𝐓𝐞𝐝𝐝𝐲 𝐁𝐞𝐚𝐫 • 𝐇𝐲𝐞𝐰𝐨𝐧

⋆ ˚｡⋆୨୧˚ epílogo ˚୨୧⋆｡˚ ⋆

⋆ ˚｡⋆୨୧˚i love you˚୨୧⋆｡˚ ⋆

Dicen que cuando algo o alguien te gusta hasta tal punto en el que logras disfrutar cada momento del día, es cuando incluso pierdes la noción del tiempo que, ni siquiera te das cuenta que ya estas al final de ese día. Bueno, aquello no es diferente para Hyejoo y Chaewon, quienes desde que habían formalizado su relación sentían que el tiempo se detenía cuando estaban juntas, cada uno de los recuerdos que generaban se volvían más y más importantes para ellas, no importaba si no se veían muy seguido porque el tiempo que no pasaban juntas lograban recuperarlo en tan solo un día.

— ¡Hyejoo! — Exclamó la rubia, rodeando a su novia por la espalda con un abrazo mientras depositaba varios besos en su mejilla.

>> ¿Estás muy ocupada ahora, boo?

— Para ti nunca estoy ocupada, wonnie —. Chaewon sonrió ante la respuesta de su novia, procediendo a colocarse frente a esta con las manos en su espalda y sonriendo con los labios rectos.

— Quiero que me acompañes a un lugar —. La azabache asintió con una sonrisa ante las palabras de su novia, quien entrelazó sus manos suavemente y comenzó a guiar a la menor hasta la parada de autobús.

— Wonnie, te quiero pero ¿por qué estamos aquí?

— Lo que te quiero enseñar queda un poco lejos, ten paciencia ¿si? Te aseguró que cuando lleguemos valdrá la pena todo el viaje.

— Esta bien, de todas formas cuando estoy contigo es como si el tiempo dejara de avanzar, ¿no te sientes igual?

Chaewon asintió.
Antes de que la azabache pudiera decir algo mas, los labios de su novia la tomaron por sorpresa, pero aquello no fue excusa para que Hyejoo no correspondiera el repentino beso.

—¿Ya llegamos? — Hyejoo frotó sus ojos con sus manos cual niña pequeña en cuanto sintió como su novia intentaba despertarla moviéndola suavemente.

— Algo así, boo, tenemos que bajarnos —. Chaewon no pudo evitar soltar un pequeño aw ante el puchero que había hecho su novia inconscientemente.

>> Vamos~ ya estamos casi en la hora perfecta para lo que te quiero enseñar.

— Voy~ ¿Qué tanto tendremos que caminar? — La rubia le dio un ligero, pero suave, golpe a su novia en el hombro al escuchar aquella pregunta.

>> Aish, ¿por qué tanta agresividad con tu bebé?

— No exageres, además te lo merecías por quejarte de que es muy lejos.

— ¿cuándo me queje? Solo pregunte cuanto faltaba.

— Es lo mismo. Pero da igual, cuando lleguemos no te arrepentirás de haber hecho todo este viaje.

Hyejoo no dijo nada, solo agarro la mano de su novia para bajar del autobús y seguirla hasta el lugar que le había estado hablando durante todo el trayecto.

— ¡Llegamos! — Hyejoo solo miro a su novia confundida, no estaba entendiendo porque la mayor se había emocionado tanto al llegar hasta aquella pequeña playa con algunas cuantas personas.

>> ¡Ven! Lo que te quiero enseñar esta por aquí

La azabache hizo lo que su novia le pidió y, ambas comenzaron a caminar hasta una parte de la playa completamente desierta en donde la vista era mas que perfecta y podías disfrutar de tiempo de calidad con esa persona especial.

— ¿Te gusta? Descubrí este lugar el otro día cuando vine con mi familia y, tal vez suene muy cliché, pero pensé que seria perfecto para ver la puesta del sol juntas sin nadie que nos moleste —. Chaewon intentaba descifrar la expresión en el rostro de su novia cuando esta finalmente abrió la boca para responder a su pregunta.

— Es hermoso, wonnie. De verdad, es un lugar precioso, pero ¿sabes que lo hace aun mejor? — Chaewon negó, siendo atraída hacia su novia en un pequeño movimiento que la mas alta había generado.

>> Tú. El simple hechos de que te tomaras la molestia de encontrar este lugar y quisieras compartirlo conmigo, lo hace perfecto, aun si hubiera sido en el pasillo de un hospital, seguiría siendo el momento perfecto porque te tengo conmigo.

Chaewon río.
Ambas jóvenes no dijeron absolutamente nada por unos cuantos minutos, no lo necesitaban, después de todo con solo dedicarse unas cuantas miradas era suficiente para entenderse entre ellas.

— Te Amo, Choi Hyejoo. No sabes cuanto quería decir esas cuatro palabras juntas, y este fue el momento perfecto para decirte que te amo, te amo como nunca pensé que amaría a alguien, te amo y te seguiré amando cada día de mi vida igual que la primera vez que nos conocimos ¿recuerdas?

— La recuerdo. ¿Alguna vez imaginaste que estaríamos juntas gracias a un pequeño oso de peluche?

— No. Pero le debo mucho a ese peluche, gracias a el pude conocer a la chica mas dulce, tierna y linda que jamas hubiera imaginado aceptaría ser mi novia

— ¿Así? Entonces yo también tengo que darle las gracias a ese peluche por poner en mi camino a una hermosa princesa de cabellos dorados que con solo su presencia logra que las mariposas en mi estómago se pongan como locas.

Ambas rieron por sus palabras antes de volver a sumirse en otro silencio, hasta que la azabache decidió romperlo.

— ¿Wonnie?

— ¿Qué pasa, boo?

— Te Amo, se que es algo repentino y aun somos muy jóvenes pero, ¿aceptarías quedarte a mi lado hasta nuestros últimos días?

— No lo se, ¿vas a querer más al oso de peluche que nos unió?

— Jamás podría querer mas a un peluche que a ti, y eso lo sabes mejor que nadie, así que ¿Qué dices?

Chaewon fingió pensarlo unos segundos antes de darle una respuesta a Hyejoo.

— Si, Choi Hyejoo, si quiero estar a tu lado hasta el último día de nuestras vidas —. Aclaró la rubia, sellando su respuesta en un cálido y tierno beso con su novia, el cual estaba lleno de todos los sentimientos que tenían la una por la otra e, incluso, de los momentos que habían vivido juntas para llegar a donde se encontraban ahora.