Padre sobreprotector....

Capitulo #12

-¡Tara necesito mi computadora ahora mismo!- grito mi padre desesperado desde la otra habitación.

-Si, si, ya voy.- bufe rondando mis ojos y mire a mi abuelo.- abuelo, lindo, cariño.- hable entre dientes intentado no ser grosera con el aunque estaba apunto de gritar y salir corriendo de ahi.- Las. Computadoras. No. Tienen. Pestañas.-hablé quitándole la computadora de las manos.- Abre los ojos ya, no necesitas hacer eso.- no pude evitar reír al verlo aún con los ojos cerrados.

-No hasta que la señorita me diga.- dio una risita.

-¡Tara!- se escucho otro grito desesperado de mi padre.

-Adiós abue, si necesitas algo solo grita.- finalmente me rendí y deje que hiciera lo que quisiera. En toda la casa se escucho un grito y un gemido de Jake.- Como todos en esta casa.- balbucee rodando mis ojos y cerré la puerta saliendo de ahí mientras caminaba rápidamente hacia la habitación de mi padre.- Aquí esta tu computadora.- se la entregué cansada.

-Gracias linda.- sonrío y tomó la computadora en sus manos.- como en unos pocos días en tu cumpleaños te voy a regalar esto.- entro a una página.- ¡taran!- sonrió feliz señalando la pantalla.

-Ow, que lindo papi.- dije como una niña pequeña mirando la pantalla y comencé a leer en voz baja.- Súper regalo.. Bla, bla, bla... Para su hijo.. Bla, bla, bla... Chip rastreador.- fruncí el ceño al leer eso.- ¿¡QUÉ?!- chille mirándole con mis ojos como platos. Ahora me quería poner un chip rastreador, genial.

-¿No te encanta?- dijo emocionado mirándome con una sonrisa feliz.

-¡No!- chille mirando como se colocaba el chip. Era toda una operación muy delicada y el chip tendría una luz roja que haría mi cabeza brillar cada vez que mi padre, o alguien, me buscaba por el chip. No quería eso para mi cumpleaños. ¿Qué chica de 17 años quiere un chip rojo en la cabeza para su cumpleaños?

-Pero si es fantástica la idea.- hizo puchero mirándome.

-¡No quiero un chip rojo en la cabeza para mi cumpleaños número 18!- me queje cruzándome de brazos con el ceño fruncido haciéndome la "dura"

-Pero si la cabeza te brillara de color rojo.- dijo como si fuera algo bueno.

-¡Eso es, no quiero que mi cabeza sea un árbol de Navidad todo el año!- de sólo imaginarlo me daban escalofríos. ¿Quien quiere un chip rojo en la cabeza que alumbre mil veces al día. ¡Todos pensarán que soy un alíen que los quiere comer!- eres demasiado sobreprotector conmigo.- dije finalmente. Nunca le había dicho nada de eso pensando en que se iba a sentir mal pero ya me tenía harta.

-¿Yo? ¿Sobreprotector?- coloco una mano en su pecho "indignado"-Ahora no puedo ponerte un chip rastreador, porque entonces ya soy "Sobreprotector"- hizo comillas con sus dedos rodando los ojos.

Le voy a matar.

-¡Exacto!- chille al límite.- ¡Los padres n.o.r.m.a.l.e.s no le colocan un rastreador en la cabeza a su hija!- intenté calmarme pero me dio más cólera.- ¡más si su hija tiene 17 años!- grite chillando al límite.

-¡DIJE QUE QUIERO UNA EPIDURAL!- grito Jake con la voz entrecortada.

-¡DEJA DE SER UNA NENA!- se escucho un grito de mi abuelo. Todos comenzaron a reír demasiado fuerte y no pude evitar reír con ellos.

-¡No se rían!- Apuesto a que esta haciendo puchero como un bebé pequeño.- ¡Auch!- se quejó y otro grito ahogado de su parte se escucho por toda la casa.- ¡Travis eres un grosero!- fruncí el ceño al escuchar pasos rápidos y fuertes.- no te atrevas a hacer e...... ¡TRAVIS!- grito y más pasos rápidos con carcajadas se escucharon mientras mi padre estaba con una sonrisa ilusionado por el chip rastreador que me iba a regalar.