La Niñera; One Direction (+18)

c u a t r o

Capítulo cuatro.

Es una completa bobada y mucho más perversidad, el que ahora me esté imaginando que si tan sólo tuviera ese bulto, que todos los hombres tienen, en este mismo momento estuviera erecto de tan sólo pensar que ellos podrían estar arriba de mi, mientras suplicó por más.

Si, lo sé. Es patético, pero esos fueron mis pensamientos.

Grr.

Decidí que no era sano para mi mente pensar de esa manera y menos delirar que follo, con alguien de los chicos que apenas y conozco.

Baje las escaleras las cuales se me hacían larguísimas y eternas, para intentar sorprenderlos pero la que se llevó la sorpresa fui yo al ver que la casa estaba totalmente sola. Sin una sola persona, aunque en realidad había quedado del asco.

Esto iba progresando.

— Chicos — grité para llamar su atención, y salieran de donde se encontraran, si es que estaban en casa, pero nadie apareció.

Harry's POV

— Esa es ______, ¿no? — dijo Niall.

— ¡Nooo!, ¿Cómo creés?, es Demi Lovato — le dijo Liam llenando el cuarto de sarcasmo.

— ¡Perdón! —dijo Niall- Hijos de perra, así me burlaré de ustedes cuando hagan preguntas estúpidas — gruñó haciendose el ofendido.

Al menos acepta que fue estúpido.

— Sí —dijo Louis tratando de defenderlo — Niall no tiene la culpa de tener un cerebro del tamaño de un cacahuate, o de probablemente no tener — dijo y se hecho a reir a carcajadas, obteniendo una mirada fulminante de parte de Niall.

— ¡Mejor no hables! ¿Quieres? — propuso Niall con frustración.

— Uh, ya se enojo la rubia, o debería decir ¿oxigenada? — bromeó una vez más y se volvio a hechar a carcajadas pero lo callé cuando algo se me vino a la mente.

— Oigan, follarla en este mismo momento no estaría mal — comenté pícaro.

-¿A quién?- preguntó Niall.

Ahora con toda razón lo abuchearia.

-Ya, ya, traigan a una paloma...- comentó Louis- Creo que va a entender mejor que Niall- término de decir la oración y sonreimos por el chiste, pero Niall nos fulmino a todos con una mirada asesina.

— Hermano, te defendería pero es la verdad — le di mí apoyo de forma burlona y lo abracé por los hombros — A veces haces preguntas tan estúpidas — dije y me vió mal, pero era la verdad — Bueno, volviendo a la pregunta — dije y retire mi brazo de sus hombros —¿Qué? ¿Aceptan? — pregunté y ellos se miraron entre si.

— Harry creo que vamos muy rápido — me dijo Liam

— Si, ¿Pero porqué no empezar por la seducción? — ofreció muy pícaramente Zayn.

_______'s POV

Ya que los chicos, según yo, no se encontraban en casa, comencé a recoger los vasos y basura que quedaba de su fiesta.

Había de todo.

Vasos, botellas de alcohol, platos, comida, botana y más cosas que estaban desconocidas para mi pequeña cabeza; tiradas en la sala y el resto de la casa.

Después de estar alrededor de una hora deje la sala impecable, a excepción de un par de vasos que cubrian la superficie de la pequeña mesa de centro.

Jale la bolsa donde había estado hechando la basura, y comenze a meter los vasos color rojo a la bolsa, iba a tomar el siguiente pero unas manos enrollaron mi cintura, haciendo que me sobresaltara.

¡Mierda!

Toda la maldita bebida que había dentro del vaso estaba encima de mi nuevo móvil, cubriéndolo totalmente. Abrí los ojos disparatadamente, ¡Dios, mi iPhone 6! ¡Estaba arruinado!.

Me gire bruscamente pero mi corazón de aceleró al encontrarme con unos conocidos verde esmeralda.

— ¿Ha-ha-rry si t-e das cuen-ta de lo q-ue me hi-ciste ha-cer, verdad? — mi voz se cortó, demostrando que todo el enojo y furia que tenia hace unos instantes por haber ocasionado que la bebida contenida en el vaso haya arruinado mi nuevo iPhone 6, se habían esfumado convirtiéndose en demasiados nervios por tener en esta situacion a Harry y a mí.

— ¿Qué? —preguntó y luego sonrió — ¿El haber arruinado tu iPhone 6?— preguntó con un tono sínico dándome millones de razones y ganas de ahorcarlo.

— ¡Ah! — grité desesperada por como se reía en mí cara el haber arruinado el celular — Eres un maldito — Murmuré tratando de trasmitir odio, y me trate de zafar de su agarre pero como me tenia agarrada de la cintura era casi imposible a parte le valia en lo mas mínimo lo que le decía — Como te ries y te burlas así después de haber arruinado a m... — Fuí interrumpida por los labios de Harry posados en los míos.

Me quede congelada, no le seguí el beso de lo impactada que estaba.

¡Estaba besando a Harry!

Harry me mordió el labio animandome a besarlo como el lo hacia pero no podía y no debía.

Sus labios eran tan suaves y se movían rápidamente.

Después de un largo rato no pude resistir y comenze a seguirle el juego, aunque mis labios se movían sobre los suyos de una manera torpe.

Si, se supone.

-Ha-ha-rry- hablé entre besos. Sabía perfectamente que esto no estaba bien.

-Emm-m-m- me contestó igual entre besos, pero sin detenerlo.

-Pa-ra, solo so-y la niñe-ra- dije y me traté de separar empujandolo en el pecho pero no lo movi ni 2 centímetros, al contrario, ahora tomo de mis caderas atrayendome mas a su cuerpo.

Solté un pequeño gemido al sentir el pequeño bulto que se empezaba a formar en su entrepierna.

Tengo que reconocer que esto era excitante y aún más cuando hace meses que no había estado con algún chico así.

Abrí la boca ligeramente intentando oponerme o decir algo que lo hiciera alejarse de mi, pero no se me ocurrió nada y menos cuando Harry me callo completamente al depositar sus labios nuevamente sobre los míos.

El tono aumentaba cada vez más y no tenía que hacerlo por vuelvo a repetir... ¡Esto está mal!, pero después de todo estaba totalmente vencida y las ganas de continuar y querer llegar a donde esato llegaría me invadían más.

Al paso de unos segundos más, entre el beso, cada uno soltaba gemidos, jadeos y ahora podía sentir su gran erección en mi abdomen, haciendo que la temperatura en mi cuerpo fuera aumentando.

¡Joder!. Sabía perfectamente que esto estaba mal, pero se sentía tan bien que no tenía la más mínima intención de parar.

Harry tomo de mí como los recién casados, y sin terminar de besarnos subimos las escaleras.

Paro en una recámara a la cual nunca había entrado y aunque lo hubiera hecho en este instante no lo sabía por la oscuridad que había, aparte de que estaba cegada por el deseo que había dentro de mi.

Entramos en aquella habitación y pude distinguir la tenue luz de la luna que se colaba por las delgadas cortinas que adornaban el gigantesco ventanal que había, me recostó en la cama y aprecié su rostro.

Definitivamente era atractivo y mas de lo que imaginaba, o de lo que esperaba.

En su mirada se notaba lujuria, la lujuria que me había compartido.

No podía creer lo que estaba a punto de hacer, y lo peor, que no hacia nada para detenerlo.

Harry se subió con delicadeza sobre mi, de forma que no me aplastara y colocó una mano sobre mi cadera para después, volver a atacar mis labios con fiereza.