YUNANDO UNIVERSITY-AU

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Las fiestas de inicio de curso, las fiestas en la que todos los estudiantes a partir de segundo año podían asistir libremente si quisieran. Solo que había un par de reglas que por generaciones en ese colegio se habían respetado. Una de ellas la que le menciono Armando a Gines por los chicos de primer año, claro que habían chicos y chicas de primer año que asistían, más que nada eran todos aquellos que ya eran "populares" por redes sociales, nombre o por su apellido; pero eso si, lo que pasa en la fiesta nunca se habla con personas que no hayan estado. Pues digamos, eran fiestas universitarias, alcohol, cigarros, y a pesar de que no querían que se pasara a más habían todo tipo de drogas y unas más fuertes que otras.
La fiesta de inicio de curso suele ser grande pero no tanto como en la que se convierte la ultima del año.

Y es que cuando el anfitrión se decide, el edificio completo se compromete a hacer una gran fiesta, pues cada edificio es distinto y se organiza para hacerlo de la mejor forma.

Lunes, 8:00pm

El celular de Armando comenzó a sonar, le estaban llamando. Cogio el celular y vio que era Juanjo.

—Dime—
—¿Estas en el edificio?—

Parecía haber música del lado de Juanjo pues hablaba un tanto más fuerte y se escuchaba lo que parecía ser "Cielito lindo" eso era una canción mexicana, lo sabia por que cuando era 16 de septiembre en el colegio el grupo de mexicanos y mexicanas se reunían en el patio a celebrar, ponien ese tipo de canciones.

—Aquí sigo, ¿por?—
—Puedes ir a mi habitación y traerme una mochila color azul marino? que esta encima de mi cama—
—¿Y como entro si no tengo llaves?—
—EMILIO BAJALE A LA MUSICA HOSTIA!— Juanjo grito tanto en el celular como parecía a las personas que estaban con él
—Juanjo...—
—VE A LA HABITACION DEL CHINO, TIENE UNA COPIA DE MIS LLAVES—Juanjo hablaba cada vez más fuerte y parecía querer alejarse de la música
—Pero...—
—ES DE MI MISMO PISO, CUARTO 512 C— Juanjo hablaba fuerte tratado por no reír de lo que parecía estar bien, "siéntelo Juanjo!" Se escucho la voz de Gustabo y varias risas. Juanjo colgó y Armando se quedo con la palabra en la boca.

Dejo su celular en el bolsillo de su pantalón y tomo sus llaves, seria mejor que fuera primero por las llaves de juanjo y ya después pasaría por la mochila.

Cuando al fin estaba frente al dormitorio, se la pensó tocar la puerta, Chino era el bajito que le empujo esta mañana, claro que ubicaba a esta persona, era del grupo de amigos de Juanjo; pero nunca se había atrevido a mantener una conversación, sentía que sus personalidades chocarían mucho. Suspiro y finalmente toco.

y nadie abrió.

y volvió a tocar.

y ahora hubiera preferido que no hubiera abierto.

El pelirrojo, bajito por unos centímetros, abrió la puerta sin camiseta y con una toalla en la cadera
—PELO QUE QUIELES COJONEH—

La cara de Armando se tiño de un leve sonrojo, sonrojo por vergüenza de haberlo encontrado así e interrumpirlo.
—Chino, pe-perdón—

Chino se apoyo en su puerta y solo lo observo —Me ehtaba bañando que necesitas almando—

—Ehh, Juanjo me llamo, me dijo que necesita una mochila de su dormitorio y tu tienes una copia de las llaves—

La boca de Yun se abrió en una expresión de "aaaah ahora entiendo"

—Pueh, pasa, debo buscal las llaves— Dejo la puerta abierta y entro rumbo a su habitación y sus cajones.

Armando asintió y paso detrás de Chino, tratando de no mirarlo para no incomodarlo o algo por el estilo, pero parecía no importarle a Yun.

No lo siguió más cerca de su habitación, solo se quedo ahí apreciando como era la sala principal, un par de sofás grises, discos de vinilo pegados como decoración, en donde una de las paredes estaba completamente llena de fotos polaroid, una mesa frente a los sillones que tenia encima revistas de motos y otros libros.
Camino hasta un mueble de madera que tenia unas fotos y pequeñas figuritas de varias cosas, con posiblemente valor simbólico, dedujo Armando.
No quiso husmear más en ese mueble, así que se dirigió mejor a la pared con fotos. Fotos de todo tipo, en algunas solo salía la persona y tenia su nombre abajo, en otras el chino estaba ahí, fotos al azar a vasos de fiestas, cigarros o el simple cielo.

—Acá están— dijo el chino regresando a donde estaba

Armando se dio la vuelta y sonrió levemente —Gracias— Tomo las llaves que le daba Yun —Bueno, eso era todo entonces; te veo al rato—

El chino asintió

Armando se dirigió a la puerta siendo seguido por Yun

Se despidieron una ultima vez y cerro la puerta.
Se dio la vuelta quedando a espaldas de la puerta ahora cerrada, por alguna extraña razón su corazón latía rápidamente, sus mejillas estaban levemente rojas y su respiración un tanto desigual. Pero lo que no sabia, es que la persona al otro lado de la puerta se encontraba de la misma forma.

10:45 pm

Armando se terminaba de poner un poco del perfume que siempre usaba, se coloco su chaqueta, tomo su billetera y su celular, también la mochila azul de Juanjo que resulto tener diversas botellas.

salió de su habitación y cerro la habitación.

Paso por el patio de su edificio, y por el Patio principal, camino al edificio de criminología. De echo, ya se veían a algunas chicas pasar de edificio en edificio, pero tratando de ser discretas; los corporativos del colegio en general sabían que se hacían este tipo de fiestas, pero no sabían exactamente lo que sucedía dentro de ellas.

Finalmente, estaba en el edificio, se caracterizaba por tener salas de estar un poco más amplias por cada piso, y barandillas en las que podías ver ya a diversas personas de aquí para allá y hasta pequeñas fogatas en medio de las salas.

Subió al piso 4 en donde se estaría dando la fiesta finalmente.