第81章
Beitang Ao y Yan Feili caminaron lentamente por el campo de hierba.
En los últimos días, los dos se habían mostrado un gran afecto. Eran como una pareja de recién casados y hacían el amor noche tras noche. Beitang Ao tenía un temperamento ligero, y no era un hombre de amor y lujuria, pero ahora, quería sostener a Yan Feili entre sus brazos noche tras noche hasta quedar exhausto.
Yan Feili siempre le había obedecido, y ahora que lo trataba con sinceridad y mucho amor, se entregaba aún más a él, permitiéndole incluso utilizar todas las posiciones humillantes con él para disfrutar de todos los placeres.
Pero cuanto más dulce es el día, más se teme que se acabe. La pregunta que Yaori hizo hoy, sin saberlo, pinchó una fibra en el corazón de Yan Feili, recordándole algo en lo que no quería pensar.
"Qianzhi, llevas varios días aquí con Li'er, ¿cuándo piensas regresar?"
"Después de un tiempo. ¿Por qué también haces esta pregunta?"
"Aunque no pregunte, tarde o temprano tendré que saberlo. ¿No tienes que ir a la corte estos días?"
"Esta vez he vuelto a la corte con una victoria, y el Emperador ha ordenado que todo el reino lo celebre. Como aún no me he recuperado de mi lesión, Su Majestad me ha dicho expresamente que puedo recuperarme a puerta cerrada, y que yo puedo decidir cuándo acudir a la corte imperial."
La lesión en el hombro de Beitang Ao era una herida en los tendones y las venas. Si fuera una persona normal, este brazo habría quedado arruinado hace mucho tiempo. Sólo se recuperó tan rápidamente porque su práctica del Poder Divino de la Luna Brillante era extraordinaria y tenía el efecto de curarse a sí mismo. Sin embargo, es poco probable que pueda ejercer fuerza con la misma libertad que al principio.
Cuando Yan Feili pensaba en cómo debían llevarse en el futuro, le resultaba cada vez más difícil de soportar. Ya se había separado de la Puerta Celestial, así que no podía volver con él a la residencia real, y asimismo realmente no quería volver. Además, todavía había incomodidad y malentendidos entre él y su esposa, Lin Yanyan, y muchas cosas no eran fáciles de explicar.
"Feili, ¿no quieres volver conmigo?" Cuando Beitang Ao vio su expresión, ya sabía lo que estaba pensando. Si hubiera sido antes, no habría hecho esta pregunta en absoluto, y naturalmente, le habría pedido que lo acompañara. Pero en este momento, tenía que respetar su opinión.
Yan Feili negó con la cabeza: "Ya he dejado la Puerta Celestial."
"Dejaste la Puerta Celestial, pero no me dejaste a mí. Además, ya no sólo soy el Maestro de la Puerta Celestial del Norte, y no necesitas volver con tu antigua identidad."
"Es aún más imposible. Eres el majestuoso Rey Beitang, y Maestro de Secta de la Puerta Celestial del Norte. Tienes con una posición elevada y poderosa, y yo sólo soy un plebeyo. ¿En calidad de qué quieres que me quede a tu lado? ¿Cómo tu general militar?"
"¿Por qué no?"
"Qianzhi, sabes que mi cuerpo ya no es capaz de soportarlo. Ya no puedo luchar contigo en el campo de batalla como lo hacía en aquel entonces. ¿Cómo puede ser un general militar una persona que no puede ir a la guerra?" Cuando Yan Feili dijo esto, su expresión era un poco vacía y solitaria.
Beitang Ao le tomó la mano: "Feili, no quiero que vuelvas al campo de batalla."
