Capitulo cuatro

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—¿Hola? —ví como una mano pasaba frente a mi rostro, pero estaba idiotizada.

—Ho-hola

—¿Tú eres? —mire fijamente la mirada azul, y sentí como si un camión me hubiese atropellado, en mi cabeza solo rodaba la posibilidad de que si tal vez hubiese quedado embarazada, el padre de mi hijo ni siquiera me recordaría.

—So-Soy la niñera —no pude evitar que un ligero tartamudeo se sintiera en mi voz, (Soy la estúpida con la que follaste hace mes y algo cuando parece que eres padre) pero ante todo seguridad, aunque cometí un error que ahora me estaba costando muy caro.

—¡Zoey! —grito antes de darse la vuelta y entrar a la que supongo es su casa dejándome como estúpida en la puerta.

Mi desesperación acompañado de un sentimiento de ira comenzaba a florecer en mi interior, tal vez quería tener un saco de box cerca.

Necesitaba desahogarme.

—¿Eres el reemplazo de Mara? —apareció una mujer alta de un espectacular cabello castaño,  elegantemente vestida.

—Si.

—Bien, adelante —por lo menos ella era un poquito mas cortes, aunque el tono petulante era lo único que tenía su voz—. El bebe duerme en la sala, aquí esta todo explicado —puso una lista en mi mano—. Seguramente Todd no despertara hasta dentro de una hora

Le dirigí una mirada a la sala y todo estaba perfecto, era grande de paredes blancas y sofás negros, y yo parecía chiquitita parada justo en medio.

—¿Amor ya estas lista? —ví al objeto de mis pesadillas aparecer vestido de traje.

—Si —ella tomo un pequeño bolso del perchero de la sala—. Regresamos a las 10 —fue lo último que oí antes de que ambos desaparecieran por la puerta.

No pude evitar el mareo provocado por la sensación de miedo e impotencia, me había acostado con un hombre casado. Y con un hijo. Si era una perra.

Sentí asco de mi misma en ese momento, además de temor, y aún mas ira, me había pasado en mis decisiones justo el día que había decidido ser mas "seria".

Mire el lugar antes de sentarme en el negro sofá, tenia que hacer algo, o mas bien, tenia que olvidarlo. Debía dejar pasar todo, no fue mas que un acoston, él no lo recuerda, ¿porque yo eh de recordarlo?.

Miraba en reloj y parecía que el tiempo simplemente no avanzaba, después de un ataque de hiperactividad recordé por que estaba allí, y que era única y exclusivamente por el pequeño bulto que dormía en el pequeño corral azul en la gigantesca sala. Creo que ver al bebe tan tranquilo me transmitió un poquito de paz, hoy solo debía quedarme un rato y vigilarlo y luego no volvería a verlo a el o a su familia, simplemente todo volvería a ser normal.

9:48 Pm.

Sentía que el reloj no avanzaba, estaba con los nervios de punta, quería salir corriendo, pero no se podía, y enserio rogaba porque el tiempo terminara de irse.

Todd solo había despertado por quince minutos, el suficiente tiempo para tomar una mamila y volver a dormir, y el suficiente tiempo para yo caer cautivada, era un bebe simplemente hermoso, su cabello era castaño y tenía ojos azules, era una combinación rara pero el se veía precioso.

Sentía solo mi respiración en la enorme sala, además de la tensión que cortaba mi propio ambiente claro, todo era una mierda. Pero como dicen por ahí "la vida es bella".

No podía sacar mi móvil y teclearle a alguien, porque aunque necesitaba desahogarme parecía imposible hacerlo por móvil, además que no decidía a quien contárselo y no es que tenga muchas amistades.

Comencé una batalla mental cuando pude escuchar el timbre de la casa, aún faltaban diez para las diez, quizá ya habían llegado y yo podría salir corriendo de ese lugar.

Me levante lentamente y respire un poco tratando de calmarme.

Seguridad ante todo.

Me dirigí a la puerta y gire el pica porte, me sentía en la típica novela en la que actúas a cámara lenta.

—Buenas noches —murmure al ver un hombre de espaldas, la brisa fría del mar estaba congelándome y el hombre de espaldas a mi parecía que igual porque llevaba un gran chaleco.

—Buenas noches.

Esa voz. Era la misma.

Mi mirada voló de inmediato a la de él, su mirada azul, cabello negro, pálido.

Nuestras miradas conectaron y sentí como me paralizaba, era igual a quien me abrió hace rato. Pero no era él.

Mire sus ojos y había confusión, duda, y nervios.

Mier*da.

Solo a mi me pasa.

Espero les guste.

Isa*-*

Mas que una noche [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora