Posesivo

Capitulo 7: Olvido

El eco de mi propia voz resuena entre mis pensamientos. Escenas vividas en aquel lugar, el olor a barro mojado así como el de la hierba húmeda y ese olor tan nefasto como el de la sangre agolpan mis recuerdos noche tras noche.

Sin duda lo que aconteció , lo que viví en esa sangrienta guerra no será olvidado ni por mi ni por nadie.

La pérdida de amigos, compañeros e incluso familiares es algo tan traumático como antológico.

La guerra no es más que egoísmo, odio y desolación.

Y otro suspiro escapa de boca mientras mantengo mis ojos cerrados deteniendo así mis pensamientos por unos instantes.

Mis oídos se concentran en el eco de las moléculas de agua que chocan contra las baldosas del baño.

Oigo el goteo constante de estas así como en mi respiración el vapor del agua caliente.

Aún con los ojos cerrados busco la llave del agua para cerrarla y salir de la ducha para vestirme y dirigirme a la torre Hokage para ver si me dan la autorización para volver a mi trabajo como ninja de la hoja.

Salgo del cuarto de baño con una toalla anudada a la altura de mi pecho así como una en mi cabello.

Busco mi ropa interior en uno mis cajones , así como la ropa que me pondré.

Mientras término de vestirme, en mi cabeza hay algo que no para de atormentarme ,y ese es el echo por el cual me da miedo salir y encontrarme con él.

No es que le tenga miedo a él, ni mucho menos, nadie a estas alturas de la vida puede temerle a Naruto, sino todo lo contrario , es respetado y admirado por todos.

Naruto...

Sólo pronunciar su nombre hace que en mi rostro se dibujé una sonrisa bobalicona.

De hecho , Naruto, tras la guerra se convirtió , así como otros en un héroe. Un héroe del que yo llevo enamorada toda mi vida, lo amo, lo admiro, tengo una gran devoción por él, no sé si será gratitud por el echo de que gracias a él yo he llegado hasta donde estoy. Pero tengo unos fuertes sentimientos hacia él.

Me he hecho fuerte gracias a admirar su fortaleza desde lejos, o por mi intento de llegar hasta él de una forma o u otra siempre e querido estar y caminar al lado de Naruto ,tanto así que en varias ovaciones e puesto mi vida en peligro por él, sin importarme nada la muerte. Por que a pesar de que era consciente de que si moría era por él y para él, morirá feliz por que moriría protegiendo a lo que más quiero.

Pero eso no quita el hecho que me sienta mal , o mejor dicho miedo a su rechazo por parte de mi en tales circunstancias el confesarle todo lo que significaba y sentía por él.

Mientras camino por las las calles de una reconstruida Konoha y antes de ir a la Torre decido pasarme por la casa de mi antigua maestra, que es como mi madre.

Mis pies se saben a la perfección el camino y automáticamente me llevan hasta su puerta.

"Tock,tock,tock"

-¿Quién es?.- la escuche preguntar.

-Soy yo Kuronai-sensei.- respondo tranquilamente.

Ella me abre la puerta y me recibe con una linda sonrisa que yo respondo con otra llena de cariño.

-¡Que sorpresa Hinata! Me alegra que estés por aquí , anda ven, pasa.- me dice mientras pone una mano sobre mi hombros y me empuja hacia dentro.

-Gracias .- le respondo a medida que nos adentramos a la casa.

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