Yan Feili dejó escapar un suave suspiro y forzó una sonrisa. Llevaba levantando su espada para luchar desde los doce años, practicando artes marciales y entrenando soldados, corriendo a la sombra de las espadas durante tantos años, que no era algo que pudiera dejar de lado. Inicialmente pensaba que una vida tranquila en las caballerizas era algo que solo podía vivir en un sueño, pero después, cuando pensaba en los viejos tiempos montando a caballo con su espada en mano, no podía evitar sentir una vaga nostalgia. No era de extrañar que tantos generales famosos en el pasado sigan extrañando la vida en el campo de batalla incluso después de haberse retirado.
"Feili, es mejor no ser un general militar. Tampoco quiero que vuelvas conmigo como subordinado."
".... Qianzhi, no importa cuál sea mi estatus, no volveré contigo."
Beitang Ao frunció el ceño: "¿Es por Yanyan?"
Yan Feili hizo una ligera pausa y deliberó un momento antes de decir lentamente: "Esta es también una de las razones. Lo más importante es que nuestra relación.... simplemente no está permitida en este mundo." Las últimas palabras salieron casi a trompicones entre sus dientes.
Cuando Beitang Ao lo escucho decir eso, su corazón también se llenó de angustia. Pero le apretó la mano con fuerza y le dijo: "Siempre hay formas de resolver esto. Si no vienes conmigo, ¿aún quieres separarte de Li'er y de mí? ¿No me digas que no deseas verlo constantemente?"
Yan Feili miró a lo lejos, donde Yaori montaba un pony y galopaba libremente. A tan corta edad, era tan atlético que podía saltar fácilmente la valla, que tenía unos 60 centímetros de altura.
Una mirada de orgullo y ternura apareció en el rostro de Yan Feili, y después de un largo rato, dijo: "Naturalmente, quiero estar con ustedes todo el tiempo. Pero Qianzhi, ¿qué podemos hacer?"
Beitang Ao reflexionó en silencio. Aunque se han enamorado el uno del otro, este tipo de relación estaba sometida a una tremenda presión en el entorno actual. Era un Rey, un hombre por encima de todos los demás, y cada uno de sus movimientos era observado por mucha gente, así que ¿cómo podía realmente hacer lo que quisiera?
En el pasado, el Emperador Chongxin, de la Dinastía Ming, estaba obsesionado con un hombre, y sentía tanta devoción por él que casi enterró los centenarios cimientos de la Dinastía Ming. Por lo tanto, en los últimos cien años, la Dinastía Ming ha reprimido la homosexualidad más que ningún otro reino. Si su relación con Yan Feili fuera descubierta por el mundo, él estaría bien, pero Yan Feili estaría en gran desventaja.
Además, estaba Lin Yanyan.
Beitang Ao pensó en ello y suspiró, limitándose a sujetar su mano con fuerza sin hablar.
"¡Padre! ¡Padre adoptivo!"
Ambos miraron al mismo tiempo para ver a Li'er cabalgando a lo lejos, saludándolos con una sonrisa triunfante.
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Antes de que los dos pudieran discutir este asunto adecuadamente, al día siguiente llegó un informe urgente de la residencia real, diciendo que el Segundo Príncipe estaba gravemente enfermo y su fiebre no bajaba, pidiendo al Rey y al Príncipe Heredero que se apresuraran a regresar.
"Padre, Hui'er está enfermo, volvamos rápido." Al escuchar esto, el corazón de Yaori se llenó de ansiedad, tiró de la manga de Beitang Ao y lo instó a apresurarse.
Beitang Ao dio instrucciones a sus subordinados para que hicieran los preparativos y partieran el mismo día.
Yan Feili dijo: "Qianzhi, ustedes deberían irse rápidamente, no me siento cómodo quedándome aquí, así que será mejor que regrese primero."
Beitang Ao dijo: "Bien, vuelve a casa de Liu Qi y espera mis noticias."
"Padre adoptivo, ¿no quieres venir con nosotros?"
Yan Feili abrazó a su hijo y le dijo: "El padre adoptivo no irá contigo. Cuando Li'er vuelva a la residencia real, no olvides a tu padre adoptivo."
