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20/02
11:10 am

Era domingo, la carrera del día de ayer sábado habia dejado como ganador a Yun, tal como estaba estimado.
Al final había aceptado ir con Tonet al club, y a pesar de que dijo que no tomaría en exceso, con unos cuantos tragos ya no recordaba lo que había pasado la noche anterior.

Despertó con un gran dolor de cabeza, necesitaba una maldita aspirina, un té y algo que le bajara la resaca.
Se sentó en la cama, y talló sus ojos para poder ubicar en donde estaba.

Estaba en su cama y no tenía la menor idea de cómo había llegado ni quien le había traído.

Pero todo parecia estar en orden y eso era lo que importaba.

Busco su celular que estaba entre las sabanas, completamente descargado, por lo que se puso de pie y lo conecto al cargador. 
Camino hacia el baño arrastrando sus pies. Se paro frente al espejo del baño y se quito la camisa, observando si tenia alguna marca o algo indeseado, pero todo estaba en orden, asi que se permitió suspirar de manera aliviada.

Cuando se termino de duchar, se puso algo cómodo y camino hacia su cocina, desayunaría algo liviano para vestirse apropiadamente e ir a la cita en el estudio para continuar el tatuaje.

Hizo todo lo más rápido que pudo, desayuno, se vistio, y tomo las llaves de su moto y su celular para apurarse a ir a la cita.

Salio de su dormitorio como alma que llevaba el diablo, no reviso su celular hasta que llego al estudio y estaba en la sala de espera, esperando su turno.

Abrió la bandeja de su celular y vio los muchos mensajes que tenía, llamadas perdidas y mensajes de voz.
Lo primero que hizo fue entrar a la conversación con Armando y responderle a todos esos mensajes con un:

—Estoy vivo, no te preocupes

El mensaje fue leído casi al instante y entro una llamada, Chino contestó rezando a cualquiera que le escuchara que por favor no le regañara, su cabeza se sentía a explotar y lo que menos quería era gritos.

—¿Donde te fuiste a meter tio?— Hablo Armando del otro lado de la línea, que para su suerte le hablo serio pero en un tono bajo

—un club—

—Tu voz está en la mierda, ¿Qué tomaste?—

Con solo escuchar la pregunta, en la mente de Yun ya tenia una imagen del ligero ceño fruncido del mayor y la mirada de desaprobación que seguramente le hubiera dado.

—No se, no me excedí—

Armando bufo —Seguramente, tu voz comprueba todo, toma un té de miel o algo, por favor—

—Lo hale—

—¿Sabes la desesperación que tuve porque no respondías? Una cosa es no responder en la noche, cosa que entiendo, porque estás en medio de la fiesta, pero otra muy distinta no responder en las mañanas—

A juzgar por el tono de Armando podía pensar que estaba rodeado de personas o en un lugar en el que no podía elevar la voz. Y agradecía eso.

—¿En donde estas?—

—En el estudio, ¿tu?—

—Mi papá me arrastro a supuestas juntas importantes—

"Gracias señor Grúas" agradeció Chino en su interior.

—Debo colgar, en cuanto salga voy para allá—

—Ehta bien, no te preocupes—

—Adiós, y cuídate por favor—

YUNANDO UNIVERSITY-AUWhere stories live. Discover now