〖Misión ser pareja ✧ Amajiki Tamaki〗

⇝10; Película

— Ah... Moriré de aburrimiento. — Susurró la chica de tercer año mientras se tiraba al sofá de la sala común bajo las miradas divertidas de sus compañeros de clase. — ¡Moriré!

La clase "B" simplemente negó debido a su exageración, ellos adoraban esos benditos días libres, pero T/n los odiaba con su alma.

¿La razón?
No podía ver a su elfo.

— ¿Por qué no sales con Amajiki-san? — Preguntó uno de sus amigos y ella soltó un grito de frustración contra el sofá.

— Tiene trabajo. — Respondió de malhumor.

— ¿Eh? Pero oí de Bakugō-chan que hoy no trabajaba o eso le había dicho Tōgata-san. — Respondió otra y T/n alzó la mirada.

— ¿La hermana de Bakugō-kun dijo eso? — Preguntó con cierta esperanza en sus ojos.

— "Ese maldito extra no deja de seguirme ¡Y me cuenta su puta vida! ¿Por qué me interesaría saber que su mejor amigo no trabaja mañana? ¡Lo odio!" — Imitó una voz gruñona parecida a la de la Bakugō de segundo año. — Eso dijo.

— A veces me pregunto si Mirio es masoquista, aún no entiendo por qué persigue tanto a Bakugō-chan. — Susurró por lo bajo hasta que reaccionó. — ¡Eso significa que puedo ir con mi hermoso novio! — Se levantó de golpe y se puso sus zapatos. — ¡No me extrañen!

Y dicho eso salió corriendo a toda velocidad dejando a la mayoría de su clase envueltos en risas.

— ¡T/n! ¿Buscas a Tamaki? — El que abrió la puerta del dormitorio fue Mirio con una sonrisa.

— Sí, pensaba que podríamos pasar algo de tiempo juntos. — Sonrió y él asintió con una amplia sonrisa.

— ¡Perfecto! Estábamos viendo una película ¡Pero mejor iré con Bakugō-chan! — Asintió contento con sus palabras y se puso sus zapatos rápidamente mientras comenzaba a alejarse.

— ¡Deja de acosarla o te matará! — Gritó T/n recibiendo una carcajada del rubio que corría a toda velocidad. — Bakugō-chan... Por favor no lo explotes.

T/n después de pedir porque el mejor amigo de su pareja no muriera decidió entrar al dormitorio encontrando a su querido elfo abrazando una almohada mientras se notaba más que asustado y pegaba leves chillidos.

— ¿Tamaki?

— ¡N-No me mates!

Al oír ese grito T/n reprimió una risa y se sentó a su lado comenzando a acariciar su cabello así notando como este de a poco abría sus ojos y al verla simplemente se aferró a su torso mandando a volar la almohada.

— E-El demonio, v-vendrá por mí. — Susurró con leves temblores mientras enterraba su rostro en el cuello de su novia.

— Ya~ No dejaré que te toque ni un solo cabello. — Comenzó a darle caricias en el cabello mientras pausaba la película de terror. — ¿Cómo puede ser que Mirio te hiciera ver esto? Ojalá que Bakugō-chan lo explote aunque sea un poco. — Susurró con cierta molestia hacia el rubio.

— N-No, yo quería ver esta película.

— ¿Eh? ¿Tú? — Lo miró confundida y entonces él se alejó un poco y comenzó a jugar con sus dedos. — ¿Tamaki...?

— Q-Quería ver contigo la secuela en el cine, o-oí de Nejire que te gustaría ir a verla, entonces pensé que si gritaba en el cine parecería un cobarde... A-Aunque lo soy. — Elevó con cierto temor la mirada. — Q-Quería ser yo el que te abrazara cuando tuvieras miedo y p-por eso quise ver la película hasta que no tuviera miedo.

— ¿Cuántas veces la has visto?

— C-Casi diez, p-pero ¡La seguiré viendo hasta que no grite!

T/n miró con cierta ternura a su novio, Dios... ¿Quién lo mandaba a ser tan tierno?

— Si quieres en vez de ir a ver esa película podemos quedarnos y ver un documental de mariposas. — Ofreció y Tamaki rápidamente la miró con ilusión en sus ojos.

— P-Pero querías ver...

— No, en realidad sólo quería pasar tiempo contigo. — Sonrió y lo abrazó así sonrojando al Amajiki.

— ¡T-T/n!

— Sólo quedémonos así... Sólo un poco más ¿Sí?

— P-Perdón por no poder ver una película de terror contigo... ¡D-Dejaré de ser tan miedoso!

— Dije que no pasa nada, me gusta que seas así, no quisiera que cambiaras por algo como una película. — Elevó la mirada aún abrazada a su pecho y sonrió. — Te quiero, Tamaki.

— Y-Yo también, g-gracias por quererme. — Sonrió temblorosamente con un gran rubor en sus mejillas así haciendo que T/n frunza el ceño.

— Maldición... ¡Eres demasiado adorable! — Se impulsó y juntó sus labios en un suave beso. — ¡Te comeré a besos si sigues siendo tan tierno, Tamaki!

— ¡¿T-T/n?!