Batterer 『TaeKook』

19

Ambos miraron atentos a la mujer que entró entonces en la sala. No había ni rastro del ginecólogo de antes y Jungkook se tensó. Si no estaba, era porque ya no necesitaba uno, ¿verdad?

—Tengo los resultados. —Anunció ella, señalando a Taehyung despreocupadamente. —¿Usted es el otro padre del bebé?

Era como si no notara que Jungkook iba a morir de un ataque cardíaco si no obtenía respuestas.

Taehyung asintió.

—Señor Jeon, ¿cuándo fue la última vez que le hicieron una exploración durante sus revisiones?

Jungkook balbuceó un par de incoherencias antes de dar con la respuesta.

—La semana... pasada, creo. —contestó. —Pero no comprendo qué relevancia tiene con...

Ella le interrumpió con un gesto de la mano. Parecía ensayado, como si no necesitara más información que la obtenida y no quisiera escuchar dudas, acostumbrada a hacerlo siempre. Escribió un par de cosas en un bloc de notas que Jungkook supuso que sería su historial médico y luego suspiró.

—Su sangrado se debe a una pequeña irritación en los vasos del cuello uterino. —dijo, guardándose el bolígrafo en la bata blanca. —Es algo completamente benigno, nada grave, suele pasar tras esa clase de exploraciones. Me pondré en contacto con su ginecóloga para informarle.

Jungkook la miró con la boca abierta mientras ella continuaba.

—Tiene la tensión un poco alta, así que le recomiendo que esté tranquilo y coma saludable durante el resto de su embarazo para evitar posibles desperfectos. Si lo de hoy vuelve a ocurrir hable con su doctora, pero no dude en volver a venir si el sangrado se incrementa o si experimenta otros síntomas.

Vale.

Vale, bien, sí, sólo... Sólo era una pequeña irritación y tensión alta. Nada del otro mundo, al parecer.

Si abría la boca iba a llorar.

—Entonces... —Taehyung lo dejó en el aire, a su lado. La mujer sonrió por primera vez.

—No se preocupe, la niña está bien.

Jungkook sintió su corazón detenerse.

—¿La... niña?

Definitivamente iba a llorar.

.

Las mantas eran suaves y olían a Taehyung cuando se deslizó entre ellas, acurrucándose automáticamente para proteger su vientre con el cuerpo. Estaba más tranquilo, pero aún tenía el susto dentro del cuerpo. No sentía que su bebé estuviera completamente a salvo ahora que había experimentado lo que se sentía al creerlo perdido, pero había decidido enfocarlo de manera positiva.

Su bebé estaba bien.

Su bebé, que iba a ser una niñita preciosa y que se convertiría en una mujercita preciosa y a la que iba a mimar tanto, tanto, tanto...

Era increíble cómo una noche de pesadilla podía convertirse en un sueño.

—¿Estás cómodo?

Taehyung salió del baño vestido con su pijama de cuadrícula. Eran más allá de las cinco de la madrugada, habían tenido que esperar en el hospital a que la tormenta de primavera amainase para poder conducir de vuelta a casa. En silencio, pero con sonrisas en el rostro.

Jungkook le miró de arriba hacia abajo, sintiéndose ya un poco somnoliento.

—Sí. —dijo en voz baja. —¿De verdad no te importa que duerma contigo hoy?