17

12.9K 1.4K 640
                                    

Jimin pellizcó mis mejillas con sus deditos cuando la música acabó y comenzó una de melodía más lenta.

Dirigió su mano libre a mi pecho y la dejó descansar ahí, sin dejar de jugar con mis mejillas con la otra.

Y le sonreí con dulzura.

Y él, mirándome a los ojos atentamente, también sonrió.

— ¿Vas a quedarte conmigo? No me respondiste cuando te pregunté más temprano. — me susurró sin dejar de sonreír.

Le sostuve con fuerza de la cintura. Me gustaba saber que le tenía cerca, se sentía como el cielo que me sonriera así.

¿Cómo era posible que apenas hubieran pasado dos meses y yo lo quisiera tanto?

— Claro que sí, brujito lindo. Me voy a quedar contigo. Voy a invocar demonios contigo si es lo que quieres. — le respondí con voz suave, mirándolo con gran ternura.

Él me hacía débil. Sólo quería decirle lo precioso que era.

— Gusano. — me susurró, y su voz también era dulce y tierna.

— Pero antes debo pasar a llevarle algo de cenar a mi hermana, ya van a ser las ocho de la noche y bueno...

— ¿A tu hermana? — arqueó una ceja al instante.

— Bueno, mi madre está enferma y mi hermana no sabe hacerse algo de comer. Ni siquiera un pan. Si la dejo sola se muere de hambre la estúpida. — sonrojándome, le expliqué entre risas —. Tal vez le lleve algo de Mcdonalds.

— ¿Bromeas? ¡No! Yo te acompaño y hago algo de cenar. A ella, a tu mami y a ti. — me pellizcó la mejilla una vez más, a la vez que hacía un puchero con sus labios —. Más tarde vamos, ¿sí? El papá de Yoongi nos lleva. Caminar no es realmente lo mío, aunque mueva mis caderas de una manera deliciosa.

— No, no, no... Jimin... Por dios...

— Oh, por satanás. Ya dije que yo lo haré. — me mandó a callar, riendo —. Pero claro que tú debes ayudarme.

— Soy una mierda en la cocina. — admití sin más.

— Ya verás cómo yo te enseño. — lanzó un beso al aire, coqueto —. Serás mi aprendiz.

Lo miré y estoy seguro de que mis ojos brillaban más que mi puto futuro.

Pero entonces todo se fue a la mierda porque, cuando la canción lenta terminó y una nueva comenzó, sentí algo pesado estrellarse con nosotros para hacernos caer al suelo.

— unA lobA EN EL ARMARIO, TIENE GANAS DE SALIR ¡AUUUU! — Yoongi gritó, ahora encima de mi brujito y yo.

— MIN YOONGI, ESTA SEMANA ESTARÁS EN MIS ORACIONES PARA LUCIFER Y NO TIENES NI IDEA DE LOS DESEOS QUE LE PEDIRÉ PARA TI-

Yo sólo empecé a reír al ver cómo Yoongi llenaba la cara de Jimin de besos mientras aullaba para molestarlo.

...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mala fama 評判: KOOKMIN AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora