YUNANDO UNIVERSITY-AU

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28/02

—¿Ya le dijiste a Yun?— pregunto la pelirroja quien apretaba una pequeña pelota anti estrés entre sus manos.

—No, bueno, sabe toda la historia y lo qué pasó, pero no sabe que Jayden lleva una semana aquí en los santos— respondió Armando con calma mientras terminaba de doblar unas camisetas de la pelirroja.

Se encontraban en el dormitorio de Michelle, y Armando como buen amigo que era, le había ayudado a doblar la ropa recién lavada.

—¿No sería bueno decirle?—

—No lo se, lo estuve pensando pero no lo creo muy conveniente— regreso con la chica y se sentó en la cama —Esta muy concentrado en eso de las carreras y no quiero que sienta algún tipo de presión por mi parte—

—¿Por que te intentas guardar todo? Hombre, tener una pareja es para que él igual te sirva de pilar en momentos como estos, ¿Dónde quedo la sinceridad que tanto le exigías?— le tiro la pelota a lo que el chico la agarro antes que chocara con él.

—Bien, le dire de Jayden— le tiro la pelota de regreso a lo que la chica atrapo —Y a Jayden de Yun—

—¿que?— fruncio el ceño —¿No le haz dicho a ese imbécil de tu nuevo imbécil?— Le tiro la pelota de regreso y al tomarlo desprevenido le dio en el hombro —¡Es que eres tonto! es por eso que te sigue buscando—

Armando se tomo el hombro en donde recibió el golpe —Hey, te ayude a doblar la ropa—

—No intentes cambiar el tema Gruas, resultaste ser más perra que Julia en sus años de juventud— Exclamo la pelirroja

Armando soltó una carcajada, tomo una almohada y se la tiro a Michelle —No hables así de Julia!—

Michelle no se quejo por la almohada, solo la tomo entre sus manos —Arma concéntrate!— le repitió la chica y se puso de pie para tirarle con más fuerza la almohada —¿Estas intentando algo con ese imbécil?— pregunto bajando un poco la voz.

La almohada choco con su cara y la quito rápidamente —¡Que asco! No—

Michelle se recostó a su lado —¿Entonces?—

—No se, simplemente no le he dicho, pero no busco nada de ninguna manera, estoy aprendiendo a tolerarlo, ya controle mis ganas de querer estrellarle un puñetazo en la cara—  le miro

—Entonces..¿lo perdonaste?—

Armando puso una pequeña mueca —No sé si llamarlo perdón, esta vez que hemos hablado ni siquiera tocamos ese tema—

Les interrumpió el sonido de la puerta principal abriéndose, antes de que alguno pudiera hablar o levantarse, la voz de Freddy se escuchó.
—MIIICH, aaaamoooor ¿estas aquí?—

Armando volteo a ver a Michelle quien se sonrojó levemente al escuchar como le llamo Freddy.
—Estoy acá— respondió en voz alta.

Escucharon los pasos acercándose a la habitación, empujó la puerta de la habitación abriéndola y topándose con los dos chicos.

—neno, ¿Qué haces aquí?— pregunto entrando a la habitación

—Vine a ver a mi amiga, ¿Qué haces tú aquí?—

—Vine a ver a mi novia—

Para cuando se dieron cuenta, Freddy se había quitado los zapatos y se metió entre los dos para separarlos y acostarse en el medio.