"Li'er nunca olvidará a su padre adoptivo. Cuando Hui'er mejore, lo llevaré a ver al padre adoptivo."
Yan Feili era un poco reacio a separarse. Pero pensándolo bien, sólo había unas horas de viaje desde la capital hasta las afueras de la ciudad, así que no estaba tan lejos. Si se extrañaban, podían verse en cualquier momento.
Beitang Ao se quitó una ficha de jade de la cintura: "Feili, tú sabes lo que es esto. Guárdalo por si hay algún problema, es conveniente de esta manera."
Yan Feili no se negó y guardó la ficha de jade. Cuando se fueron, recogió sus cosas y volvió a casa de Liu Qi.
Beitang Ao tomó a Yaori y se apresuró a regresar a la residencia real.
"¡Su Majestad!"
Cuando llegaron a la habitación de Yaohui, varias sirvientas y nodrizas ancianas lo vieron y se arrodillaron y se inclinaron apresuradamente.
"¿Cómo está Hui'er?" Beitang Ao se sentó en el borde de la cama y miró hacia el hombrecito que estaba en la cama y se sorprendió. Vio manchas rojas que cubrían esa tierna carita, extendiéndose hasta debajo del cuello.
"¿Qué está pasando aquí?"
Un viejo médico imperial al lado temblaba mientras se dio un paso hacia adelante: "En respuesta a Su Majestad, temó que, temó que el Segundo Príncipe..."
"¿Qué es lo que temes?" Beitang Ao instó con impaciencia.
"Me temo que está sufriendo un brote de viruela."
"¿Qué?" Beitang Ao ya tenía una vaga idea en su corazón de lo que estaba pasando, pero cuando lo escuchó decir esto, no pudo evitar estremecerse.
Sorprendentemente, ¡era... viruela!
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Esta es una traducción propia del chino al español, espero lo disfruten.
Les quiero dejar un poco de información interesante. Beitang Ao utiliza la palabra 龙阳 [Lóng yáng] que es un término utilizado para referirse a la sexualidad de un hombre. El motivo por el cual utiliza este término al hablar del antepasado emperador Chongxin quien se encapricho con un hombre, causando estragos a su reino es porque la historia detrás de este término proviene de un hombre llamado Long Yan (Jun es un título, como monarca que se agrega al nombre de la persona.)
Entonces, es una referencia a Long Yang Jun, el amante masculino favorito del Rey Wei en el período de los Reinos Combatientes (475-221 aC) Según la Estrategia de los Estados en Guerra. Estrategias Wei IV, está escrito que el Rey Wei y Long Yang Jun compartieron una barca y pescaron juntos y Long Yang Jun consiguió más de diez peces y luego derramó lágrimas. El Rey le preguntó por qué lloraba, y él respondió: "La primera vez que conseguí un pez, me puse muy contento, pero después conseguí uno más grande, y ahora quiero renunciar a lo que conseguí antes. Ahora que soy un hombre feroz, he sido capaz de servir a la almohada del rey.... pero hay muchas mujeres hermosas dentro de los cuatro rincones del mundo, así que cuando escuche que he sido honrado por el Rey, este sirviente siempre levantaré sus prendas inferiores y me acercaré a usted. Este sirviente es como el pescado que he obtenido antes, y este sirviente también está a punto de abandonarlo, así que, ¿cómo no voy a derramar lágrimas?" El rey ordenó entonces que todos los que se atrevieran a hablar de la belleza fueran excluidos de los cuatro territorios. En el Período de los Tres Reinos (220-280), Ruan Ji de la dinastía Wei escribió: "Los anteriormente prósperos An Ling y Long Yang." Más tarde, el término "Long Yang" se utilizó para referirse a la homosexualidad masculina. (Antes de su caída, An Ling era una ciudad durante el periodo de los reinos combatientes, igual que Long Yang, era muy prospera gracias al favor del rey)