Narra Octavio:
Todo fue rápido, incluso ¡más rápido que mí! Y eso es imposible. Lo único que recuerdo fue estar riendo por un chiste de Elliott y luego todo se volvió oscuro, ahora abro mis ojos y no solo no estoy en donde debería estar, ¡TAMPOCO TENGO PIERNAS! Bueno en realidad hace mucho no tengo piernas, es una historia graciosa, pero ahora no tengo mis preciosas patas de metal. Esto no puede ser perdonado, sea quien sea el que está detrás de todo esto, ¡Va a pagar y no con dinero!
-Al fin te despertaste- habló una voz grave, aunque recorría a mi alrededor con mis ojos no encontraba el lugar de donde provenía.
-Bueno, no sabía que me había ido a dormir- respondí sonriendo.
El hombre salió de la oscuridad, era el típico tipo con bata blanca y anteojos que parecía loco y trata a los demás como ratas de laboratorio... Si, como Caustic solo que él me cae bien- Te arrancaré la sonrisa de tu cara- sonrió maquiavélicamente.
Este pendejo se cree que me da miedo- Pues te reto a intentarlo- desafié exagerando mi sonrisa.
-Como usted diga- giró la perilla de una fuente de energía.
¿Electrocutarme? ¿En serio? He vivido cosas peores que eso- Cuando acabes con tu show de loquito, ¿me devolverás mis patitas?- hice un pucherito.
-No- encendió la fuente de energía.
Sentí como todos mis músculos se estremecían por la corriente eléctrica corriendo por todo mi cuerpo- ¡Wow!- festejé- ¡A eso le llamó un subidón de energía!- Lo miré mientras festejaba feliz.
El hombre se enfureció- A ver si puedes con esto- aumentó la cantidad de voltios.
¿Dolía? Como la concha de su madre, pero podía soportarlo y llevar mi plan a cabo- ¿Eso es lo mejor que tienes?- reí- Sigue intentando amigo.
El frenó la máquina- ¿Cómo es posible que no estés sufriendo?- preguntó enfurecido.
-Amigo- reí- Me duele, pero la excitación es mayor- le guiñé el ojo.
El dio un rápido vistazo a mi entrepierna y al ver que estaba erecta volvió a mirarme-...- se quedó en silencio.
-¿Te gusta lo que ves?- levanté una ceja.
El se relamió los labios- Interesante- deslizó su mano por mi abdomen y frenó en entrepierna.
-Vamos viejito, libera la serpiente- insistí.
El me soltó los brazos- Total no puedes irte corriendo- el rió.
Jaja muy gracioso, viejo culiado- A ver ese paquete- coloqué mis manos en su erección.
-Espera- se me acercó a la cara- Bésame- ordenó.
-Con gusto- dije y me aproximé a sus labios, pero aproveché que estaba cerca y lo ataqué, lo di vuelta y con mis brazos lo comencé a ahorcar.
-Su...Suéltame bastardo- dijo quedándose sin aire.
-Cállese viejo pervertido.
Seguí aplicando fuerza en su cuello hasta que se asfixió- No tengo piernas, pero si brazos- dije soltando su cuerpo al piso.
Me tiré de la camilla en la que estaba, y me fui arrastrando por el piso hasta que pude dar con mis piernas, las cuales se encontraban en una repisa- Muy alto- dije al ver que no llegaba con mis brazos, miré hacia mis lados y ví una escoba- Bingo.
Tiré mis piernas robóticas al piso con ayuda de la escoba y me las coloqué, pero al no tener ayuda de una herramienta no quedaron muy ajustadas, por lo que no podía moverme muy rápido y eso me fastidiaba-Bueno, ahora ¿A dónde?- solté cuando me puse de pie. Salí de la habitación y me puse a deambular por la instalación buscando una salida, pero sentía que algo importante me olvidaba.
Me escondí tras un pilar al escuchar que alguien se acercaba- El jefe fue apuñalado por una loca de pelo rosado- dijeron los soldados que pasaban por el pasillo.
-¿Una loca de pelo rosado?- repetí para mis adentros- ¡Ajay!- dije recordando que seguro mis amigos también estaban en esta instalación.
-¿Qué demonios?- dijeron los soldados al verme.
-Hola amigos- sonreí carismáticamente- De casualidad, ¿la chica de la que hablan tiene dos rodetes en el cabello?- pregunté.
-Llama refuerzos- gritó uno al otro y luego me comenzó a disparar.
-Que mal educados- dije y comencé a correr.
Para mi suerte, todas las balas me erraron (deberían contratar mejores soldados) y para mi mala suerte, ahora tenía unos 15 soldados persiguiéndome, no tenía arma alguna y no podía correr tan rápido- ¿Qué harás Octavio Silva?- me pregunté. Dirigí mi mirada hacia una mesa que se encontraba más adelante, esta tenía un par de granadas de fragmentación sobre ella, y a su lado unos tanques de gasolina- Explotar todo al carajo- dije sonriendo alocadamente.
Fui directo a la mesa, agarré las granadas, corrí los barriles a un lugar estratégico y esperé a los soldados para luego tirar las granadas- Como dice mi gran amiga Anne Marie- grité a los soldados sonriendo- ¡Ciao Adiós!
Una gran explosión los consumió, esperé a que me alcanzara para comenzar a correr... ¿Qué? Me encanta la adrenalina.
La imagen era perfecta para una fotografía, yo corriendo, una explosión de unos hermosos colores naranjas y parte de cuerpos volando para todos lados, que lastima que me sacaron mi celular. Igual la perfección duró poco, al no correr tan rápido la explosión me alcanzó y me derribo, uno de los soldados sobrevivió y estaba apuntándome con una pistola en la cabeza.
-Mataste a todos mis compañeros- dijo este enfurecido totalmente.
-¿Lo... siento?- dije alzando las manos.
Su mirada estaba totalmente tomada por la locura, pero de repente su cabeza voló en mil pedazos- ¿Qué demonios?- dije al ver lo que acababa de pasar.
-Silva, si no estoy yo aquí te me mueres a los segundos- se quejó Ajay Che.
-¡Hermana!- exclamé y la fui a abrazar- ¡Estás viva!
-¿Acaso dudaste que podía hacer todo esto sola?- dijo correspondiendo el abrazo.
-Obviamente- respondí.
Recibí un rodillazo en las partes bajas de su parte- Vamonos- dijo ella siguiendo su camino- Tenemos que encontrar a los otros.
Yo me quedé tirado en el piso- Espera- dije recuperándome de su golpe- Ahora sí, ¡vamos!- exclamé con mis dedos en forma de cuernos.
-¡Agg este niño!- se quejó ella.
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I Got Bamboozled... Maybe? (MiragexCrypto)
Fanfiction-¿Qué? ¿Pensaron que era el fin? Pues fueron... ¡bamboozleados! Jajajaja...jaja..ja... ¿En serio dije eso?... Saben que olvídenlo y lean la historia- Se va a llorar. (Esto es una segunda parte, la primera es "I Got Bamboozled")
