Un Amor Entre Flechas Y Espadas (Aioros x Shura)

Capitulo 38

Narra Shura:

Después de terminar el almuerzo, Aioros me llevo nuevamente a la cama para que tome un descanso y se me pase completamente la resaca que tenía. Aun no puedo creer que ayer por la noche le haya dicho todo ese tipo de cosas a él, me siento avergonzado, aunque realmente en lo más profundo de mi corazón pienso y siento eso, se que no podré borrar o cambiar el pasado pero estoy dispuesto a hacer lo posible para ser feliz con él, como tanto añore cuando apenas era un niño

Dos días después de aquel incidente, Aioros se la pasado saliendo por las mañanas para luego regresar justo a la hora en que terminó de preparar algo para comer, cada vez que despierto no lo encuentro al lado mío, abrazándome cálidamente como suelen ser nuestro despertar, aún no entiendo que es lo que realmente hace allá afuera del santuario

Por ahora solo me dedico a preparar un plato de spaghetti, no quiero seguir atormentando a mi cerebro con ese tipo de pensamientos, pero me es imposible, a pesar de todo yo lo quiero es más ¡Lo amo! Y me preocupa que tal vez se esté cansando de mi ¡No! Eso es imposible

¡Oh Zeus! ¡¿Qué ideas se me vienen a la cabeza?! Aioros me prometió que me amaría únicamente a mi, además lo conozco desde que es un adolescente, es obvio que no me puede mentir, debo dejar de pensar en tonterías él no sería capaz de hacerme sufrir ¡No, el no!

Me acerque hasta el lavaplatos y empezé a restregar el agua fría sobre mi rostro para luego beber un poco de agua y continuar preparando el almuerzo. Por poco y termino quemando las pastas, que torpe soy. Justo en ese momento siento el cálido y acogedor cosmos de Aioros, quien al acercarse a mi, me dió un beso en la mejilla. Definitivamente me siento muy estúpido por pensar ese tipo de cosas sobre él

Aioros: Me encanta verte cocinar Shu... Hace que me imagine muchas cosas -Colocó una de sus manos sobre mi cintura

Shura: ¿Cómo que cosas? -Levanté una ceja

Aioros: Sobre como serían nuestras vidas cuando nos casemos... Imagínate Shu tener nuestra propia casa... Hacer muchas más actividades juntos... Tendríamos mucha más privacidad... -Beso nuevamente mi mejilla -No me separaría de ti en las noches ¿No te parece hermoso?

¡¿Cómo pude haber pensado eso de Aioros?! Me encantan las palabras que me dice. Desearía muchísimo casarme con él, tenerlo siempre a mi lado, suena cursi pero realmente quiero eso.

Shura: Pero claro que sí... Sería fantástico- Sentí sus manos recorrer parte de mis caderas- Por cierto Aioros... ¿Cuanto tiempo más vas a seguir saliendo del santuario por las mañanas?

Aioros: Solo será ésta semana cariño... Además es solo para relajarme y tomar un poco de aire... Desde que reviví no me había tomado mucho tiempo para mí... Extrañaba pasear por el bosque y escuchar el cantar de los pájaros a mi alrededor...- Soltó un suspiro

Shura: Te entiendo... Haz estado demasiado tiempo ausente, mereces salir a tomar un descanso... No hay nada mejor que pasar un momento agradable en la naturaleza- Una sonrisa apareció sobre mis labios

Aioros: Me agrada mucho que comprendas mi amor- Dejo un pequeño beso en mi cuello -No voy a negarte que llegue a pensar que tu estabas algo incómodo debido a que no te presto mucha atención- ¿Tanto se me nota? Me quedé estático y en silencio por unos segundos, no tengo idea alguna sobre que responderle -Shura... ¿Te encuentras bien?

Shura: Si claro que si- Trate de sonar lo más sereno posible- Aioros... ¿Puedes ayudarme sacando algunos trastes para almorzar?

Aioros: ¿Como tú digas Shu? -Notaba en su voz que no estaba del todo convencido con mi respuesta, luego se soltó de mi para posteriormente hacer lo que le encomendé- Olvide decirte que los spaghettis huelen muy bien