S t a y T o g e t h e r ? [MYUNGJONG] [WOOGYU] [YADONG]

015. |Lo siento, te amo.|

No podía dormir, los segundos se iban como horas, apenas era medianoche, no había llorado y SungYeol se había percatado de ello, un pequeño sentimiento de tranquilidad comenzaba a llenarla, después de haber pensado en la propuesta de Howon ,de haberla analizado y pensado en su bien... había tomado decisión, para él, el famoso dicho Un clavo saca otro clavo, no funcionaba, no quería estar atado a Howon sabiendo que su corazón sólo le pertenecía a MyungSoo, aunque le doliera, estaba dispuesto a estar en paz y tranquilidad consigo mismo, alejándose de la persona que más le hacía daño.

Se levantó de la cama, buscando a tientas sus pantuflas, la oscuridad era realmente notoria, ni la luz tenue de la luna llegaba a alumbrar esas cuatro paredes, suspiró, intentó no hacer ningún ruido mientras caminaba y al abrir la puerta salió silenciosamente, los suaves ronquidos de sus hyungs se escuchaban a través de las puertas de madera, él suspiró y caminó de forma lenta mientras intentaba darse calor así mismo.

"Estos hyungs." Murmuró al ver la nevera entreabierta, la mesa estaba repleta de empaques de comida rápida, él ni había probado nada de ello.

El ventanal del balcón estaba entreabierto también, lo que le sorprendió un poco, ¿Y si alguien había entrado desde el balcón para robar su comida? Frunció el entrecejo y tomó la primer arma que encontró, que no era más que uno de los zapatos de DongWoo.. caminó lentamente hacia el balcón, de forma silenciosa y cuando trepó hacia el otro lado su corazón palpitó con fuerza, un cuerpo en plena oscuridad, se temió lo peor y para asegurarse de si ese cuerpo seguía con vida, le tiró el zapato hacia su dirección.

"¿¡PERO QUÉ DEMONIOS!?" Un gruñido, él se sobresaltó y retrocedió.

"Sea quien seas, no te acerques, puedo gritarle a alguno de mis hyungs y ellos te golpearan." Aunque era una amenaza completamente estúpida, no tenía nada más que decir, una pequeña risa rompió el silencio.

"Tu, pequeño tonto... ¿Crees que ellos van a despertarse? Tsk, primero se incendia el departamento con ellos dentro. " SungJong se mantuvo en silencio, el dueño de aquella voz... no era nada más y nada menos que MyungSoo.

"Ya que no se trata de nada del otro mundo, me iré a dormir." Murmuró mientras se disponía a trepar hacia el costado opuesto del balcón para entrar, MyungSoo lo observó en la oscuridad y tomó su mano con fuerza, sus respiraciones se hicieron más constantes, estaban aumentando, sus corazones palpitando con fuerza, después de ya una semana, volvían a tener contacto físico, L sonrió en sus adentros, con nostalgia.

"No te vayas." Dijo con la voz entrecortada. "¿Podemos hablar?" Se atrevió a preguntar segundos después de haber quedado en un ambiente silencioso.

"¿Qué quieres decir? " contestó a duras penas el menor mientras se soltaba de su agarre, el corazón de MyungSoo se hizo pedazos poco a poco.

"Yo... SungJong... lo siento." Una risita irónica por parte del menor le hizo cerrar los ojos, estaba arrepentido, lo había alejado de él, tontamente le había hecho mucho daño.

"¿Sientes qué? ¿El haberme mentido? ¿El haber fingido que sentías amor para conmigo? ¿Sientes el haberme causado tanto daño, L?" SungJong no pudo evitarlo, un sollozo se escapó de su garganta y las lágrimas amenazantes descendieron por sus mejillas como cataratas.

"Lo siento, lo siento mucho... yo nunca mentí, siento haber hecho lo que hice, por favor, sólo perdóname, sé que no quieres verme, que no quieres nada conmigo nuevamente, pero perdóname, aprenderé a vivir con ello aunque duela, yo no te mentí, siempre fui sincero contigo, te dije lo que sentía, te dije que estaba dispuesto a esperarte y a amarte cada día más, te lo dije, SungJong." La voz del visual se escuchaba a duras penas, las lágrimas le impedían el mirar y el obtener una imagen de la reacción del menor. "Lo siento, SungJong... Te amo." Finalizó, su llanto no cesó, se hizo cada vez mayor, se había guardado aquellas lágrimas por una semana completa, no lloraba frente a nadie, no quería mostrar debilidad, mucho menos dolor frente a sus compañeros pero con SungJong, con él era diferente, lo amaba, lo quería, sentía mucho el haber actuado como un idiota aquel día, pero no sabía con exactitud que había pasado en aquella noche, los recuerdos eran nulos, él suspiró y ante el silencio del menor, las lágrimas y su llanto se hizo mayor, ¿Él lo odiaba? Tenía claro que estaba en todo su derecho, pero..  ¿qué haría sin él? Con él era más que feliz, se mostraba a como era realmente, se mostraba como un ser humano, como su verdadero ser humano, no como una máquina más de la industria.

"¿Sabes... cuanto esperé por escuchar un te amo de tu parte?" La voz del menor le hizo volver a la realidad, se levantó del borde y caminó hacia él, necesitaba sentirlo cerca, al menos por una última vez. "Eres un idiota, un idiota al 100% Kim Myung Soo." Sollozos se escucharon nuevamente, su corazón volvió a hacerse pedazos. "Pero así te amo, eres un idiota y así te amo." Finalizó, él no esperó nada más, sintió los brazos del visual rodearlo con fuerza y luego de unos segundos, la suavidad de sus labios haciendo contacto con los suyos, los roces eran rápidos y desesperados, el oxígeno cada vez más disminuía, pero no les importó, se amaban y querían sentirse juntos nuevamente.

"¿Me perdonas? Prometo que no seré un idiota nuevamente." Susurró MyungSoo aún con la voz hecha un hilo, no se había separado de él, sus labios y sus frentes se rozaban constantes, sus respiraciones eran agitadas y sus corazones palpitaban con fuerzas y llenos y rebosantes de alegría.

"Sólo no lo vuelvas a hacer, sólo necesito que me digas lo que recuerdas de esa noche, por favor."

"Te amo, SungJong."