo ocultaron durante un tiempo.
Beitang Yaori recordó la conversación que mantuvieron sus padres aquel día, y cuanto más pensaba en ello, más creía que podría preguntarle sobre esto a su padre adoptivo. También sabía que su madre concubina parecía tener cierta antipatía por su padre adoptivo, por lo que nunca lo había mencionado delante de Lin Yanyan.
Él y Lin Yanyan no eran muy unidos desde un inicio, y ahora Lin Yanyan pasaba todo el día en la Sala Budista, incluso prescindía del ritual diario de presentarle sus respetos a la madre concubina, por lo que estaban aún más distantes que antes. Cuando se reunían, solo le hacia las preguntas habituales sobre su trabajo escolar y las artes marciales.
Ese día, Beitang Ao convocó a Yaori para ponerle a prueba sus habilidades. Este respondió al examen con fluidez y precisión, lo que alegró a Beitang Ao, cuyo afecto por él era evidente. Yaori aprovechó la oportunidad para decirle a su padre que quería ir a ver a su padre adoptivo.
Beitang Ao estaba profundamente conmovido. Al fin y al cabo, eran padre e hijo, había pasado poco tiempo, pero Yaori ya le había instado varias veces seguidas sobre este tema. Recordando que Lin Yanyan había mencionado que se quedaría en el Templo Budista Puji en las montañas durante los próximos dos días, los niños quedaron desatendidos, así que aceptó y observó con una sonrisa cómo Yaori salía corriendo por la puerta con una alegre sonrisa.
Sin embargo, no sabía lo asustado que estaba Yan Feili en ese momento.
"Puaj— Puaj—" Yan Feili se desplomó contra la pared, casi vomitando su propia bilis.
Cuando pasó por la cocina y percibió el olor del estofado de carne que provenía del interior, no pudo evitar salir corriendo. Después de vomitar con gran dificultad, se limpió la cara y se puso de pie lentamente, agarrándose de la pared. El rostro de Yan Feili era extremadamente antiestético, su complexión era pálida y marchita, se aferraba a la boca de su estómago, y su cuerpo estaba empapado de sudor frío de pies a cabeza.
Esto, esto, esto no puede ser...
Yan Feili se apoyó débilmente contra la esquina de la pared, todo su cuerpo estaba inerte y su pecho palpitaba ligeramente, una y otra vez, mareándolo. Con gran dificultad, se dirigió lentamente al patio trasero, sacó una palangana de agua y se lavó la cara.
El agua fluctuaba y la fosforescencia resplandecía. Yan Feili de repente se quedó en silencio, mirando fijamente las vicisitudes del rostro del hombre reflejado en el agua, preguntándose qué estaba pensando.
"Xiao-Yan, acompáñame a las caballerizas esta tarde para ver los caballos Dian recién llegados." Liu Qi entró corriendo, interrumpiendo su ensoñación.
Yan Feili volvió a sus sentidos y levantó la cabeza: "Ah-Qi, no me siento muy bien hoy, hagámoslo otro día."
"Xiao-Yan, ¿qué te pasa? Estás muy pálido." Liu Qi estaba un poco preocupado: "No has ido a las caballerizas durante unos días, si estás realmente enfermo, iré a la ciudad y pediré a un médico que te vea."
"No es nada, seguramente es porque ha llegado el verano y me ha dado un golpe de calor." Las palabras que dijo Yan Feili fueron un poco reticentes. De hecho, era solo mayo y el clima no era ni demasiado frío ni demasiado caluroso. La temperatura era adecuada, así que ¿cómo puede sufrir de un golpe de calor?
Yan Feili vislumbró una figura cojeando y algo borrosa detrás de él, y preguntó: "¿Xiao-Yuan también irá?"
"Mm." El pequeño rostro ordinario de Yuan Qing era bronceado y delgado, con únicamente un par de ojos brillantes que lo hacía parecer que estaba constantemente sorprendido: "Hoy, hoy, hoy tenemos que revisar, revisar, revisar los caballos."
"Ustedes sigan adelante." Yan Feili dio una palmadita en el hombro de Liu Qi, indicándole que no tenía que preocuparse, y los siguió a él y a Yuan Qing fuera de la puerta del patio.
"Bien. Nos iremos entonces, si no te sientes bien solo díselo a tu cuñada y que ella te cuide. No te he visto comer nada estos días, has perdido peso."
"¡Tonterías! ¿Todavía crees que no puedo cuidar de mí mismo?" Yan Feili lo empujó con impaciencia: "¡Deberían irse ya!"
Liu Qi se dirigió a las caballerizas a buscar los caballos. Yuan Qing cojeó tras él y de repente se dio la vuelta hacia Yan Feili y le dijo: "¡Hermano Pan, cuida tu salud!"
Yan Feili se congeló por un momento y expresó: "Entendido. Tengan cuidado en el camino." Le dio una palmadita, sintiendo que temblaba un poco, y la mirada en sus ojos era muy complicada.
Cuando montaron sus caballos y se marcharon, Yan Feili se dio la vuelta y regresó a su habitación, con un inexplicable pánico en su corazón. Él mismo conocía su propio cuerpo.
Además, no es la primera vez que esto ocurría...
------------------
Esta es una traducción propia del chino al español, espero lo disfruten.
..... Creo que ya se lo que te esta pasando Yan Feili!!!