Arma de doble filo

43 1 10
                                    

La fiesta seguía su curso, Izumi fue con sus padres y para la suerte de Hiro, si la buscaban. El niño la quedó esperando mientras ella hablaba con ellos.

—¿Hay algo que quieras contarme?—escucho a Natsuki detrás suyo—

Se dio vuelta y ella lo miraba con una ceja levantada.

—No, ¿Y por qué me miras así?—frunció el ceño de forma confundida—

—Digamos que se tu secreto. Aunque francamente no fue muy difícil de saberlo.

—¿Que? ¿De que estás hablando?

Se acercó aún más a él hasta que pudo susurrarle al oído

—Te gusta Izumi.

Hiroshi sintió como si el mundo se le cayese, sus mejillas se tornaron extremadamente rojas y comenzó a sudar frío.

—¿Que? ¿De que hablas?—preguntó nerviosamente—Estas confundida... muy confundida.

—Por favor Hiro, se nota a kilómetros. Además, recuerda que en mi familia nos enseñan a leer el lenguaje corporal.

El peli negro no sabía para donde mirar y sabía que estaba totalmente rojo por el calor que sentía en su cara.

—Ya, ya, cálmate, no dire nada. A menos que me hagas enfadar.

—Eres una...— exclamo enojado—

—Y ahí está mi confirmación definitiva. Si no te interesase mi amiga, no te pondrías así.

Hiro ya no sabía que hacer hasta que simplemente decidió mirarla de mala manera, darse la vuelta e irse.

—¡Tomare eso como un "esta bien"!—le gritó Natsuki al Watanabe mientras se alejaba de ella y sonrió para sí misma —
.
.
.
Izumi por su parte seguía tomándose unas cuántas fotos más, aunque francamente ya estaba harta. Había unos fotógrafos especialmente pesados, pero supuso que era lo normal. Sin embargo sus padres no lo veían de la misma manera y la alejaron de allí.

—¿Que sucede?—pregunto confundida—

—Nada, tan solo que sabemos que ya debes estar cansada de tantas fotos, así que es suficiente por hoy.—respondió su madre—

—Ve con tus amigos si quieres, ya no es necesario que estés aquí con nosotros—afirmó zuko— ve y diviértete, no todo es formalidad.

La niña sonrió y le hizo caso a su padre. La verdad lo necesitaba. Fue a buscar a Hiroshi, ya que sabía que no se fue muy lejos. Camino un poco pero no lo encontró y siguió buscándolo.

—¿A quien buscas?—pregunto una voz familiar detrás de Izumi—

—Ah, Bumi, no te había visto. Buscaba a Hiroshi, bueno, Hiro

La cara de Bumi se volvió seria, ¿por que lo buscaba?

—ah, ¿para que lo buscas?

—Necesito hablar con el, es un tema importante... de ambos.

—Entiendo. Cuando termines de hablar con el... ¿te gustaría dar un paseo por los jardines?

—Supongo que si.

—Bien, ve y habla con el, yo te esperare allí.

El hijo del avatar quería sacarse lo más rápido posible a ese niño, y de paso podía averiguar más de su relación con Izumi.

—De acuerdo, nos vemos allí. Quizás en unos diez o quince minutos.

—Está bien—dijo con felicidad—

El Legado De IzumiWhere stories live. Discover now