El arte de vivir

Capítulo 3

Santiago.

Abro los ojos y apago mi alarma, es lunes y son las 8:30 A.M., debo ir a comprar algunas cosas para mi departamento, es mi última semana en esta ciudad, el próximo lunes estaré en Banfield, lejos de mi familia, novia y amigos. Sin embargo, estoy muy feliz por la decisión que tomé, hace dos semanas fui a una fiesta en una zona de la ciudad a la que jamás había ido antes, conocí a una chica, que en cierto modo me hizo replantearme si estaba escogiendo bien lo que quería hacer el resto de mi vida.

Quizás que me dijera que era predecible fue el empujón que necesitaba para armarme de valor y decirles a mis padres que no quería estudiar Negocios y Administración de empresas, el hecho de que una persona que no me conocía de nada me dijera eso, fue como ayudarme a terminar de abrir los ojos, yo no quiero ser predecible, no quiero ser uno más del montón, al contrario, quiero sobresalir en este mundo.

A mis padres les tomó por sorpresa que les dijera los planes que quería para mi vida, porque nunca les había dicho que no me interesaba nada de lo que ellos habían escogido para mí, ellos no tenían ni idea que quiero estudiar arquitectura, jamás se los mencioné y jamás me lo preguntaron, he tenido esta conversación con mis amigos alguna vez, pero ni siquiera yo lo había tomado en serio.

No había tomado en serio algo que de verdad me gusta, e iba a conformarme estudiando algo que no había decidido yo, iba a conformarme con lo que me había tocado. Recién ahora me doy cuenta de que iba a arruinar mi vida por no tomar una decisión correcta.

Por supuesto fue todo un drama en mi casa, tuve que hacerles entender a mis padres que estudiar eso no me iba a hacer feliz y que de esta forma también iba "aportar" al negocio familiar, no me estaban tomando tan en serio hasta que les dije que ya había aplicado a la universidad y que incluso había sido aceptado. No fue fácil lograr que lo acepten y hasta ahora me parece un poco extraño que lo hayan hecho, pero la verdad es que prefiero aprovecharlo en lugar de preguntarme porqué lo hicieron.

Ellos enloquecieron un poco porque había tomado una decisión sin decirles nada, lo que, por supuesto es muy normal, pero eso es algo que yo no suelo hacer, recuerdo la conversación que tuve con mis padres:

—Santiago, nunca antes habías mencionado que estabas interesado en estudiar en esa universidad, y mucho menos en esa carrera... sin duda es una excelente universidad, pero no es la universidad en donde tu mamá y yo estudiamos, esto es algo que me sorprende muchísimo— Lo dijo con su usual tono calmado.

—Ya habíamos planeado todo para que fueras a UINSEAD, todo está listo, ya hicimos las donaciones a tu facultad, tu departamento ya está decorado y listo... — Cuando mi mamá dijo esto último lo primero que pensé fue ¿Decorado? ¿En serio? eso a quién rayos le importa, en todo caso habría querido decidir eso yo con mi novia —Además Lisa y Cristian irán allí también—

— ¿Acaso esa universidad tiene un buen equipo de natación? — Pregunta mi papá. UINSEAD tiene el mejor equipo de natación de todo el país, y por mi buen desempeño en el colegio, ya estaba prácticamente adentro, soy muy bueno en ello, sin embargo, es sólo un pasatiempo que disfruto mucho.

Yo los escuché atentamente y luego inicié con mi postura.

—Mamá, papá — Me aseguré de mirarlos a ambos —Es cierto que nunca antes mencioné que quería estudiar algo diferente a lo que ustedes querían ¿saben por qué? — Ambos me miraron con atención —Porque ustedes simplemente decidieron todo lo que yo iba a hacer y ni siquiera me preguntaron qué era lo que a mí me gustaba, que era lo que yo quería ¡no lo hicieron nunca!

—Pero Santiago— Mi madre me intentó interrumpir, pero la ignoré. Ahora era mi turno de hablar luego de haber escuchado su negativa.

—Desde hace dos años que tenía en mente estudiar arquitectura, pero por alguna razón pensé que no era una opción para mí, eso fue muy tonto de mi parte, porque al fin y al cabo es mi vida ¿no? Sin embargo, cuando fue momento de enviar las postulaciones a las universidades, me di cuenta que debía hacerlo, y realmente agradezco haberlo hecho, porque me aceptaron y estoy muy feliz por eso, significa que sí tengo las habilidades para estudiar en esa universidad... — Respiro profundo.