Capítulo 1

26.3K 1.3K 243
                                    

Tras un día horrible, lo mejor que puedo hacer, es agarrar una manta antigua y salir a mi jardín trasero para leer un poco aprovechando que es uno de esos extraños días en los cuales no llueve en el estado de Washington.

—Camila, ¿estás bien? —Pregunta mi madre cuando ve que no digo nada mientras hago mi camino hacia el jardín. Pese a haber preguntado, mi madre se encoge de hombros, agarra su chaqueta, y sale de casa sin decirme nada más. Seguramente no la vea hasta dentro de dos días dado su trabajo y sus turnos dobles.

Suspiro y agarro un clásico de mi biblioteca, me tumbo boca abajo y comienzo a leer, perdiéndome rápidamente en una de mis historias favoritas. Me quedo bastante tiempo en la misma posición hasta que, entre la línea de árboles que da a mi patio trasero, veo algo moviéndose. Es normal que en la Reserva donde vivo, los animales caminen con más seguridad, pero es raro verlos tan cerca de una casa.

Cuando mi mirada no capta nada extraño, me encojo de hombros y vuelvo a leer, pero rápidamente me doy cuenta de que acaba de anochecer. Levantándome de la manta, que ya está un poco mojada por el rocío que hay en la hierba, vuelvo al interior de mi casa. Subo las escaleras, y cuando entro en mi cuarto, me quedo de piedra.

—¿Hola? —Pregunto un poco sorprendida porque, mi vecino, el cual ni conozco, está oliendo mi almohada con la cara enterrada en ella. Se sobresalta cuando me escucha, y sus mejillas se tornan rojizas. —Eres... ¿Eres uno de los Clearwater? ¿Qué demonios haces en mi cuart-

Me callo de golpe cuando el chico cae de rodillas en mi alfombra, mirándome tan fijamente, que me hace sentir incómoda. Comienza a hablar con la voz suave y entrecortada, como si hubiera hecho mucho ejercicio y le faltase el aire:—¿Quién eres? Nunca antes te había visto.

—Soy Camila Haynes. Vivo aquí desde... Siempre. La pregunta exacta es, ¿qué haces en mi casa, en mi cuarto, oliendo mi almohada como un pervertido? —Pregunto, comenzando a cabrearme por la intromisión. El chico parece un poco avergonzado.

—Soy Seth Clearwater, somos vecinos pero, ya sabes, como las casas están alejadas unas de otras, nunca antes te había visto. —Dice Seth rascándose la nuca nerviosamente, luego se acerca unos pasos, besa mi mejilla, y sale corriendo de mi cuarto al saltar por la ventana. Me apresuro para asomarme y ver que no se ha quedado pegado al suelo del golpe, pero no hay nadie, y además, la oscuridad no ayuda mucho para ver bien donde está ese chico extraño.

NUNCA ANTES  |SETH CLEARWATER|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora