Mas que una noche [EDITANDO]

Capitulo seis

Una semana completa había pasado después de mi tonto encuentro con Tiago, me sentí una inmadura al llegar a casa, era muy estúpida la manera en la que huí del lugar, y aun más la manera en que actuado, aunque ahora las cosas parecían volver a la normalidad. Tal vez solo necesitaba verlo, y superar esa tontería.

La universidad volvió a ser mi agotante rutina de muchas horas y demasiado esfuerzo, claro en realidad era el esfuerzo que mi mente creaba a través de la flojera.

—Bella, ¿Que te parece una clase de yoga para relajar la mente?

—No tengo animos Pet

—Agh, reina ya debes pararte de esa cama mi amor, ¡Es demasiado!

—Es que tengo sueño permanente.

—Puff, ¿que te parece ir al casino hoy?

—¿Casino? —lo mire por un par de segundos casi dispuesta a decir que era una propuesta muy tentadora pero también un grave error. Pero la remodelación del casino esta genial, un par de juegos rápidos no estarían mal...—. ¿En dos horas en recepción?

—Joder guapa, te compro con casino pero no con yoga —rodó los ojos antes de darme un beso en la mejilla y salir de la habitación.

Mire mi habitación, y este era el momento, el gran momento en el que debía levantarme de la cama, pero eso estaba demasiado imposible, mi romance con el gran colchón era eterno.

«Nena, hoy tengo la noche libre ¡ALELUSHA! Hoy no tengo que ser niñera, ¿tienes algo en mente?» Mara.

«Ole reina, Pet me invito al casino *-* ¿venís?»

«Casinouuu ;/ no tengo dinero ×_×» Mara

«Te estoy invitando, no diciendo que necesitas dinero, en dos horas en la recepción del hotel. Bye.»

Mi trabajo había sido perfecto, tenia el cabello suelto y un espectacular vestido rojo se encargaba de resaltar mi pálida piel, además de los preciosos zapatos que mi padre se había encargado de proporcionarme hace tres días por la mejoría en mi comportamiento, o algo así.

Llamada entrante "Papá x"

—Hola Jack.

—¿Como estas cariño?

—Muy bien pa', ¿tú?

—Bien. ¿Que harás hoy?

—Casino —Sonreí un poco, ya me lo imaginaba rodando los ojos.

—Kira Adriadne Ackerman, cuidado. No quiero que arruines el buen comportamiento que has reinado hasta ahora. ¿Bien?

—¿Que te hace pensar que lo haría papi?

—Que te conozco.