FIGTH WITH ME 💢 [KOOKTAE] TERMINADA

• Fight •

—¿Cómo te sientes?— Wook le había preguntado apenas se apareció en su lugar donde descansaba antes de entrar al octágono.

—Estoy un poco nervioso pero bien.

—Es normal que estés nervioso, es un nuevo público. Pero estoy seguro de que los vas a dejar impresionados. Ganes o pierdas al final de día ellos te darán su respeto.

Taehyung sonrió, aquello realmente le motivó pues era verdad. Aunque supiera lo bueno que era también se daba cuenta de la calidad de peleador que era Jungkook y por más que quisiera hacerce el fuerte sabía que sería difícil ganarle a Jungkook. Pero esta era su oportunidad de oro, demostrando que puede dar una gran pelea sin necesidad de verse tan varonil, rompiendo los estereotipos impuestos desde hacía décadas.

Una vez Wook lo dejó sólo sintió unas manos posarse sobre su cintura y antes de siquiera asustarse pudo percatarse de quién se trataba.

—Jungkook, me asustas bruto. ¿Qué haces aquí?

Jungkook sonrió enormemente y sólo se dedicó a besar al contrario que gustoso recibió el beso.

—Basta— se separó riendo— van a vernos.

—Perdon precioso, pero me estaba matando no verte. Tuve que correr mucho para venir aquí. ¿Estás bien?

—Sí... sólo un poquitín nervioso.

—¿Por qué? Lo harás increíble.

—Es sólo que me pone nervioso tus fans, no quiero que me abucheen — puchereó, causando ternura en el otro.

—No les hagas caso, si sientes muchos nervios mírame a mí, sólo a mí. Yo siempre voy a estar ahí sintiéndome muy orgulloso.

Taehyung sonrió en grande y se ablanzó al contrario para llenarlo de besos, rodeo sus brazos en el cuello de Jungkook y lo besó con pasión. Una vez terminó su sesión de besos Taehyung nalgeó a Jungkook incitándolo a irse de una vez porque pronto empezaría su pelea.

—Vete, es tarde. Buena suerte.

—Gracias bebé, también tú.

Y el pelinegro salió del lugar, yéndose totalmente embobado y sonriente de ahí luego de recibir los deliciosos besos de su amor.

—¡Taehyung!— la voz de su padre le hizo saltar. Por un momento el pánico lo embargó, ¿Desde cuándo su padre estaba ahí?

—Papá...

Vio al hombre adentrarse totalmente al lugar, con su mirada sería y su postura demandante. Tragó saliva con dureza, esperando cualquier comentario hiriente o regaño de su parte pero lo único que recibió fue un abrazo que lo dejó totalmente desconcertado, no pudiendo corresponderle porque sólo se quedó ahí tratando de procesar lo que sucedía.

—Buena suerte, hijo. Lo harás bien.

Cuando su padre se separó lo único que podía hacer era verlo con total sorpresa pues su voz pareció esfumarse.

Tan sólo asintió hasta verlo dejarlo solo de nuevo. Luego de eso todo su equipo entró, faltaba pocos minutos para iniciar y el bullicio de la gente retumbaba en donde se encontraba.