Pequeño Demonio ★

XV - Milenios

– Tim – La voz severa de Bruce no hizo más que aumentar la frustración del chico frente a la computadora.

– Sigo intentando pero el sistema no detecta ninguna señal.

– Arreglalo.

– No puedo – Soltó cansado – Si la computadora no recibe la señal del rastreador significa que no está en línea ¡Lo destruyeron! puedo activar la búsqueda todas las veces que quieras pero no va a servir de nada, lo sabes.

El mayor volcó la mesa de comida que Alfred les había llevado una hora atrás, no habían probado nada desde que llegaron. Tim intentaba mantener la compostura ya que todos estaban alterados, alguien tenía que hacerse cargo.

– ¡Nunca debímos dejarlo solo! – Explotó Jason – Si tan solo me hubieras dejado ir con ustedes…

– Te necesitaba fuera – Se defendió el murciélago.

– ¡Y fui muy útil en el estúpido tejado!

– ¡Lo hubieras sido si supieras por dónde se lo llevaron!

– Detenganse – Intervino Tim cuando ambos empezaron a acercarse dispuestos a comenzar una pelea, pero fue ignorado por los más altos.

– No me culpes a mi, admite que te equivocaste ¡La jodiste! Con el castigo, el pan y con el chico.

– Cuida como me hablas Jason.

– ¡Se lo llevaron, Bruce! Damián está en peligro, no sabemos que planean hacer con el ¿Y a ti te molesta que sea irrespetuoso?

Dos potencias chocando una con otra, Jason tenía mucho resentimiento guardado hacia su ex tutor, lo culpaba de todo lo malo que les había sucedido a él y a sus hermanos, una lista muy larga de errores sin corregir.

Y Bruce era muy orgulloso, pero más haya de eso era el miedo que sentía al no saber que había sido de su hijo menor. Era más fácil cubrir ese miedo con irá.

– Ahora no tengo tiempo para tus tonterías, necesito encontrar a mi hijo.

– Y antes pensabas que hablar con él era una tontería – Se burló – ¿Cuantas veces tenemos que morir para que dejes de ser un imbécil?

Bruce le dió un golpe directo en el rostro que lo mando al suelo y aunque no lo demostró (y no tenía pensado disculparse) se arrepintió al instante. Tim estába sorprendido, no sabía que hacer, se quedó de lado esperando que Jason no le devolviera el golpe.

Pensó que lo haría cuando se levantó y sus ojos brillaban furiosos, se planto frente al mayor.

– Nunca dejas de decepcionarme – Dijo – Y no me sorprende, yo ya estoy acostumbrado a esto, Bruce – Abrió sus brazos y con sus manos señaló a su rostro herido – Pero ese chico aún espera mucho de ti, estoy seguro de que esta esperando a que aparezcas para ayudarlo – La furia desapareció, dejando un ligero brillo de tristeza, pues el había experimentado lo que expresaban sus palabras.

– Si algo le pasa a Damián por todas las malas decisiones que tomaste, voy a acabarte Bruce Wayne.

La pantalla de la computadora se iluminó con el rostro de Richard esperando a que atendieran su llamada. La sorpresa fue lo que llevo a Tim a responderla.

Jason se alejo con los músculos de sus brazos tensos y una mirada retadora.

Y Bruce imperturbable, habiendo recuperado la calma ahora listo para tomar el control se giro hacia la pantalla justo en el momento en el que un preocupado y herido Dick Grayson aparecia en ella.

– Ví las noticias – Comenzó – Díganme que saben dónde está Damian.

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