S t a y T o g e t h e r ? [MYUNGJONG] [WOOGYU] [YADONG]

-¿Qué es lo que sientes por él?

—Gracias.— Susurró el menor al observar ya su orden servida, el mejor estofado de Kimchi a lado del visual siendo una noche casi digna de celebrar, Myungsoo por su parte,se sentía algo culpable, su acompañante no reflejaba en su mirada una gran felicidad, de echo, sabía muy bien que él estaba algo cohibido e incluso muy triste.

—No es nada, sólo disfruta.— Le dijo mientras se disponía a comer de su platillo, estaba hambriento, eso era más que notable en su forma desesperada de comer, Sungjong lo observó fijamente y señaló su labio.

—Hyung.— Susurró intentando decirle o mostrarle la parte que tenía manchada con el guiso del estofado.

—¿Qué?— Preguntó intentando limpiar la comisura de sus labios.

—No, ahí no... acá.— Se rindió al instante y entonces sintió los suaves dedos del menor rozar su labio, lo observó fijamente, él parecía concentrado en lo que hacía, segundos después sonrió de lado.

—¿Ya?— Preguntó, él asintió riendo.

—¿Era demasiado?— Volvió a asentir, Myungsoo sintió como sus mejillas se teñían de un ligero tono carmesí, el calor que subía hacia las mismas le hizo entender aquello. —Vaya que soy — Murmuró con diversión, Sungjong lo observó con curiosidad, antes... él no sonreía, era muy rara e incluso extraña la vez que sucedía.

Recordaba los primeros días en los cuales comenzaron a ser compañeros, Myungsoo era el más callado, todo el tiempo estaba sólo y muy apenas respondía las preguntas que sus hyungs le hacían, no era muy unido a los demás, pero se esforzaba por conocer a cada uno, menos a él y era algo que no sabía porque sucedía.

Los maknaes siempre eran los más queridos, siempre llevaban la delantera ante sus hyungs, eran los más tiernos y los que recibían más amor, todos concordaban en aquello, menos el visual, lo evitaba, no respondía a sus saludos y tampoco a sus preguntas, no convivía con él y no lo quería tanto como los demás; Sungjong siempre creyó que el visual lo odiaba o que estaba molesto, incluso una vez por tomar su cámara fotográfica casi lo golpea, pues según era su objeto más preciado y ninguno de los integrantes se había atrevido a tocarla, menos él, siempre le llamó la atención que era lo que el admiraba y fotografiaba tanto, ¿acaso eran cosas malas? Lo dudaba, no podía ser aquello.

—Sungjong-ah — Rompió el silencio que había inundado el lugar nuevamente.

—¿Qué sucede, hyung?

—Si te hago algunas preguntas, ¿responderías con la verdad?— Sungjong asintió, la sinceridad era siempre su fuerte.

—¿Qué es lo que sientes por él? ¿Lo quieres mucho?— Preguntó son dudarlo, Sungjong pareció sorprenderse, incluso, perdió su mirada en algún punto fijo.

(Editado 02/06/2016)