Mas que una noche [EDITANDO]

Capitulo dos

¿Conocen la sensación de miedo? ¿Sí?, pues yo igual creía conocerla.

Tres semanas atrás mi vida era genialmente perfecta, hoy mi vida no es más que una masacre de pensamientos preocupadas con rumbo a lo mismo, todo esta sin sentido rodeado de miedo, de esa sensación que esta todo el tiempo reprendiéndote, y es que se cual fue mi error, y sé que fue grave, y sé que ahora me la juego.

El papel que estaba en mi mano debía sacarme de dudas, debía aclarar todo, o mostrar las consecuencias, y de verdad rogaba por un golpe de suerte.

Creo que mi cabeza solo estaba pensando en ver el gran POSITIVO en la prueba de embarazo, después de una semana con ascos y mareos, pero la palabra “negativo” fue un completo alivio.

–Se les llama embarazo psicológico

– ¿Perdone? –mi mirada se dirigió a la mujer con bata blanca frente a mí.

–Suele presentarse por el deseo de ser madre, o tal vez en tu caso solo estabas un poco asustada y experimentaste todos los síntomas de un embarazo.

Tenia ganas de gritarle que sabia que era un embarazo psicológico, realmente tenia ganas de gritarle a todo el mundo, aunque es innegable que sentí un gran alivio al ver los resultados, por un lado no estaba embarazada, pero por otro aun estaba enojada conmigo misma, había hecho que una noche causara tantos estragos en mi vida. O tal vez mi desorden como persona estaba causando bretes.

Las ultimas tres semanas las había prácticamente botado a la basura, el sentimiento de miedo y culpa es demasiado asqueroso como para dejar vivir la rutina de manera normal.

Camine entre las calles llenas de turistas, me sentía como en una película, tal vez en un musical, hubiese podido fácilmente comenzar a cantar como loca en mitad de la calle, quien sabe entonces bajaría la gente de los autos y se volverían bailarines.

*Adriadne, tienes 20 minutos para estar en mi suite* Tía Megan.

Mierda. Cuando todo parece mejorar aparece la tía Megan, la típica tía chismosa, que siempre, siempre, sera "mejor educadora" por lo que dirá a tus padres que te reprendan por algo.

—¿Tía Megan? —entre en la habitación con un poco de miedo y nerviosismo, no necesitaba mas problemas con mi padre para este punto.

—Adriadne, ¿me explicas que es esto?

Mi mirada se centro en el objeto en sus manos y sentí que perdía el color.

Un tets de embarazo de encontraba en sus manos, marcaba dos rayas.

—Creo que ya sabes que es

—Hablare con tu padre —se dirigió a la salida de la habitación cuando la hale del brazo.

—Megan, es mi vida —la mire enojada—. Tengo 19 años y puedo hacer de mi vida lo que se me venga en gana

—¿Lo que se te venga en gana?. Por todos los dioses. ¿Me dirás que estas embarazada? Y que, ¿piensas abortar? ¿Eso es lo que te venga en gana Adriadne? Se supone que estudias para ser medico, ¿Y que eres?¿Una inmoral?

—Joder tía, que no es el siglo dieciocho.