Somebody to love 【Hanahaki Disease】

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El pelirrojo salió de la ducha, con únicamente una toalla rodeando su cintura. Y abrió con sorpresa los ojos, al ver que su habitación se encontraba completamente limpia. Claro, exceptuando unas manchas oscuras que denotaban que allí hubo sangre. El lugar parecía una ex escena del crimen de cualquier serie policiaca genérica.

Pero lo que más le sorprendió fue ver a su amigo en una esquina, estático y con las mejillas contemplando el cuerpo palido y un poco delgado que estaba descubierto, el cual era adornado con pequeñas gotas de agua.

─¿Ángel?─ Pregunto Crowley, sacando del pequeño trance en el que se encontraba Zira, el cual salió inmediatamente de la habitación.

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Ya vestido, el de cabellos rojizos se sentó en el sofá enfrente del televisor. Aún con el cabello ligeramente húmedo, tomó su teléfono y comenzó a navegar por el mágico mundo del internet, tratando de buscar algo de información respecto a su enfermedad.

La información que encontró fue escasa, se trataba de artículos alarillistas que hablaban de un místico mal antiguo del cua se sabía únicamente por pergaminos japoneses antiguos. A pesar de el sitio web de dudosa reputación en el que estaba ese artículo, descubrió muchas cosas. Según esos pergaminos, decían que la menta ayudaba a reducir el dolor, y evitar el consumo de alcohol disminuía la congestión. También descubrió que depende de el tamaño de los pétalos era la gravedad de el mal, y que mantener la mente ocupada ayudaba a reducir la frecuencia de los episodios tos.

Iba tan bien hasta que encontró un molesto anuncio a mitad de el sitio web. Anuncio el cual no entendió en su totalidad.

─¡Aziraphale! ¡Te necesito!─ Gritó exageradamente, (lastimando un poco su garganta en el proceso) tratando de llamar la atención del rubio que se encontraba en la cocina. El cual llegó lo más rápido posible.

─¿Sucedió algo? ¿Estás bien? ¿Necesitas ayuda?─ Pregunto rápidamente, tratando de recuperar el aliento.

─No entiendo esto, ¿Me explicas? ─ Hizo una mueca de disgusto, a decir verdad no le gustaba no entender el complicado lenguaje de los jóvenes.

El rubio solo asintió con la cabeza, tomando el teléfono delicadamente el aparato de las manos del contrario.

"Las diez razones por los cuales los chicos con gran 🍑 son mejores, la número 6 te sorprenderá." Estaba escrito con letras grandes, y al leer esto las mejillas de Aziraphale se tiñeron de un rojo carmesí.

Al ver la expresión de Zira, Crowley alzó las cejas confundido, ladeando la cabeza.

─Y ¿Bien? ¿Que significa?─ Pregunto un poco desesperado.

─No es nada importante.─ le entrego el teléfono, ladeando la cabeza repetidas veces.

─No entiendo, ¿Que significa el emoji de durazno?

─Por cierto, ¿Que estabas buscando antes de terminar en ese artículo?─ Trato de evadir el tema.

─Solo buscaba más información, no le entendí nada a la chiflada del otro día.─ Admitió a regaña dientes, bajando la mirada molesto.

─Oh querido, ¿Porque no me preguntaste a mi?─ Se sentó a su lado, tomándolo de las manos. ─Sabes que estoy aquí para ayudarte.

Crowley se sorprendió ante aquel dulce gesto, su cuerpo se estremeció al sentir aquel calor acogedor invadir sus manos frías. Por lo que se acercó más en busca de ese calor.

Miro con ternura aquellos labios rosados, por lo que acercó su rostro lentamente, tratando de probar un poco. Y era capaz de vender su alma solo por un beso de su ángel.

Cautivado, Aziraphale se acercó hacia a el, cerrando los ojos. Acercándose peligrosamente a los labios del contrario.

Hasta que claro, una nube de humo y un horrible olor a quemado invadió la sala.