18. El siguiente paso

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La noche estaba intensa y la luna hermosa. Se escuchaban fuegos artificiales a lo lejos y Hyukjae había salido a verlos. Estaba sentado en un pequeño jardín bajo el departamento de los chicos. Ahora tenía nuevas memorias, más gratas y especiales. Se encontraba jugando con el collar que acababa de recibir, cuando Hae se sentó a su lado.

—Son bonitos, creo que es lo único que admiramos con alegría mientras estalla. Mi padre nos llevaba a la feria en año nuevo, a veces había fuegos artificiales, siempre le emocionaron muchísimo.

—Lamento mucho que tus padres no hayan podido venir hoy, vi tu cara cuando me lo contaste, te hacía ilusión— comentó Hyukjae.

—Sólo mi madre. Si mi padre viniera, me desmayaría del miedo— Hyukjae lo miró— Murió cuando estaba en el instituto, cáncer en última fase. Un año no fue suficiente para despedirme.

Hyukjae volvió su mirada al frente y cerró los ojos asimilando la noticia, el corazón se le había estrujado. Ninguno agregó nada más, no había mucho que decir.

— ¿Por qué no pasas navidad con tu familia?— preguntó Donghae.

—Mis padres no son personas que puedas satisfacer fácilmente, ir a verlos significa llevar colgada una presea— suspiró— no tengo ninguna.

— ¿Cómo?

—Odian que trabaje en la revista, creen que desperdiciaron el dinero y el tiempo en mis estudios universitarios. Quieren que me dedique a otra cosa. Mi hermana se graduó de la mejor universidad, tiene un par de posgrados. Intenté mucho, pero me dejó atrás, nunca pude alcanzarla. Hace poco se casó, su esposo es lo mismo, ambos son tan exitosos y famosos.

—Pero son padres de los dos, deberían quererlos igual— refunfuñó Donghae.

—Deberían hacer muchas cosas, pero son muy poco flexibles. Siempre les di todo lo que querían, hice todo lo que me dijeron y cuando ya no pude me miraron mal.

—Lo siento mucho, Hyukjae.

—Está bien, desde hace mucho entendí que no podía contar con ellos. No me afecta, he sorteado mi vida solo y no ha salido tan mal. Algún día reuniré el valor de ir a despedirme como se debe. Mientras tanto, estoy bien así.

Escuchar provocó que Donghae se pusiera triste, no podía concebir una familia así, él, que creció rodeado de amor, no lo entendía. ¿Por qué alguien se rehusaría a estar orgulloso de alguien como Hyukjae? Lo miró rápidamente y se sentó más cerca, después añadió

—Mi padre amaba a The Beatles, eran de su mera época. Por eso me gustan tanto, me recuerdan muchos momentos junto a él — Donghae suspiró.

— ¿De verdad?— preguntó Hyukjae con sorpresa— Vaya, no me lo hubiera imaginado. Ahora me siento incluso más orgulloso de haber elegido ese regalo para ti.

—Me sabía todas sus canciones favoritas en la guitarra, los fines de semana, cuando tenía tiempo, nos poniamos a cantar en el jardín de nuestra antigua casa.

—Espera... ¿sabes tocar guitarra?— preguntó Hyukjae sorprendido.

—Sí, hace tiempo que no toco, pero sabía hacerlo bien.

—Eso es genial— Hyukjae quería pedir un demostración, pero no sabía que tan prudente era, mientras se mordía los labios decidiendo si lo hacía o no...

— ¿Quieres oír un poco?— dijo Donghae, Hyukjae asintió de inmediato— pero tiene tiempo que no toco, así que no me apedrees si sale mal, ¿vale?

Hyukjae negó con la cabeza. De todos en el mundo, él sería quien menos se atrevería a hacer algo parecido...

—Claro que no, nunca lo haría.

The Lucky Ones [EUNHAE]Where stories live. Discover now